La cúpula del PSOE trata de frenar el malestar por el fichaje de Lozano

Las conversaciones nocturnas y de primeras horas de la mañana del entorno de Pedro Sánchez con algunos presidentes autonómicos ha surtido efecto. Los barones territoriales han hecho ostensibles esfuerzos por rebajar la tensión en el partido propiciada por la entrada en la lista de Madrid de la exdirigente de UPyD Irene Lozano.

Todos se vieron las caras a la entrada de la reunión del comité federal. Todos menos el presidente de Asturias, Javier Fernández, que no ha acudido al acto y la presidenta andaluza, Susana Díaz que llegó a la mitad de la intervención del secretario general, Pedro Sánchez, más de una hora después del horario fijado como comienzo de este comité federal convocado para aprobar las listas electorales. En cualquier caso y pese al plantón de anoche del representante andaluz en la votación de la lista de la exdiputada de UPyD, Díaz no ha pedido intervenir durante el comité federal, que se celebra a puerta cerrada.

Los demás barones echaron agua al fuego. El extremeño Guillermo Fernández Vara reiteró que Lozano tiene que pedir disculpas por haber insultado "a miles de socialistas honrados". Pero el matiz ha estado en que apoya las decisiones de su secretario general.

La actitud del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page fue conciliadora con toques de ironía. "Cuando Irene Lozano conozca en unos días a muchos socialistas se dará cuenta de que no somos unos corruptos", ha señalado.

"La mejor prueba de que Lozano ha rectificado su opinión es que va en una candidatura del PSOE", ha zanjado Carme Chacón en un tono tan conciliador como el presidente valenciano, Ximo Puig. Como una "ocurrencia"de Pedro Sánchez ha tachado la decisión el exlíder de Madrid, Tomás Gómez

En su intervención, Pedro Sánchez se ha dirigido "a quienes os incorporáis por primera vez, venidos de fuera y de dentro del partido" para pedirles "la exigencia de trabajar duro, con ejemplaridad, escuchando y dialogando, teniendo siempre presente a los millones de hombres y mujeres” que ven en el PSOE una expectativa de cambio.

En este comité federal, en el que planea el conflicto interno por la incorporación de la exdirigente de UPyD Irene Lozano, el líder socialista no ha hecho una mención expresa a lo sucedido, sino que se ha extendido a resaltar los valores del PSOE y la tarea que tienen por delante. “Vosotros y vosotras somos os representantes de generaciones que a lo largo de 136 años de historia se unieron para afrontar una enorme tarea de cambio”.

La mitad de su discurso, no obstante fue para reiterar algunas de las propuestas ya conocidas y para atacar al Gobierno que presidente Mariano Rajoy, que tachó de “fraude” tras enumerar algunos de sus incumplimientos. “Yo creo que nadie debería ir a votar con vergüenza ni confiar en quienes les avergüenzan”, señaló, en referencia a las palabras de Montoro sobre la vergüenza que sentían militantes y dirigentes del PP de su propio partido. No faltan en los recursos de Pedro Sánchez sus referencias a Cataluña porque su convivencia está amenazada. Diálogo es lo que falta, según el líder socialista.

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha tomado la palabra ante el Comité Federal de su partido, que este sábado aprobará las listas para las próximas elecciones generales, pese a que la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, no había llegado todavía, y con la ausencia del presidente de Asturias, Javier Fernández, que no asistirá.

Sánchez ha comenzado su intervención ante sus compañeros, convocados a las 10,00 horas, después de entender que ya había 'quórum' para empezar. Este viernes, el secretario de Organización del PSOE-A, Juan Cornejo, se ausentó de forma deliberada durante la votación en la Comisión Federal del Listas del PSOE de la candidatura presentada por los socialistas madrileños, por su discrepancia por la inclusión como número cuatro a la exdiputada de UPyD Irene Lozano.