Primer desalojo en Cádiz pese a la mediación del nuevo alcalde

Ni la mediación del nuevo alcalde, José María González (Por Cádiz Sí Se Puede, apoyada por Podemos), ni la presencia de cuatro de sus ediles ha evitado esta mañana el primer desalojo de una vivienda por el impago del alquiler. La policía ha retirado en volandas a los concejales y al resto del grupo para consumar el desahucio. La familia no ha podido afrontar el alquiler tras el vencimiento de la renta social que abonaban. El Ayuntamiento los ha trasladado a un hostal hasta encontrar una solución. "No es una derrota. Es un problema de muchos años", ha argumentado el regidor tras no haber prosperado su mediación.

El alcalde ofreció a los propietarios del inmueble, situado en la calle Benjumeda, que el municipio afrontaría el pago de una mensualidad para ganar tiempo y buscar una solución. Pero los dueños del piso se han negado y han seguido adelante con el desahucio. Tampoco aceptó "la juez titular del juzgado de primera instancia número 5 una moratoria que les permitiera garantizar una solución habitacional a esta familia", según informa el Ayuntamiento,

La familia afectada está formada por Antonio Moreno, enfermo y con una pensión por discapacidad, su esposa y una hija de 16 años. La Policía, sin el apoyo de los agentes locales, ha auxiliado a la comisión judicial encargada de ejecutar el desahucio, que fue evitado hace 20 días por una movilización similar a la de hoy.

Desde hace 25 años, vivían en el piso y disfrutaban en los últimos años de un alquiler social de la Junta de Andalucía que ha vencido. Pero la pensión de Antonio no ha permitido afrontar el nuevo precio del alquiler, por lo que se inició la demanda de desahucio. "La propiedad no ha querido, no ha tenido voluntad", ha explicado el alcalde tras afirmar que el Ayuntamiento estaba dispuesto a hacer frente a una mensualidad para ganar tiempo.

González, quien ha pedido a la Junta que también asuma responsabilidad en el problema, ha acompañado y despedido a la familia con un abrazo, que ha sido trasladada en un  un taxi a una pensión. "La familia no se va a quedar durmiendo en la calle", ha afirmado.