El CIS, certero los últimos años aunque con historial de errores
El barómetro se ha desviado en torno a 4 puntos los últimos comicios andaluces
¿Hay que creer al CIS? O, de forma más precisa: ¿Hasta qué punto son fiables sus pronósticos electorales? La encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) difundida este jueves sobre las elecciones andaluzas del próximo 22 de marzo augura que el PSOE ganará los comicios aunque sin mayoría absoluta, y anuncia que Podemos irrumpirá en el Parlamento regional como tercera fuerza. La mayor parte de los líderes políticos han restado importancia hoy al barómetro: César Luena (PSOE) cree que los socialistas obtendrán más apoyo y Juan Marín (Ciudadanos) apunta que los sondeos "nunca han sido fiables" para su formación. Cayo Lara ha ido más lejos: para el excandidato de IU "detrás de muchas encuestas está el poder económico, que no quiere que avance la izquierda en Andalucía". Ante las dudas, hemeroteca: ¿ha acertado el CIS históricamente en sus predicciones para los comicios andaluces?
Un repaso a las encuestas preelectorales del organismo dependiente del Ministerio de Presidencia revela que ha sido bastante certero en las últimas citas. Pero no le excluye de grandes errores, aunque son más lejanos en el tiempo.
En las últimas elecciones al Parlamento de Andalucía, del año 2012, el CIS predijo que el PP sería la primera fuerza y obtendría el 44,9% de los votos, hasta lograr entre 54 a 55 escaños de los 109 que conforman la Cámara regional. Para el PSOE, el barómetro pronosticó un 37,7% de los sufragios (44-46 escaños); para Izquierda Unida, el 9,8% (9-10 parlamentarios) y para UPyD el 2,6% de los votos, al igual que el Partido Andalucista (PA). Los resultados no difirieron en mucho: los populares ganaron las elecciones aunque obtuvieron finalmente el 40,66% de los votos, cuatro puntos menos de los augurados por la encuesta. El PSOE logró sumar algún apoyo más de los previstos por el CIS —39,52% de los sufragios, casi dos puntos más— e IU también cosechó más adhesiones, hasta el 11,34% —un punto y medio más—. La desviación en UPyD fue de menos de un punto (3,35%). El apoyo de IU permitió al PSOE, sin embargo, mantener el Gobierno andaluz tres meses después del triunfo incontestable del partido de Mariano Rajoy en las elecciones generales.
La encuesta preelectoral del CIS en Andalucía acertó también, a grandes rasgos, en los comicios de 2008, 2004 y 2000. En 2008 supo que los socialistas volverían a ganar las elecciones (del 49,2% de los votos pronosticados obtuvieron 48,41%), y sus predicciones no estuvieron lejos ni para el PP (36,8% a 38,45%), ni para IU (6,6% a 7,06%) ni para Coalición Andalucista (4,1% a3,87%).
Por lo general, la tendencia es que el barómetro otorga menos porcentaje de voto a las fuerzas políticas del que finalmente logran. Hay una excepción, 2004: el año del vuelco en las generales con la derrota de Aznar tras los atentados del 11-M el PP sufrió también más desgaste del esperado en Andalucía. El CIS ya decía que el PP no ganaría, pero le daba el 36% de los votos y los populares acabaron casi cuatro puntos por debajo, en el 32,23%. El PSOE subió del 47,1% al 51,07%. En el año 2000, la actualidad fue menos convulsa y el sondeo apenas se desvió dos puntos: predijo la octava victoria consecutiva del PSOE.
Los errores llegan en los barómetros de 1996 y 1994 (en las elecciones de 1990,1986 y 1982 los sondeos no están informatizados). En el 96 el CIS falló —solo en esa ocasión— en cuál sería la fuerza más votada. El año en que José María Aznar llegó a La Moncloa la encuesta decía que el vuelco también se produciría en el tradicional feudo socialista. Le auguraba al PP el 38,4% de los votos, frente al 35,1% del PSOE. Los populares terminaron en el 34,18% del porcentaje de voto, pero los socialistas sumaron nueve puntos más de los previstos, hasta el 44,47% de los sufragios. IU bajó del 18,7% al 14,06%. Era la época de la pinza, y la experiencia de los apoyos entre IU y PP jugó en contra de ambos.
En el 94, el desvío fue de hasta 15 puntos en los votos que el CIS predijo para el PP (del 19,1% al 34,66%) y de 12 en los del PSOE (del 26,6% al 39,05%). IU logró ocho puntos más (del 11,3 al 19,31%). Una diferencia importante, pero la mayor metedura de pata del organismo público alcanzó hasta los 30 puntos. El error sin precedentes en los 27 años de trayectoria democrática del CIS se produjo en las elecciones europeas de 2004: pronosticó que 76 de cada 100 españoles votarían en los comicios. Diez días después, solo votaron 46 de cada 100. Los dos grandes partidos salieron en tromba contra el organismo. El PP pidió la dimisión del presidente y el PSOE juzgó que tal vez debería dejar de hacer encuestas electorales.
Este periódico publicó entonces este reportaje: ¿Sirven de algo las encuestas del CIS? El expresidente del organismo Fernando Vallespín defendió que solventarían el fatal error de los 30 puntos utilizando más filtros y más preguntas. El tiempo, finalmente, parece haberle dado la razón.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.