Un menor detenido confiesa haber matado a un joven en El Ejido

La Guardia Civil ha detenido a seis menores por la muerte de un joven marroquí de 18 años, cuyo cadáver fue hallado el pasado 16 de diciembre en las proximidades del camping de Almerimar, ubicado cerca de la playa de El Ejido (Almería). El cuerpo hallado presentaba hasta 23 heridas realizadas con arma blanca, según fuentes de la investigación.

Dos de los menores, de 14 y 16 años, están acusados de asesinato y esta mañana el adolescente de 14 años ha confesado la autoría del crimen durante su declaración en la Fiscalía de Menores de Almería. El otro ha admitido que presenció el crimen. Los otros cuatro, entre los que figuran dos chicas, están acusados por encubrimiento, al conocer la muerte del joven, llamado Nasr Muh Ou Chaieb, y no revelarla. Estos últimos fueron puestos en libertad ayer tras prestar declaración ante el fiscal del caso.

El principal implicado, de solo 14 años, reconoció su participación en el crimen y alegó que su compañero, de 16 años, asestó a la víctima la primera puñalada, y a continuación él le asestó una veintena de puñaladas con su navaja. Mientras, el segundo adolescente de 16 años reconoció haber estado en la escena del crimen y que ayudó a su amigo a enterrar el cadáver, pero no admitió su participación directa en el supuesto asesinato.  Las iniciales de ambos acusados son P. S. y P. F, y han mostrado arrepentimiento hacia sus propias familias, pero han evitado pedir perdón a la familia de la víctima.

La Fiscalía de Menores ha pedido al juez que los dos supuestos autores del crimen sean internados en un centro con régimen cerrado por asesinato, y el juez del caso ha accedido a la petición dada "la extrema gravedad de los hechos". Mañana viernes declararán ante el juez los cuatro adolescentes acusados de encubrimiento.

La hermana de la víctima, Najlae Muh Ou Chaieb, relata con amargura cómo los acusados negaron que el día de los hechos vieran a Nasr. "Mi padre lloraba y ellos le consolaban. Habían quedado con mi hermano y me dijeron que nunca llegó a la cita que tenían. Pero lo mataron y lo enterraron. Exijo que se haga justicia. No se imaginan el vacío que han dejado". Nasr nació en Tánger pero su familia se trasladó al núcleo poblacional de Balerma cuando el chico tenía dos años. Ahora el matrimonio, que tiene tres hijas, reside en El Ejido.

La principal incógnita del crimen es el móvil que llevó a los menores a matar al joven marroquí. "Sigue siendo asombroso que chicos de esta edad cometan estos actos", explican fuentes del caso.

La Policía Judicial de la Guardia Civil ha llevado a cabo la Operación Airsoft (en referencia al juego de estrategia con falsas armas de fuego) para detener a los menores. El juez del caso ha levantado esta mañana el secreto de sumario.

Tras la desaparición del joven el pasado 20 de noviembre, la familia del joven marroquí presentaron la denuncia correspondiente y la Guardia Civil activó la búsqueda del chico. Tres semanas después, el 16 de diciembre, las repetidas inspecciones sobre la zona dieron su fruto y los agentes hallaron el cadáver que había sido enterrado en un paraje cercano a la playa del núcleo poblacional de Almerimar, en la costa almeriense. El viento había desenterrado parte del cadáver, y por esto un grupo de jóvenes se toparon con el cuerpo "con evidentes signos de violencia" mientras estaban en la zona, según ha informado la Guardia Civil. En la escena del crimen, los agentes recopilaron "una serie de vestigios y pruebas de suma importancia para el buen término de la investigación".

El joven marroquí hubiera cumplido ayer 19 años, según avanzó hoy el diario Ideal. El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 5 de El Ejido instruye las diligencias desde que se halló el cuerpo el 16 de diciembre pasado.