Cientos de miles de manifestantes cierran la protesta de la huelga general del 14-N
Los sindicatos cifran el seguimiento en el 76,7%, la patronal lo rebaja al 12% El Gobierno recalca la "ausencia de problemas graves de orden público" Los empresarios consideran que el paro "es un torpedo contra la recuperación" Según Interior, se han producido 142 detenciones y 74 heridos La caída de la demanda eléctrica, del 11%, es inferior a la de la huelga de marzo Incidentes violentos tras la manifestación de Madrid
Cientos de miles de personas se han manifestado en la tarde de este miércoles en las principales ciudades del país como colofón a una jornada de huelga general, la octava en democracia y la segunda en lo que va de año, que se ha zanjado con un seguimiento del 76,7%, según los sindicatos convocantes, o del 12%, según la patronal. Según el Ministerio del Interior, se han producido 142 detenciones, frente a las 196 registradas durante el paro del 29 de marzo. Hay 74 heridos (43 de ellos, agentes de policía), frente a los 84 (56 agentes) de marzo. Después de la manifestación de Madrid, se han producido incidentes violentos en la plaza de Neptuno, donde la policía se había desplegado para evitar protestas junto al Congreso de los Diputados.
En Madrid y Barcelona, las manifestaciones colapsaron las avenidas por las que debía discurrir la protesta. Según la guardia urbana, hasta 110.000 personas se han reunido en el paseo de Gràcia de la capital catalana, la mitad según la Delegación del Gobierno. En Valencia, 35.000, según la policía local. En Madrid, también 35.000 personas, según la Delegación del Gobierno.
La Delegación del Gobierno había prohibido manifestarse en la plaza de Neptuno, por su cercanía al Congreso de los Diputados. El itinerario de la marcha convocada por Comisiones Obreras y UGT pasaba por esa plaza, donde un fuerte dispositivo policial impedía acceder a la carrera de San Jerónimo. La delegada, Cristina Cifuentes, había advertido que la actuación policial dependería de la actitud de los participantes en la protesta, añadiendo que “aplicaría la ley con todo su rigor” en caso de no respetarse la prohibición de concentrarse en las inmediaciones del Congreso.
A partir de las siete y media de la tarde había convocada una vigilia, hasta las nueve de la mañana del día siguiente, en esa zona. Unas 2.000 personas, según la Delegación del Gobierno, han secundado la protesta, organizada por el Movimiento 15-M y la Coordinadora 25-S, sin mezclarse con la manifestación sindical. La Unidad de Intervención Policial ha dispersado a las 19.45 a un grupo de manifestantes encapuchados que zarandearon las vallas en Neptuno, gritando, lanzando objetos e insultando a los agentes antidisturbios. Los policías amagaron con una carga, y ampliaron el perímetro de seguridad 10 metros.
A las nueve de la noche se ha disparado la tensión de nuevo, con carreras, gritos y amagos de cargas policiales. Los agentes han lanzado botes de humo y salvas de advertencia, mientras grupos de manifestantes arrojaban botellas y otros objetos, provocaban un pequeño incendio y tumbaban las vallas de protección alrededor de la fuente. Decenas de personas se han sentado luego el suelo, frente a los agentes antidisturbios, mientras muchos más se colocaban detrás, extendiendo las palmas de las manos. La actuación policial ha dispersado la multitud alrededor del dispositivo que protege la entrada a la carrera de San Jerónimo. Se han producido después incidentes por la zona de Atocha, mientras en Neptuno continuaba la sentada.
El Gobierno había destacado en su última comparecencia, a las siete y media de la tarde, la “ausencia de problemas graves de orden público". Según Cristina Díaz, directora general de Política Interior, "se han cumplido los servicios mínimos en todos los sectores". Pese a los "incidentes aislados en el centro de algunas ciudades", "tanto los ciudadanos que han secundado la huelga como los que no han podido ejercer sus derechos con plenas garantías", ha añadido Díaz.
El Gobierno ha evitado cuantificar el seguimiento de la huelga, aunque ha aportado algunos datos. En el transporte de larga distancia y mercancías, la incidencia ha sido "baja"; en el urbano, "desigual". Las grandes superficies comerciales, así como Mercamadrid y Mercabarna, “han abierto con normalidad”. "Ha habido incidentes en Valencia y Granada, y un mayor seguimiento en Zaragoza, Sevilla y Asturias. Se han paralizado las plantas de automoción de Cataluña, Galicia, Aragón y Castilla-La Mancha; y el seguimiento en la Administración General del Estado ha sido regular”, ha añadido.
Según los sindicatos convocantes, sobre un total de 14,23 millones de asalariados han hecho huelga 9,19 millones; otros 2,26 millones han participado en los servicios mínimos. Así, solo 2,79 millones de personas habrían acudido a sus puestos de trabajo como en un día normal. El seguimiento habría ascendido al 76,7%. En el anterior paro, el 29 de marzo, hicieron huelga 10,47 millones de trabajadores, es decir, un 12,2% más. Sin embargo, el porcentaje global fue similar, del 77%; esto se explica por la distinta cifra de población activa y de servicios mínimos.
Por sectores, y siempre según los sindicatos, la participación habría sido del 96% en agricultura, ganadería y construcción; de entre el 90% y el 95% en los transportes y la recogida de basura; del 68% en el comercio; y del 55% en los medios de comunicación. La mayor incidencia se ha registrado en la industria. También se ha dejado sentir en la cultura. En la Administración, oscilaría entre el 52% entre los trabajadores públicos del Estado, el 56% en la Sanidad y los servicios sociales, el 62% en las autonomías, y el 75% en la Educación y los Ayuntamientos. CSIF, el principal sindicato de la función pública, no se ha sumado a la protesta.
Por regiones, la mayor participación se registraría, también según los sindicatos, en Cataluña, Asturias y Galicia (85%), seguidas de Andalucía (80%), Cantabria (79%), Madrid (78%) y la Comunidad Valenciana (78%). La menor, en Ceuta (30%) y Melilla (48%), y en el País Vasco (51%); en el resto, no habría bajado del 68% (Canarias y Baleares).
El consumo de energía, un termómetro para cifrar el seguimiento pese a que el cálculo de la demanda es complejo, apunta que la huelga ha tenido menor poder de convocatoria que la de hace ocho meses. Según datos de Red Eléctrica Española, la demanda a las ocho y media de la noche era un 11% inferior a la prevista, siendo esta misma cifra del 15,7% en la huelga del 29 de marzo y del 13,9% en la de 2010.
"Estamos profundamente agradecidos a los trabajadores que han seguido la huelga, en una situación tan difícil, con casi seis millones de parados. Exigimos un cambio rotundo de las políticas del Gobierno, si no nos llevarán al precipicio", ha valorado el secretario general de UGT, Cándido Méndez.
"Frente a políticas que sumen al país en la recesión, deteriorando la convivencia y condenando al paro a seis millones de personas, hay alternativas. Las alternativas van a surgir de la presión de la ciudadanía, como han surgido en la lucha contra los desahucios", ha recalcado el secretario general de Comisiones Obreras (CC OO), Ignacio Fernández Toxo, que no descarta "más huelgas generales en los próximos meses". "Eso está en la mano del Gobierno", ha advertido.
Ambos han enfatizado en su discurso tras la manifestación que la huelga “ha cumplido los objetivos” por los que se había convocado. “Qué gran día para la democracia ha sido el 14-N. Ha habido un gran paro general en toda España y una gran demostración cívica”, ha dicho Méndez. “Ha sido una magnífica noche en Madrid. Es histórica por lo que está llamada a representar en el futuro, el día de hoy no es la estación término de nada”, ha exclamado Toxo.
El presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha criticado que "la huelga es un torpedo contra la recuperación".
El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha reclamado al Gobierno "que cambie su política económica para no dejar a mucha gente en la cuneta". El ministro de Economía, Luis de Guindos (Partido Popular), ha señalado que la huelga "no es el camino adecuado para reducir la incertidumbre". "Somos conscientes de la dificultades de la sociedad pero la hoja de ruta del Gobierno es la única alternativa posible", ha añadido. El Partido Popular ha equiparado económicamente este día de paro al 80% de los desahucios.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.