Justicia y monarquía

Me considero una persona progresista y de izquierdas, defensora no obstante de nuestro actual régimen parlamentario donde la jefatura del Estado la ostenta Felipe VI. Creo que su imagen es respetada fuera de nuestras fronteras y que se trata de una persona formada para cumplir su papel de mediador. Lo prefiero a cualquier otro jefe de Estado expolítico y por tanto siempre inclinado hacia un lado de la balanza. Pero para que este modelo siga teniendo sentido en pleno siglo XXI sería exigible eliminar su inviolabilidad, pasando a ser una persona más sujeta a todo el peso de la ley. Juan Carlos I debería ser juzgado como cualquier otro ciudadano, precisamente por respeto a nuestra Monarquía. En caso contrario estamos poniendo en serio peligro nuestro actual régimen. ¿Qué demócrata podría volver a confiar en un monarca “inviolable”?

José Luis Sánchez Gómez. Granada