¿Qué significa la presidencia de Claudia Sheinbaum para la industria cinematográfica en México?
La presidenta electa podría posicionar la producción de cine y televisión en México para alcanzar un éxito significativo y atraer mayor inversión
La próxima presidenta de México, Claudia Sheinbaum, tiene una sólida trayectoria de apoyo a la industria cinematográfica mexicana durante su mandato como jefa de Gobierno de la Ciudad de México. Soy optimista de que con las políticas adecuadas podríamos ver un auge en la producción cinematográfica en México durante su Administración. Sin embargo, el crecimiento continuo se encuentra lejos de estar garantizado, ya que la competencia, los costos y la falta de financiamiento siguen siendo obstáculos considerables.
La dinámica industria cinematográfica de México ha surgido como una inesperada beneficiaria del nearshoring, debido a la oferta de equipos de producción de alta calidad, el talento y las locaciones a una fracción del costo comparado con Estados Unidos. Para finales de 2022, el sector había generado 127.259 empleos en la Ciudad de México, un aumento del 22,5% respecto a 2019. La inversión en la industria creció un 16%, pasando de 564 millones de dólares en 2021 a 656 millones de dólares en 2022. En 2023, la Motion Picture Association (MPA) reconoció las contribuciones de Sheinbaum con el premio Industry Champion Award por supervisar un crecimiento récord en la producción audiovisual y por agilizar la tramitación de permisos de rodaje.
Su partido, Morena, incorporó la producción cinematográfica en sus incentivos de nearshoring, anunciados en octubre del año pasado. Estos incentivos incluyen exenciones fiscales para equipo y capacitación; aunado a esto se incluyen esfuerzos para fortalecer los lazos diplomáticos con los principales estudios de Hollywood. El excanciller, Marcelo Ebrard, junto con otros funcionarios se reunieron con ejecutivos de Disney, Netflix, Paramount, Sony, Universal y Warner Brothers, resaltando el compromiso de México de convertirse en un actor clave en la industria cinematográfica mundial. Ebrard, quien será secretario de Economía, brindará esta valiosa experiencia al gabinete de Sheinbaum.
Estos esfuerzos rindieron frutos, ya que Netflix anunció una inversión de 300 millones de dólares en México en 2021 y el lanzamiento del programa ‘Que México se vea’ para apoyar producciones nacionales. Esta iniciativa tiene como objetivo atraer mayor inversión a proyectos como Pedro Páramo, Los dos hemisferios de Lucca y Fiesta en la madriguera, así se reconoce a la relevante audiencia doméstica y el potencial de atraer a 500 millones de hispanohablantes a nivel mundial.
De igual forma, he trabajado con la MPA y la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS) para promover la colaboración entre la Ciudad de México, Tlaxcala y el Estado de México, lo cual puede impulsar políticas y legislación conjuntas y así ayudar a los gobiernos locales a establecer mejores prácticas. Nos encontramos en proceso de formalizar y garantizar los derechos laborales de la industria audiovisual en México. Es crucial el apoyar a los talentosos técnicos que trabajan detrás de cámaras en cada producción exitosa.
En pocas palabras, Sheinbaum se enfrenta a una tarea dual como presidenta. Primero, para ayudar a nuestro cine, debe continuar con el apoyo público a la producción de cinematografía nacional y protege los derechos laborales de los trabajadores. En 2023, había 234 películas nacionales en diversas etapas de producción, de las cuales 44% estaban respaldadas por fondos públicos. Proteger el financiamiento y continuar con el trabajo de la Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica (Canacine) y de la STPS para salvaguardar los derechos de la fuerza laboral, en su mayoría independiente, es crucial.
En segundo lugar, la administración de Sheinbaum debe fomentar el nearshoring en la producción cinematográfica mediante la oferta incentivos como reembolsos o créditos fiscales, para atraer a productoras extranjeras y a servicios de streaming. Hay una creciente competencia regional de incentivos en países como Argentina, Chile, Colombia, Brasil y Uruguay.
Para facilitar ambos aspectos, México necesita inversión en infraestructura. Rogelio Jiménez Pons, subsecretario de Transporte, estimó que México podría necesitar más de 400.000 millones de dólares en inversión en infraestructura para 2032 con la finalidad de aprovechar al máximo la oportunidad que brinda el nearshoring. Esto incluye transmisión eléctrica, carreteras e infraestructura aeroportuaria. Sheinbaum se debe enfocar en inversiones prácticas como la generación de electricidad y el transporte.
El historial de la presidenta electa indica que reconoce el valor del cine tanto cultural como económicamente, en términos de empleo, inversión y turismo. Basándonos en su desempeño como jefa de Gobierno de la Ciudad de México, podría posicionar a la industria cinematográfica mexicana para alcanzar un éxito significativo y contribuir a su recuperación para alcanzar niveles previos a la pandemia de la covid-19.
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