Superluna de octubre: cómo y cuándo ver la Luna llena más grande y cercana la Tierra de 2024

La Luna será la gran protagonista del cielo nocturno de mediados de octubre. De los 12 plenilunios que aparecen en la bóveda celeste a lo largo de un año, uno cada 28 días, la Luna llena que asomará por el horizonte al caer la noche del 17 de octubre será la más cercana a la Tierra. Se trata de una superluna, como se le llama popularmente a la coincidencia entre dos momentos particulares: el perigeo —el punto en el que la órbita lunar, que describe una elipse alrededor de la Tierra, se encuentra más cercana a nuestro planeta— y la Luna en su fase llena. Este fenómeno, que suele ocurrir entre dos y cuatro veces al año, da como resultado para el observador terrestre una Luna que luce ligeramente más grande y brillante que el plenilunio promedio.

Si bien el término superluna no describe un concepto preciso, su uso reciente por instituciones como el Real Observatorio Astronómico de Greenwich o la misma NASA divide opiniones al interior de la comunidad científica, entre quienes consideran que se trata de un adjetivo sensacionalista y aquellos que comparten este nombre y el resto de los que recibe la Luna cada mes con fines de divulgación. La agencia espacial estadounidense, por ejemplo, se refiere a este plenilunio como la Luna del cazador, un apelativo que remite a las condiciones climáticas que enfrentaban los nativos americanos que se establecieron en lo que hoy es el noreste de Estados Unidos en esta época del año: con el final de las cosechas, los campos quedaban libres de cultivo y la luz que acompañaba a la primera Luna llena del otoño traía consigo una oportunidad extra para hacerse de una presa.

¿A qué hora ver la superluna de octubre desde México?

A unos 357.000 kilómetros de distancia de la Tierra, en contraste con los 384.400 kilómetros que separan ambos astros, la Luna de octubre, la primera del otoño en el hemisferio norte, aparecerá por el horizonte después de las 18.30 horas (tiempo de México) para iniciar un recorrido por la bóveda celeste que se prolongará hasta el amanecer, cuando desaparezca por el horizonte poco después de las 07.30 de la mañana.

Como cada Luna llena, el mejor momento para hacer fotografías y capturar videos será inmediatamente después de su aparición sobre el horizonte, cuando el efecto visual provocado por objetos terrestres como edificios, árboles, montañas o puentes, magnífica el tamaño aparente de nuestro satélite natural. También es el instante ideal para captar los sutiles tonos ocres provocados por la dispersión de Rayleigh, el mismo fenómeno óptico por el que el Sol luce naranja al amanecer y atardecer, mientras más se aproxima al horizonte. La Luna seguirá su camino y alcanzará el cenit, el punto más alto de la esfera celeste, a las 00:30 horas.

Este plenilunio marca el inicio de un momento cumbre del año para observar el cielo nocturno, cuando las lluvias comienzan a ceder y los cielos despejados con noches cada vez más largas ganan terreno: detrás de su camino hacia el oeste desfilarán Júpiter y Marte, visibles durante el resto de la madrugada y hasta el amanecer. También la constelación de Orión, una de las grandes protagonistas de la época por la cantidad de objetos de espacio profundo que se pueden observar con binoculares o un telescopio sencillo.