La guerra en Ucrania: el 56º día de la invasión rusa, en imágenes

Decenas de civiles han logrado abandonar este miércoles la ciudad portuaria de Mariupol en un pequeño convoy de autobuses. Las autoridades de la localidad han anunciado que esperar evacuar a unas 6.000 personas a lo largo de la jornada tras un acuerdo con Rusia, el primero en semanas, para establecer un corredor seguro. ALEXANDER ERMOCHENKO (Reuters)

El cuerpo de un civil yace en un banco frente a un edificio de apartamentos dañado en la ciudad portuaria sureña de Mariupol, el martes. Tras casi dos meses de bombardeos, la ciudad, que contaba con 430.000 habitantes, “ya no existe”, afirmó el lunes el ministro de Exteriores de Ucrania, Dmitro Kuleba. El feroz asedio de las tropas del Kremlin puso a la localidad en una situación crítica ya hace semanas, y los ataques no han cesado desde entonces.ALEXANDER ERMOCHENKO

Restos de vehículos calcinados en Zalissya (Ucrania) por la ofensiva Rusia. La ministra de Exteriores alemana, Annalena Baerbock, ha anunciado este miércoles que el país dejará de importar petróleo ruso a finales de año. "Reduciremos el petróleo a la mitad para el verano y estaremos en cero a final de año, y luego le seguirá el gas. Es un acuerdo europeo, porque la salida completa de la Unión Europea es nuestra fuerza común", ha explicado tras una reunión con su homólogo letón, Edgars Rinkevics. SERGEI SUPINSKY

UN accuses Russia of war crimes in Ukraine

The bodies of people killed at Bucha outside a morgue after the Russian withdrawal from the area.YASUYOSHI CHIBA

Un hombre coloca una cruz en una tumba durante un funeral en Irpin, este martes. El ministro de Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, ha afirmado este miércoles que el rechazo de ciertos países europeos a la entrega de armas a Ucrania implica 'de facto' un apoyo a "la agresión rusa y el exterminio" de los ucranios. SERGEI SUPINSKY

Dos civiles caminan entre los restos de un tanque ruso carbonizado y viviendas destruidas en el pueblo de Zalissya, al noreste de Kiev, el martes. La responsable del comité de derechos humanos del Parlamento ucranio, Mikita Poturayev, ha acusado este miércoles a Moscú de haber deportado a medio millón de personas de Ucrania a Rusia.GENYA SAVILOV

Escombros en el interior de un apartamento semiderruido por los bombardeos en Makariv, cerca de Kiev, este martes. En esta pequeña ciudad ucrania, más de 130 civiles habrían muerto a manos de soldados rusos, según su alcalde, y el 90% de su población ha huido desde que estalló la guerra. John Moore

Un coche agujereado por los disparos y la metralla en Járkov (Ucrania). En la segunda ciudad de Ucrania, los habitantes soportan el terror, la escasez y la miseria tras más de 50 días de asedio ruso.MIGUEL GUTIERREZ

Entierro de un soldado ucranio en un cementerio de Dnipró, en el centro de Ucrania, este miércoles. Rusia prosigue su ofensiva en el este y el sur de Ucrania, las dos regiones en las que concentra sus ataques tras su retirada del noreste del país. Además de los bombardeos registrados en Severodonetsk, en Lugansk, y los ataques en Donetsk —las dos provincias de la región oriental de Donbás—, Moscú ha destruido en los últimos diez días infraestructuras claves como el aeropuerto en Dnipró. Esta urbe, que marca la frontera entre el oeste y el este del país, es vital para el transporte de los suministros y refuerzos para la resistencia del Ejército de Kiev. Albert Garcia

Vista aérea de los restos del parque logístico Commodore tras ser bombardeado e incendiado durante la invasión rusa en Makariv, este martes. La resistencia ucrania ha perdido día a día el control de Mariupol ante el ataque de las fuerzas rusas. La ciudad costera del mar de Azov representa un puente de tierra para unir la zona de Crimea, que Rusia se anexionó en 2014, y las regiones de Donetsk y Lugansk, objetivo de Putin.John Moore

Una mujer camina junto a una parte de un misil en el patio de una casa privada en la aldea de Kukhari, en la zona de Kiev, Ucrania, el pasado martes. OLEG PETRASYUK

Personal de rescate trabaja en un edificio residencia afectado durante la guerra en Mariupol, el martes. La acerería de Azovstal se ha convertido en el último reducto de la resistencia de las fuerzas ucranias ante el avance inexorable de las tropas rusas, que ya controlan la práctica totalidad de la ciudad costera del mar de Azov. Azovstal es un complejo de edificios enorme, de unos 11 kilómetros cuadrados, en el que pueden resistir entre 2.500 militares —según el Ministerio de Defensa ruso— y entre 500 y 800, según otras estimaciones. Una defensa agónica y numantina cuyo final está escrito que será trágico (y heroico) tras la negativa a rendirse pese a los sucesivos ultimátums del Ejército ruso. ALEXANDER ERMOCHENKO

El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha viajado este miércoles a Kiev, la capital de Ucrania. Michel se ha desplazado a Borodianka, una localidad a unos 50 kilómetros al noroeste de la capital ucrania, cuya situación fue descrita por el presidente ucranio, Volodímir Zelenski, como “mucho más horrible” que la de Bucha, icono del horror por las imágenes de cadáveres de civiles en las calles o fosas comunes. “La historia no olvidará los crímenes de guerra”, ha escrito el presidente del Consejo Europeo en un tuit. DARIO PIGNATELLI/EUROPEAN UNION

Dos civiles caminan entre edificios destruidos en Mariupol, este martes. ALEXANDER ERMOCHENKO