Un tribunal de Guinea Ecuatorial retira los cargos contra un dibujante crítico por falta de pruebas

La Fiscalía rechaza la acusación de blanqueo y falsificación de dinero por su inconsistencia

Uno de los dibujos que Ramón Esono ha hecho desde la cárcel de Black Beach en Malabo.

El juicio al dibujante ecuatoguineano Ramón Esono Ebalé ha sido un visto y no visto. La Fiscalía se ha visto obligada a retirar los cargos de blanqueo y falsificación de dinero que pesaban contra él debido a la inconsistencia de su propia acusación y el juez ha declarado el caso visto para sentencia. Sin pruebas que le incriminen ni cargos en su contra, Esono, que llevaba algo más de cinco meses en la ...

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El juicio al dibujante ecuatoguineano Ramón Esono Ebalé ha sido un visto y no visto. La Fiscalía se ha visto obligada a retirar los cargos de blanqueo y falsificación de dinero que pesaban contra él debido a la inconsistencia de su propia acusación y el juez ha declarado el caso visto para sentencia. Sin pruebas que le incriminen ni cargos en su contra, Esono, que llevaba algo más de cinco meses en la prisión de Black Beach, podría ser liberado en cuanto se haga público el fallo, lo que se espera que ocurra en los próximos días.

El único testigo de cargo, un cabo de la policía ecuatoguineana, se ha limitado a asegurar que “cumplía órdenes” cuando se le preguntó por los detalles del supuesto delito cometido por Esono, lo que ha llevado al juez a cerrar el proceso el mismo día de su inicio. Asimismo, uno de los ciudadanos españoles que acompañaba al dibujante durante su detención el pasado 16 de septiembre en Malabo pudo presentar una declaración por escrito que ha contribuido también a su defensa. La familia tiene previsto pedir daños y perjuicios por la falsa acusación, según ha anunciado Amnistía Internacional.

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Mientras Ramón Esono continuaba dibujando en la cárcel con bolígrafos sobre trocitos de cartón y clamaba por su inocencia, familia y amigos habían puesto en marcha una campaña exigiendo su liberación que contó con el respaldo de organismos de Derechos Humanos y a la que se sumaron dibujantes de todo el mundo. Desde el primer interrogatorio se pudo intuir que estaba en la cárcel como represalia por sus críticas al régimen de Teodoro Obiang y, en concreto, por el cómic La Pesadilla de Obi, publicado en 2014, en el que caricaturizaba al presidente de su país y lo convertía en un ciudadano normal.

En el momento de su detención, Esono Ebalé, residente en Paraguay, se encontraba en Malabo porque tuvo que viajar a Guinea Ecuatorial para renovar su pasaporte. Tras dos días en comisaría fue presentado en la televisión pública delante de fajos de billetes en un intento de mostrar que había cometido los presuntos delitos de blanqueo de dinero. Sin embargo, el interrogatorio policial giró siempre en torno a su actividad como dibujante.

La retirada de cargos contra Esono se produce en un momento de incremento de la represión política en Guinea Ecuatorial. Este lunes, el único partido opositor con representación parlamentaria (un diputado de cien) Ciudadanos por la Innovación (CI) ha sido ilegalizado por un juez después de condenar a 36 de sus miembros a 26 años de cárcel cada uno por su supuesta participación en una agresión a un comisario de policía en la localidad de Aconibe. Un militante de CI, Santiago Ebbe Ela, falleció en la comisaría de Malabo con señales de torturas en su cuerpo y otros dos permanecen ingresados en el hospital. Asimismo, una mujer perdió a su bebé a consecuencia de los golpes recibidos durante su detención.

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