Manuel Valls, un culé más en Berlín

Aunque su madre Suiza y su padre, un pintor barcelonés instalado en Francia, estaban instalados en París, el primer ministro francés, Manuel Valls, nació en Barcelona el 13 de agosto de 1962. Por las irrefutables razones de fútbol o simplemente por una cuestión de linaje, Valls se reconoce como "profundamente culé". Así se lo explicó el primer ministro del país galo a la revista France Football, en un reportaje publicado en 2014. Y como "profundamente culé", Valls no se quiso perder la victoria del Barcelona de Lionel Messi frente a la Juventus el pasado sábado en Berlín (1-3). Un viaje relámpago que en Francia no se ha digerido nada bien por la utilización de dinero público.

En el FC Barcelona aseguran que no invitaron a Valls a la final de la Liga de Campeones frente a la Juve y que su asistencia en Berlín fue gracias al presidente de la UEFA, el francés, Michel Platini. "El Barça es mi club", explica el primer ministro francés en la citada entrevista a France Football. En su adolescencia cada vez que podía viajaba a Barcelona, donde tenía una escala obligada: el Camp Nou. "Sobre todo en verano, intentaba no perderme nunca el Trofeo Gamper", recuerda Valls. Y subraya: "Mi primeros sentimientos políticos están relacionados con el Barcelona".

"Nunca olvidaré la manita del Barça de Cruyff al Madrid en el Bernabéu", cuenta Valls, que escuchó el 0-5 del equipo de Rinus Michels en Chamartín por la radio. "Es el clásico que más me ha marcado. Aunque luego he visto números partidos frente al Madrid en el Camp Nou, para mí el clásico era y es una confrontación política cultural y futbolística", completa.

Su relación con el Barcelona tiene escondido un detalle de linaje. El primo hermano de su padre, que como el primer ministro de Francia también se llamaba Manuel Valls, fue el compositor del himno del Barça, escrito exclusivamente en catalán en 1973 y que sonó por primera vez en el Camp Nou al año siguiente con motivo del 75 aniversario del club.