La participación en la primera ronda de las presidenciales francesas supera el 84%

La tasa de participación en las elecciones presidenciales en Francia ha superado todos los pronósticos. Un 84,60 % de electores, según los últimos datos oficiales, han ejercido su derecho al voto, una masiva afluencia a las urnas que roza la mayor registrada hasta el momento, en los comicios de 1965. Entonces votó el 84,75% de los franceses.

A las 17.00 ya habían acudido a las urnas el 73,87% de los ciudadanos con derecho a voto frente al 58,5% que lo había hecho a esa misma hora en las presidenciales de 2002, según datos ofrecidos por el Ministerio del Interior francés. Se trata de un incremento de más de 15 puntos sobre la primera vuelta de hace cinco años y del mayor nivel de participación desde las presidenciales celebradas en 1981. A las cinco de la tarde había ejercido su derecho un mayor porcentaje de votantes que en toda la jornada electoral del 21 de abril de 2002, cuando había 3,2 millones de inscritos menos y la participación definitiva fue del 73%.

El ministro francés del Interior, François Baroin, considera que el "récord" de participación y el "retroceso de los extremos" son las principales conclusiones de la primera vuelta de las elecciones presidenciales. A la espera de los datos definitivos, Baroin consideró que habrá una participación "récord" de entorno al 85 %, comparable a la primera elección de un presidente francés por sufragio universal directo en Francia, en 1965, y en la que ganó el fundador de la V República, el general Charles de Gaulle.

Según el Ministerio de Interior, con los resultados definitivos, la participación ha sido del 84,60 %, lo que equivale a una abstención del 15,40 %. Según Baroin, "esta movilización excepcional de los franceses demuestra que han medido plenamente la importancia de este escrutinio para el futuro" de Francia. "Esta participación masiva es la traducción de una vitalidad democrática intacta", ha subrayado Baroin, quien sustituyó a Sarkozy a finales de marzo pasado cuando éste abandonó el cargo para dedicarse plenamente a su campaña electoral.

Medidas excepcionales

Con resultados definitivos, el índice de participación en la primera ronda se aproxima a la de la segunda vuelta de los primeros comicios presidenciales de 1965 que inauguraban la V República. El récord de participación entonces fue del 84,75 %, más elevado incluso que el 84,23 % de las de 1974. Sin embargo, el récord en la primera vuelta lo ostentan las presidenciales de 1974 con un 87,33 % de participación, según ha contado el canal de televisión privado TV5.

Un ejemplo del interés que han despertado estos comicios es que en numerosos colegios electorales, incluidos los que no cuentan con voto electrónico, los electores han tenido que hacer cola para complir con su derecho al sufragio. El Consejo constitucional ha permitido también excepcionalmente que los ciudadanos que todavía guardaban cola al cierre de los colegios electorales hayan podido votar. Además, los ciudadanos de los territorios de Ultramar votaron antes que los de la Francia continental y que los franceses residentes en el extranjero.

Se ha batido también otro récord. Nunca antes más de 37 millones de electores (de los 44,5 millones con derecho a voto) habían participado el mismo día en unos comicios. Esta fuerte participación también ha confirmado el interés de los franceses por una campaña en la que hasta el último momento ha reinado la incertidumbre, tal y como han recogido los sondeos y se ha manifestado también en los altos niveles de audiencia de los debates televisados y la venta de libros sobre política.

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