"El terror vuelve a Londres con un atentado sin víctimas idéntico al 7-J", titula ABC, que subraya que los terroristas sólo lograron que estallaran los detonadores de sus cuatro artefactos sin que explotaran las bombas a los que iban adosados. El editorial "Alianza de democracias", apunta que el terrorismo integrista islámico se está cultivando en las "trastiendas de las ciudades europeas. Entre jóvenes nacidos y educados ( ) en sociedades democráticas, desarrolladas y modernas, con regímenes de libertades y derechos impensables en los países de origen de sus padres." "Esta incardinación de los terroristas en las sociedades a las que atacan y su camuflaje en hábitos ciudadanos normales necesariamente debe traducirse en un replanteamiento de la lucha antiterrorista y que ellos están dispuestos a negar a los demás." "Es un contrasentido que el día antes en que se producía la segunda edición -reducida, pero no menos preocupante- del 7-J, se conociera la noticia de que el Tribunal Constitucional alemán denegaba a España una euroorden contra un sospechoso de colaborar con Al Qaida.El Mundo titula hoy: "Una serie de explosiones idéntica a la del 7-J conmociona Londres". El diario comenta en el editorial "¿Una reacción chapucera del 7-J o la explotación del miedo?, que: "la única diferencia -que permitió calificar este nuevo atentado como un 'incidente' - es que en esta ocasión sólo ha resultado herida una persona." "El que los autores del 21-J fueran simples aficionados, aprendices de terroristas o simples emuladores no resta, en cualquier caso, un ápice de gravedad a lo ocurrido, ni inquietud por el futuro".El Correo abre su portada con: "Una réplica del 7-J sin víctimas vuelve a sembrar el terror en Londres". Para el diario, el primer ministro británico repitió ayer que vivir con normalidad es la respuesta que deben volver a dar los londinenses". "Los servicios de seguridad están sufriendo una prueba tan dura como la que soportan estos días los ciudadanos a los que deben proteger; y también la numerosa comunidad musulmana, que ve como miembros fanatizados intentan acabar con años de integración. La ruptura de esa convivencia es uno de los objetivos de los radicales y la erradicación de quienes incitan a la destrucción de los valores compartidos debe ser una prioridad absoluta"."Londres revive el 7-J" es el titular con el que arranca la edición impresa de La Vanguardia. Información de portada a la apoya con el editorial "Amenaza continua", en la que destaca que, tras la masacre del 7-J hace dos semanas, "existía una impresión más o menos generalizada en el sentido de que pasaría un cierto tiempo antes de que la capital británica volviera a ser objeto de atentados de esta naturaleza". Pero "el mensaje que trasmitieron los terroristas ayer parece meridianamente claro: a pesar de las medidas de emergencia decretadas por el Gobierno británico tras los atentados del 7 de julio, ayer se pudo sembrar el caos y la desgracia otra vez.El Periódico abre su edición impresa de hoy titulando: "Al Qaeda ridiculiza la seguridad de Londres". Según opina el diario en "Pueden repetirlo": "Por más que Blair minimizara patéticamente lo sucedido llamándolo "incidentes", todos hemos entendido la gravedad del mensaje: somos vulnerables, las medidas de seguridad no son la solución. O arreglamos los problemas de fondo, o los descontentos y los desesperados desestabilizarán nuestra forma de vida."The Independent titula "La Cuidad del miedo: La Policía inicia una búsqueda tras la nueva ola de atentados en el metro y el autobús". El diario británico destaca que la Policía busca vínculos entre los atentados de ayer y el del 7-J, e incluye una columna de Paul Wilkinson, professor de Relaciones Internacionales de la Universidad de St Andrews y consejero del Centro de Violencia Política y Terrorismo de Reino Unido. "Creo que este era un ataque terrorista serio, afirma Wilkinson en su artículo, nadie se toma la molestia de colocar detonadores si no tiene la intención de hacerlos explotar." "Quienquiera que esté detrás de estos hechos tiene la intención de lanzar un mensaje de que pueden volver a efectuar ataques."The Independent titula "La Cuidad del miedo: La Policía inicia una búsqueda tras la nueva ola de atentados en el metro y el autobús". El diario británico destaca que la Policía busca vínculos entre los atentados de ayer y el del 7-J, e incluye una columna de Paul Wilkinson, professor de Relaciones Internacionales de la Universidad de St Andrews y consejero del Centro de Violencia Política y Terrorismo de Reino Unido. "Creo que este era un ataque terrorista serio, afirma Wilkinson en su artículo, nadie se toma la molestia de colocar detonadores si no tiene la intención de hacerlos explotar." "Quienquiera que esté detrás de estos hechos tiene la intención de lanzar un mensaje de que pueden volver a efectuar ataques."