GRAFCVA5093. PAIPORTA (VALENCIA), 29/01/2025.- Vista general de las obras de reparación en el barranco del PoyoTres meses después de la dana que arrasó la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre las distintas administraciones hacen balance de la situación actual mientras los vecinos de las zonas afectadas intentan regresar a una cierta normalidad y los equipos de rescate siguen buscando a las tres personas desaparecidas. EFE/Ana Escobar Foto: Ana Escobar (EFE)

LAS CONSECUENCIAS DE LA DANA

100 días después de la dana, en la ‘zona cero’ se sigue trabajando para recuperar la normalidad

Han pasado 100 días desde que la dana causó graves daños en la Comunidad Valenciana, dejando muchas áreas afectadas. Aunque las relaciones entre el Gobierno y la Generalitat están tensas, la recuperación en la llamada zona cero sigue adelante. Sin prisa, pero sin pausa.

Contexto. La tragedia dejó 227 muertos y al menos 17.000 millones de euros en pérdidas, según un estudio del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie).

La importancia de reparar los ascensores. Que estén averiados impide a las personas mayores salir de sus casas. Y por ahora hay 4.660 elevadores todavía fuera de servicio (de un total de los 7.600 afectados).
Los pequeños negocios. La dana causó un impacto en más de 8.000 tiendas. El 40% de los pequeños negocios están cerrados, según la patronal Confecomerç.
El impacto en la educación. La riada también se llevó por delante los centros educativos, que están lejos de recobrar la normalidad. En algunos centros todavía hay que limpiar los sótanos o los patios para que reúnan unas condiciones mínimas.
En el epicentro de la catástrofe, Catarroja, su alcaldesa reconoce que el municipio no levanta cabeza. “No paramos. Hemos creado un departamento de lunes a domingo para tramitar duplicados de documentación y ayudas”.

Y, en este escenario, sigue la bronca política. La sociedad valenciana asiste al enfrentamiento de los gobiernos autonómico y central por la gestión de la emergencia y también por la cuantía o velocidad con que las ayudas llegan a los bolsillos de los damnificados.

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