La Guardia Civil atrapa a dos canguros que se habían escapado de la finca de un particular con un expediente abierto por el Seprona

El Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza) ha atrapado este sábado a dos canguros que se habían escapado de una finca privada en el municipio madrileño de Villanueva de la Cañada, de casi 23.000 habitantes y a 30 kilómetros al este de la capital, según ha informado la Guardia Civil. Sobre las 12.30, los agentes del esta localidad y de El Escorial han recibido una llamada. Era un vigilante de la Universidad Camilo José Cela, ubicada a unos 12 kilómetros del municipio, que alertaba de la presencia de los dos animales en las inmediaciones del la institución privada. Varios efectivos se han desplazado al lugar, han acorralado a los marsupiales y finalmente los han capturado “con seguridad”. Entonces los han trasladado de nuevo a la propiedad, cuyo dueño, han constatado, tenía ya abierto un expediente. “Eso significa que está siendo investigado para ver cómo ha obtenido los dos animales”, señala una portavoz del cuerpo.

Los canguros están considerados animales exóticos y la portavoz explica que no es ilegal tenerlos, pero que se requiere un permiso para ello, además de poder proporcionarles un hábitat adecuado y seguro, de tal manera que se garantice su bienestar y se eviten escapes. “Por ahora no sabemos si los ha criado aquí en cautividad o de dónde vienen”, señala. Aun así, continúa, han optado por devolverlos a la finca ―“de gran extensión”― porque es un entorno que ya conocen y donde han considerado que estarían mejor hasta que se resuelva la investigación en curso y se determine si el propietario tiene toda la documentación en regla.

En un vídeo difundido por la Guardia Civil se ve a los dos canguros ―no de gran tamaño― corretear y saltar por la zona donde han sido encontrados, mientras los agentes intentan cercarlos para poder meterlos en trasportines grises, similares a los que se utilizan para llevar a otros tipo de animales, como gatos, por ejemplo. Los dos marsupiales se encontraban cerca de la valla de la universidad, cuenta la Guardia Civil, no muy lejos de la finca y donde los ha descubierto el vigilante.

La Comunidad de Madrid cuenta con un Centro de Recuperación para fauna silvestre, en la localidad de Tres Cantos, donde también recogen animales exóticos en caso de que, tal y como exponen en la página web, “no puedan ser liberados al medio natural debido a la amenaza que suponen para los ecosistemas”. Todos los ciudadanos dueños de un animal exótico del que ya no pueden hacerse cargo pueden acudir a este centro, al igual que cualquier persona que se tope con un animal herido o una especie invasora. El Ministerio de Transición Ecológica posee un catálogo concreto de especies invasoras, aquellas que “puedan llegar a constituir una amenaza grave para las especies autóctonas, los hábitats o los ecosistemas, la agronomía, o para los recursos económicos asociados al uso del patrimonio natural”, y la lista está abierta a actualizaciones. Entre los mamíferos incluidos están los mapaches, las ratas pardas y negras o los cerdos vietnamitas, pero no los canguros.

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