Detenido un fugitivo en Valdemoro que dejó embarazada a su hijastra con 16 años
Fue condenado a 15 años de prisión, pero no se presentó en la cárcel y se escondió en una casa varios años
Un hombre acaba de ser localizado y detenido en Valdemoro para que cumpla la pena que pesaba sobre él por agredir sexualmente de la hija de su pareja entre los ocho y los 16 años. El grupo de localización de fugitivos de la Policía Nacional descubrió su escondite en una vivienda en la localidad madrileña de Valdemoro hace unas semanas y le detuvo para ponerle a disposición judicial. Según el fallo por el que fue condenado, el agresor violó a la hija menor de su pareja durante ocho años y llegó a dejarla embarazada.
Según el relato de los hechos probado por la sentencia, el hombre, de nacionalidad española, comenzó a colarse en la habitación de la pequeña cuando esta tenía ocho años y empezó a realizarle tocamientos en sus partes íntimas mientras dormía. Los tres vivían en una casa en Madrid cuando empezó a agredir a la pequeña en el año 2010. Con el paso de los años el nivel de sus agresiones fue incrementándose hasta que llegó a penetrarla y eyacular. Fruto de estas violaciones, la niña se quedó embarazada antes de cumplir 16 años, momento en el que salió a la luz los abusos y agresiones a las que le había sometido su padrastro.
Por estos hechos fue condenado a 15 años de prisión, pero el día en el que tenía que acudir a la cárcel para empezar su pena, nunca se presentó en las instalaciones penitenciarias. La investigación del entorno social y familiar del prófugo condujo a los investigadores de la policía a un inmueble en el municipio de Valdemoro en el que sospecaban que podría haberse ocultado varios años. Las vigilancias y seguimientos constataron que vivía en esa casa protegido por sus allegados. Los agentes desplegaron un importante dispositivo en las inmediaciones de la casa, hasta que el hombre salió de la misma, le identificaron y procedieron a su arresto.
Esta detención se enmacra dentro de la Operación Violeta. Fue a mediados del año pasado cuando un equipo de agentes del grupo de localización de fugitivos pusieron en marcha un plan para impulsar las detenciones de los prófugos condenados por agresiones sexuales. En los seis primeros meses localizaron y colocaron los grilletes a 26 agresores y desde entonces ha continuado el goteo de huidos de la justicia que ya están en prisión.
Dentro de esta operación, cayó en Alicante uno de los prófugos más buscados, Diego Darío González Ghersi, que abusó de su hija durante años y que en el momento de su arresto había cambiado totalmente su aspecto e incluso consiguió camuflar sus tatuajes. También detuvieron a dos hermanos reclamados por la Audiencia Provincial de Cádiz que habían violado a la hija de uno de ellos. Este marzo también cayó un hombre que llevaba ocho años encerrado en una casa en Madrid después de haber formado parte de una violación múltiple a una mujer en Madrid hace una década.
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