La Puerta de Alcalá pasa por el ‘quirófano’: una lona gigante tapará el monumento más icónico de Madrid

Ahí está, ahí está viendo pasar el tiempo... la Puerta de Alcalá. Y tanto. Pero tanto, tanto, que ya toca ser restaurada, de nuevo. José Luis Martínez-Almeida ha anunciado este jueves en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid que uno de los monumentos más emblemáticos de Madrid ―probablemente el más fotografiado por los turistas― comenzará en unos días un periodo de restauración. De hecho, varios operarios municipales han comenzado a colocar ya los andamios a primera hora. Será el primer paso. En los próximos días ―según fuentes del área de Cultura, todo apunta al 20, 21 o 22 de julio―la Puerta de Alcalá será tapada por completo con una lona gigante. Adiós a las fotos. La lona, eso sí, tendrá serigrafiado el monumento. La previsión del alcalde de la capital es que ese telón gigante se mantenga hasta el 30 de septiembre.

¿Por qué ahora? “Hemos detectado”, ha observado el alcalde durante la comparecencia con preguntas, “que existe un deterioro evidente en el monumento por estar al aire libre”. La realidad, sin embargo, es que todo se ha precipitado tras la borrasca de Filomena, el fenómeno meteorológico que convirtió a Madrid en Moscú en menos de 24 horas hace un año y medio. La nieve afectó muchísimo al monumento, según han señalado los expertos. A esto hay que sumar, según ha puntualizado Almeida, el deterioro de estar al aire libre y el tráfico rodado. Por este céntrico punto de la capital circulan cada día miles y miles de coches diariamente. “Conviene hacer ya una limpieza en profundidad. Y, lógicamente, hay que vigilar la evolución de la piedra”, ha apuntado el regidor capitalino.

La primera parte de los trabajos, sin embargo, ya ha comenzado. El pasado lunes, el Ayuntamiento puso en marcha un estudio tridimensional a través de drones con el fin de lograr una nube de puntos digital y así conocer todos los detalles del emblemático monumento inaugurado en la capital allá por 1778. Tras la conclusión de estos estudios y la retirada de la lona el 30 de septiembre, comenzarán los trabajos de conservación, que se prevén para 2023, año de elecciones.

La restauración de 1992

No es la primera vez que la Puerta de Alcalá pasa por el quirófano. El 12 de mayo de 1992 terminaron los anteriores trabajos. En aquella ocasión, una lona gigante cubrió el monumento con dibujos del viñetista Antonio Mingote. Los restauradores de entonces fueron dirigidos por Pío García Escudero, hasta hace unos meses presidente del PP madrileño. Los trabajos duraron dos meses y sirvieron para arreglar los desperfectos de las piedras, excepto aquellos que dejó la Guerra Civil.

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