El puente de Raimundo Fernández Villaverde, en obras desde este lunes

El puente de Raimundo Fernández Villaverde, que cruza el paseo de la Castellana desde Joaquín Costa a Raimundo Fernández Villaverde, se someterá desde este lunes, 6 de junio, a trabajos de reparación después de que los servicios de conservación del Ayuntamiento de Madrid hayan detectado pequeños hundimientos en la calzada. En concreto, los hundimientos se encuentran en las zonas de aproximación a esta infraestructura tanto en el estribo del lado de la calle Joaquín Costa como, en mayor medida, en el estribo del lado de la calle Orense. Las obras durarán cuatro meses y se aprovecharán para mejorar otros elementos. La primera fase de los trabajos, la que comienza hoy, implicará el cierre de los carriles internos anexos a la mediana, pero se permitirá el tráfico por los carriles externos.

Según informa el Ayuntamiento en un comunicado, los trabajos, que serán ejecutados por el Área de Obras y Equipamientos, se van a realizar en distintas fases desde mañana y en los meses de verano para ocasionar menos problemas en la circulación. Tienen un plazo previsto de ejecución de cuatro meses y cuentan con un presupuesto de 913.000 euros.

Los trabajos de reparación consistirán en la excavación y retirada de material de relleno existente bajo la calzada; renovación del sistema de drenaje que recoge las aguas del tablero del puente; relleno con hormigón y zahorra; ejecución sobre el relleno de una losa superior de hormigón armado de reparto de cargas e impermeabilización de la losa y reposición del asfalto.

A la vez, se va a proceder a acondicionar la parte superior del tablero del puente, que se encuentra deteriorado y envejecido por el paso del tiempo. Para ello se renovará la mediana ―se demolerá la actual y se ejecutará una nueva―, se mejorarán los puntos de recogida de agua del sistema de drenaje, se restaurarán las barandillas existentes en muretes de accesos y bordes laterales de tablero, se ejecutarán nuevas juntas de dilatación en el tablero, se sustituirá la actual barrera metálica por un nuevo sistema de contención de vehículos más estética y ajustada al entorno urbano y a los requisitos europeos y se renovará el pavimento de calzada existente.

La primera fase, desde este mismo lunes, implicará la ocupación de los carriles internos anexos a la mediana, permitiendo el tráfico por los carriles externos. El Ayuntamiento dará información continuada de las afecciones a la movilidad a través de su web (incidencias de tráfico) y de Twitter.

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