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Sanitarios del Hospital de Vallecas ponen dinero para comprar botellas de agua: “No tenemos tiempo para darles un vaso”

Un grupo de trabajadores del centro hospitalario Infanta Leonor se organiza para evitar perder tiempo en la atención a pacientes

Manuel Viejo
Vecinos de Vallecas agradecen labor de profesionales sanitarios con gran mural en el Infanta Leonor.
Vecinos de Vallecas agradecen labor de profesionales sanitarios con gran mural en el Infanta Leonor.Europa Press

No hay tiempo que perder. El Hospital de Vallecas acumula ya 219 enfermos de coronavirus en planta, 20 en la UCI y 37 fallecidos. La situación está llegando al límite. Un grupo de sanitarios del centro hospitaliario Infanta Leonor decidió crear este jueves un grupo de WhatsApp con el nombre “Agua Infanta”. Aquí están Laura, Ana, Lucía, Elena, Fede, Patri, Rocío... Un grupo de compañeros, de entre 27 y 40 años, que desde que estalló la crisis del coronavirus funciona como un ente en sí mismo. “Yo lo llevo fatal. Es durísimo. La gente no se hace a la idea de cómo está el Hospital por dentro, pero hay muchísimo compañerismo. Este es el lado positivo. Nunca me he sentido tan conectada con mis compañeros. Cuando no llora uno, llora otro, pero tenemos una unidad tremenda. Vamos todos a una: médicos, enfermeros, auxiliares... para intentar salvar a todos los enfermos”, cuenta por teléfono Lucía Jiménez, de 27 años, dos horas antes de entrar a trabajar.

Las cajas de botellas de agua.
Cedida por los enfermeros

¿Por qué no hay agua en el Hospital? Los enfermeros cuentan que, desde siempre, los pacientes ingresados que tenían sed pedían un vaso de agua y se les entregaba al momento en la habitación. Ya no. Ahora, con el aislamiento de los pacientes por la situación de emergencia, se hace imposible llevar un vaso de agua a un enfermo. Un simple gesto de estas características supone una perdida de tiempo enorme. “La gente está muy deshidratada y, si llevamos un vaso de agua, nos tenemos que equipar con el equipo de protección individual (EPI), que apenas tenemos. Tenemos una falta de medios tremenda y todo se demora por un simple vaso de agua”. Este jueves, uno de los enfermeros creó un grupo de WhatsApp con el nombre “Agua Infanta”. “Dijimos de poner uno o dos euros cada uno y así comprar la mayor cantidad de botellas de agua posibles”, cuenta. “Pero la solidaridad fue tan grande que me empezaron a ingresar en la cuenta de Bizum hasta 50 euros. Se corrió la voz y me llegó dinero de familiares y amigos”. Minutos después, con el dinero en la cuenta, llamó al Mercadona más cercano del hospital:

― Hola, somos los enfermeros de Vallecas. ¿Cuántas botellas de agua tenéis?

― 1.250 botellas de medio litro.

― Vale, guárdanos 500.

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Y allí se presentaron con sus coches particulares. Los enfermeros abrieron el maletero y metieron las cajas con las botellas de agua. La Policía, que se entera de todo, también se presentó más tarde con otro palé gigante de botellas. Desde el viernes por la noche, cada enfermo tiene su propia botella de agua y la puede ir rellenando cuando quiera sin necesidad de que un enfermero pierda un traje de EPI. “Mis padres me sigue enviando dinero por Bizum a la cuenta”, dice sonriendo. Sí, también se sonríe en estos tiempos.

Esta mañana los compañeros se han levantado y, con el dinero que sobró, han ido al Makro a por paquetes de galletas y zumos. La razón es que las comidas en el hospital se reparten a la 13.00 y las cenas a las 20.00. “Cuando vienen pacientes por la noche no tenemos nada para darles. Por eso, hemos decidido comprarles galletas y zumos esta mañana”. La iniciativa solidaria también llegó de Decathlon, que les envió un paquete de gafas de bucear y de esquiar para que las utilicen ante la gran falta de medios. Y de Domino´s Pizza, que envió otra caja de pizzas para comer y cenar. “No tenemos tiempo para comer, las dejamos puestas en un rincón y al final de turno, cuando nos vamos, picamos algo. Agradecemos a todos los que nos están enviando cosas y los aplausos de las 20.00, que no saben lo que reconfortan”, cuenta.

Este jueves, además, recibieron una sorpresa de los bukaneros del Rayo Vallecano. En el hospital donde trabajan ha aparecido una pancarta sobre una pared blanca: “Solo el pueblo salva el pueblo. Trabajadores sanitarios sois nuestro orgullo. Mucha fuerza”. Los sanitarios lo tienen claro. “Ahora, ese es nuestro lema”.

Galletas

El Ayuntamiento de Madrid ha lanzado un laboratorio de ideas. Además, aquí se recopilan los dispositivos de ayuda vecinal en distintas zonas de la capital.

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Sobre la firma

Manuel Viejo
Es de la hermosa ciudad de Plasencia (Cáceres). Cubre la información política de Madrid para la sección de Local del periódico. En EL PAÍS firma reportajes y crónicas desde 2014.

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