El temporal en Galicia causa destrozos e inundaciones y arrasa bienes culturales protegidos

El temporal de viento y lluvia con el que Galicia recibió el año nuevo ha dejado a su paso cientos de destrozos, averías, inundaciones, derribos y situaciones apocalípticas con graves daños en el patrimonio. Entre las más de 400 incidencias (solo entre el momento de las campanadas y las uvas hasta las seis de la tarde del domingo 1 de enero, el 112 registró 384) provocadas por el mal tiempo se halla la vivida en Mondariz-Balneario, con la riada del Tea y el desastre sufrido por la ya largamente castigada Fonte de Troncoso, protegida sobre el papel y obra del arquitecto Antonio Palacios. No muy lejos, en la orilla lusa del Miño, los embolsamientos de agua causaron el desplome de más de 50 metros de la fortaleza medieval de Valença, el paisaje visible desde Tui.

Los daños y el estado de alerta naranja en las provincias gallegas (roja en el norte de Portugal) prosiguieron después del balance ofrecido por el servicio gallego de emergencias. Entre las 384 de las que se tenía constancia oficial a las 18.00 horas del domingo, las situaciones más frecuentes habían sido las inundaciones en viviendas (115), seguidas de incidencias relacionadas con las carreteras: obstáculos como piedras o tierra (74), bolsas de agua (43) e inundaciones (55). También se produjeron inundaciones en garajes (42) y calles (26). Las provincias más castigadas por la lluvia fueron Pontevedra (195), Ourense (108) y Lugo (69). Por su parte, en la de A Coruña solo se registraron doce incidencias de esta índole.

Las emergencias en los ayuntamientos pontevedreses tuvieron que ver, mayoritariamente, con inundaciones en viviendas (72), garajes (28) y bajos comerciales (24). Algunas personas permanecieron en sus casas, sin la posibilidad de salir al exterior debido a bajos inundados o a la fuerza con la que bajaba el río: fue, por ejemplo, el caso de una vivienda en el lugar de Urcela (Ponteareas), cuyos ocupantes llamaron ayer por la tarde al 112 para informar de que el caucee estaba desbordado. En Salvaterra do Miño, varios inmuebles resultaron afectados. En uno de ellos, situado en el lugar de las Regueiras, una persona indicaba al 112 cerca del mediodía que no podía salir de la casa porque el nivel del agua le llegaba hasta las rodillas. También en Salvaterra, el paseo del Miño, en el lugar de A Barca, sufrió varios desprendimientos hacia el río.

En el ayuntamiento de Tomiño se registraron 52 incidencias, y la mayoría de ellas (25) también tuvieron que ver con inundaciones en viviendas. Un particular informó al 112 pasadas las 12 horas de que el bajo de su domicilio, en el lugar del Cruceiro, estaba inundado casi hasta el techo. Además, el agua bajaba también por la calle. En el lugar de Muíños, en Ponteareas, la Policía Local informaba al 112 hacia las 14.45 horas de que una persona que se encontraba en el interior de su casa, con el agua superando el metro de altura, había conseguido salir al exterior. En Ponteareas se contaron un total de 17 casos semejantes, por los 15 de Tui o los 14 de Salvaterra de Miño. La circulación ferroviaria entre Ourense y Guillarei quedó interrumpida, con diversos tramos cortados por las lluvias y la amenaza de desprendimientos.

Ourense también contabilizó buena parte de las incidencias en la comunidad relacionadas con las fuertes lluvias. En la parroquia de Lobios, sobre las 14 horas, el 112 tuvo constancia de varias viviendas a las que les estaba entrando agua. En Xinzo de Limia, el desbordamiento del río también provocó la inundación de diversos inmuebles situados en la parroquia de Santa María de Lamas. En el lugar A Xesteira, en O Carballiño, la inundación de la única carretera dejó incomunicado el pueblo durante varias horas. El 112 solicitó para este operativo la intervención de la Guardia Civil de Tráfico y del Servicio Municipal de Protección Civil de O Carballiño.

En O Saviñao (Lugo), por su parte, un particular informó al 112, pasado este mediodía, de un puente de la carretera municipal que había caído al río. Aunque sin provocar daños personales, señalaba el peligro para la circulación de vehículos. Desde el 112 se informó de la incidencia a los Bomberos de Chantada, a la Guardia Civil y a Protección Civil de O Saviñao. En lo relativo a los accidentes de tráfico, destacó una salida de vía debido, según el particular que informó, a una bolsa de agua en la carretera en Vilar de Santos (Ourense), aunque sin heridos de consideración. En la provincia de Lugo, destacaron los municipios de Sarria, con 9 incidencias inscritas, y Chantada y Carballedo, con 8 cada uno. Numerosos ríos en las cuatro provincias se desbordaron, poniendo presas como la del río Castro (San Sadurniño) en alerta de rotura, sepultando bienes patrimoniales e infraestructuras, y cruzando carreteras. Las escenas del diluvio se multiplicaron hasta resultar incontables, desde el Arnoia en Allariz, el Sarria o el Asma, en Chantada. En Ourense, O Carballiño registró 13 incidencias, y seis de la capital provincial.

Superada la hora del último balance publicado, a las 18,20 horas, el 112 Galicia recibió el aviso de un vehículo que no podía seguir circulando por la cantidad de agua acumulada en la vía. Los hechos sucedieron en la calle Real de Monforte, y fue una de las personas implicadas la que informaba de que no precisaba asistencia sanitaria, pero sí ayuda para abandonar el vehículo. Desde lo 112 se informó a la Policía Nacional y a los Bomberos, a la Policía Local y la Protección Civil del Municipio.

La plataforma vecinal SOS Fonte de Troncoso ha denunciado este lunes los graves daños sufridos por la Fonte de Troncoso, en estado de abandono y pendiente de rehabilitación. La fuerte riada que experimentó en río Tea, que atraviesa el municipio pontevedrés de Mondariz-Balneario, echó abajo la reja de fundición que cerraba el alzado Este de la fuente proyectada por Palacios. El agua inundó por completo el vaso del manantial, donde, bajando una escalinata, se conserva la fuente. Esta estructura mide 145 metros cuadrados por tres de profundidad, y la fuerza del agua almacenada causo, según el colectivo de defensa, la dislocación de una de las tres puertas de doble hoja que dan acceso a la fuente. Los vecinos denuncian que la crecida del río, que “nunca había causado tantos daños en este bien cultural protegido”, también se ensañó con el interior de la histórica planta de embotellado, un inmueble de granito anexo. La Fonte de Troncoso acumula daños en su estructura desde hace años, después de que el alarmante estado de abandono causase el hundimiento de la cubierta de la planta de embotellado.

“SOS Fonte de Troncoso lleva años demandando la recuperación de este histórico manantial”, recuerda el colectivo vecinal, que en un comunicado de prensa reitera con motivo de los nuevos destrozos su “llamamiento de urgencia” al Ayuntamiento de Mondariz Balneario, propietario del edificio, y a la Xunta de Galicia, que “encargó un proyecto de rehabilitación”. SOS Fonte de Troncoso pide “a las autoridades competentes” que “encarguen a los técnicos municipales y al arquitecto autor del proyecto de rehabilitación un informe completo sobre los daños”. Que este informe derive, por fin, en “acciones urgentes para frenar el deterioro mientras no empieza la restauración”, y que se tomen medidas para “evitar el expolio y el vandalismo” en la fuente, a manos de “personas sin escrúpulos”. Con este fin, y ante la cantidad de elementos de piedra y las partes metálicas que ha arrancado el agua, el grupo reclama que “la Guardia Civil y la policía autonómica pongan en marcha un plan de vigilancia diurna y nocturna”. El pasado mes de abril autores aún “sin identificar expoliaron uno de los cuatro leones alados de la barandilla interior aprovechando que la fuente estaba abierta” y se encuentra apartada del núcleo del pueblo turístico.

El colectivo aprovecha la dantesca situación actual causada por la riada para recordar que la “inusitada fuerza del auga del Tea no es el único motivo que explica el daño” infligido a la fuente. “El abandono y la especulación que sufrió esta histórica surgencia en las últimas décadas también están en la raíz del deterioro alarmante de un edificio protegido”, concluyen los vecinos, “que abrió sus puertas en 1910 de la mano del reconocido arquitecto porriñés Antonio Palacios, amigo de Enrique Peinador Lines”, propietario del balneario de Mondariz.