Puig pide un “reset’ territorial” y una financiación justa en la celebración del Nou d’Octubre

El presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, ha reivindicado un “reset territorial” con el propósito de alcanzar una financiación “justa para todos los territorios” y una fiscalidad que “evite el dumping”, para lo que ha apostado por unos pactos autonómicos “de segunda generación” que “actualicen el estado autonómico”, y, todo ello, para alcanzar una España “polifónica”. Puig se ha expresado de esta manera en su discurso institucional con motivo del 9 d’Octubre, día de la Comunidad Valenciana, que conmemora la entrada del rey Jaume I a Valencia en 1238. Una celebración que coincide con los 40 años de la aprobación del Estatut d’Autonomia.

Puig ha incidido en que, ahora, en España, “necesitamos dar todos para ganar todos”, también para “sanar fracturas con el mejor remedio, el respeto”. Para ello, ha vuelto a reclamar la necesidad de contar con una financiación justa y la condonación de la deuda ligada a la infrafinanciación, mediante una “cogovernanza eficiente”.

Así, en su intervención en el acto institucional de Entrega de Altas Distinciones de la Generalitat Valenciana -al que ha asistido la ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, entre otras autoridades políticas, económicas y sociales-, ha recalcado que en el Día de la Comunitat Valenciana la autonomía “no es una sociedad anónima”, sino aquella “de respeto al diferente, a cada territorio, a quien no piensa igual”.

El jefe del Consell ha hecho hincapié en el 40 aniversario de la aprobación del Estatut d’Autonomia y ha celebrado este “logro del autogobierno democrático” que, ha defendido, “ha generado un marco de libertades, derechos y convivencia” tras un “silencio antiguo y muy largo que acallaba nuestra lengua, nuestra cultura y nuestra identidad”. “Ese silencio se rompió, ha permitido cinco millones de formas de ser valencianos sin renuncias, sin exclusiones y apreciando la diversidad”, ha expresado, al tiempo que ha puesto en valor que la sociedad valenciana “tomó partido” y no fue “indiferente”.

En su intervención, Puig ha hecho referencia a la guerra de Ucrania, ha recordado el “dolor” que ha ocasionado “a 3.000 kilómetros de casa” y ha avisado de que, “ante la barbarie, la equidistancia es complicidad”. Por ello, ha destacado la acogida con “los brazos abiertos” a los refugiados ucranianos en la Comunitat. “Sentimos su dolor, admiramos su resistencia y compartimos la esperanza de la paz”, ha incidido.

Por otro lado, se ha referido a la inflación y ha remarcado que el Consell “no es indiferente a las graves dificultades que está provocando en familias y empresas”. Así, ha resaltado la apuesta con “responsabilidad llena” de “ejercer las competencias autonómicas”. “La Generalitat está junto a la mayoría social”, ha reivindicado.

Ha cargado contra “los peores fantasmas del pasado” al haber extendido “una nube negra en toda Europa” con “fanatismo, guerra e incertidumbre” con motivo de la invasión de Ucrania. Frente a ello, ha puesto en valor que 40 años después “somos un millón y medio más de valencianos, tenemos cinco veces más titulados universitarios y casi el doble de mujeres trabajando, aseguramos el derecho a la dependencia y tenemos 26 hospitales y 2.000 centros educativos”.

El talento y la resistencia de los premiados

La resistencia, el talento, la rebeldía, el diálogo, la pasión o el rigor, pero sobre todo, la humildad, son algunos de los valores de los premiados este 9 d’Octubre por la Generalitat, quienes más allá de sus éxitos personales son “dignos de admiración” por los valores que encarnan, ha añadido Puig.

De las Altas Distinciones, ha destacado que en el poeta oriolano Miguel Hernández residirá siempre “al alma de la dignidad”, pues cuando llegó la infamia y la cárcel “nunca se apartó del camino”; de Enric Valor ha señalado que asumió la voz, la lengua y el alma de un pueblo, desafió la censura y ahora “supera a la ignorancia con un legado de palabras, estima y rondallas”; del escritor Manuel Vicent ha destacado su sensibilidad hecha arte, y de la cantante Soler Giménez su talento en la música.

Del premio al pueblo ucraniano, ha resaltado su resistencia, así como la humanidad y solidaridad del pueblo valenciano. Puig ha valorado también la sensibilidad del escritor Rafa Lahuerta y de la artista Pilar Dolz; el talento en el deporte del árbitro Mateu Lahoz y de la baloncestista Anna Gómez, y en el ámbito del emprendurismo el de la firma ilicitana PLD Space.

Ha agradecido la responsabilidad de los sindicatos de los servicios públicos valencianos, con la “imprescindible tarea” de Luis Lozano, Juan Cruz, Daniel Matoses y Vicent Mauri; el diálogo como “pieza clave” en Ford; y “la fuerza de la unión” del Foro citrícola valenciano. De la primera abogada de España, Ascensión Chirivella -cuyo premio, a título póstumo, han recogido dos bisnietos- ha resaltado que no se resignó y ganó el pleito contra su destino. También ha valorado la rebeldía de mujeres vanguardistas como la empresaria Dolores Cortés, la sindicalista Ofelia Vila en su lucha feminista en un mundo de hombres y de la cooperativa de Viver (Castellón) frente a la despoblación, así como el coraje de Avapace con su “enorme trabajo” y de Carlos Sanjuán, impulsor de la campaña “Soy mayor, no idiota”, quien ha demostrado que “la vida no tiene solo cronología”.

Otros valores que ha destacado son la profesionalidad de los periodistas que han contado el autogobierno de estos 40 años, personificado en Jesús Prado, Francisco Pérez Puche, Pirula Ardenius, José María Arquimbau y Vicente Hipólito; la fuerza artística de la actriz Magüi Mira, y la tenacidad del regatista Iván Pastor. La pasión del Elche CF, el CD Castellón y el Hércules; el rigor de la científica Carmen Nájera, de le editorial Pre-Textos y de la Associació de gestors Esportius; la conciencia empresarial de Funcotex y Diseños Medi; o la emoción de las raíces del pilotari ‘Pigat’ y el músico Fermín Pardo han sido otros de los valores que ha destacado Puig.

Tres de los premiados este año no han podido asistir al acto y se les entregarán más adelante. Son el escritor Juan José Millás (Premi de les Lletres), el artista Antoni Miró y la fotoperiodista Cristina de Middel.

Durante la ceremonia de entrega ha habido premiados que no han podido evitar emocionarse, como Margarita, la ucraniana acogida en la Comunitat que ha recogido el premio en nombre de su pueblo o el pilotari ‘Pigat’, mientras que uno de los más aplaudidos ha sido Carlos Sanjuán.

Vicent, en nombre de todos los premiados

El escritor y periodista Manuel Vicent, de 86 años, ha intervenido en nombre de todos los galardonados y ha asegurado que estos premios son un “estímulo para seguir trabajando para cumplir con el deber, a la vez que sirven como elemento de cohesión de la Comunitat Valenciana para seguir adelante en la búsqueda de esa pequeña felicidad que se conquista a diario y que todo el mundo se merece”.

En este sentido, al referirse al resto de premiados, ha defendido que “en estos tiempos de postración moral y pesimismo congénito que se compagina con una frivolidad arrolladora hay personas que se levantan todos los días dispuestos a poner su esfuerzo al servicio de su talento para hacer la vida más agradable, soportable y digna de ser vivida”. “Espero ser querido entre los míos, en mi propia tierra, donde cuando al saludar dices ‘Bon dia’ y te contestan ‘Bon dia’”, ha defendido, parafraseando al también escritor Josep Pla.

La Procesión cívica recobra su recorrido tradicional

La procesión cívica de la senyera en el 9 d’Octubre recobró este año el recorrido habitual por la ciudad de Valencia, una vez superadas las restricciones impuestas por la pandemia de la covid o por las obras urbanísticas, en un ambiente de normalidad y clima festivo, en el que no faltaron las bandas de música y las charangas interpretando música festiva.

Después de que en 2020 se suspendiera por la pandemia y se limitara a un acto institucional en el Ayuntamiento, y de que en 2021 se modificara el recorrido por la reforma de la plaza de la Reina, el traslado solemne de la senyera volvió en este 2022 al itinerario tradicional, por la plaza del Ayuntamiento, San Vicente, plaza de la Reina y calle de la Paz hasta el Parterre, para regresar al consistorio por Pintor Sorolla y Barcas.

Con un gran despliegue policial, y con un cordón de seguridad a lo largo de todo el recorrido, la procesión cívica transcurrió con normalidad, con aplausos y vítores al paso de la Real Senyera, un ambiente que solo se vio alterado por grupos minoritarios de extrema derecha y de exaltados que, de tanto en tanto, increpaban a las autoridades de izquierda, que gobiernan el Ayuntamiento y la Generalitat.