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El PSC asegura que ya solo quedan “flecos” para llegar a un acuerdo presupuestario con ERC en Cataluña

Las conversaciones para ultimar el pacto de las cuentas entre el Govern y los socialistas continuarán este martes

Salvado Illa y Pere Aragones
El presidente del grupo parlamentario del PSC Salvado Illa saluda a Pere Aragonès en el Parlament en una imagen de archivo. EFE / FONTCUBERTAEnric Fontcuberta (EFE)

Se empieza a ver la luz al final del túnel de la negociación de los Presupuestos de la Generalitat. El PSC ha asegurado en un comunicado, después de un lunes de reuniones de mañana y tarde con los representantes del Govern, que solo quedan “los últimos flecos” para cerrar del pacto y que este martes habrá otro encuentro con las consejeras de los departamentos de Presidencia y de Economía, Laura Vilagrà y Natàlia Mas, respectivamente. Se trata de la primera vez en toda la negociación que los de Salvador Illa quitan gravedad a las diferencias con los republicanos en cuanto a las condiciones para firmar las cuentas y dan a entender que las conversaciones están en su último tramo. La portavoz de ERC, Marta Vilalta, había instado en la mañana, en la rueda de prensa semanal de la formación, a que se cerrara ya el pacto y había insistido en que no había ningún “escollo” para hacerlo.

Pere Aragonès, president de la Generalitat, ha afirmado esta noche durante la entrega de los Premios Nacionales de Comunicación 2022, que han recibido los periodistas Olga Viza, Manel Alias y la marca Cupra, ha expresado su confianza de que se alcance “pronto” el acuerdo porque los ciudadanos, ha dicho. “necesitan los recursos que están en juego”, informa Efe. La presentadora del acto, Cristina Solias, le ha planteado si esperaba cerrar este martes el acuerdo y el president ha contestado “espero que si”. “Estamos trabajando para conseguir un acuerdo parlamentario y, como precisamente quiero que pase muy rápido y que vaya bien, creo hay que tener respeto a las negociaciones que están en marcha”, ha añadido.  La consejera de Presidencia, Laura Vilagrà, ha asegurado que las  negociaciones están en el “esprint final”.

Las dos delegaciones, que coincidido por primera vez en semanas en que la negociación solo pende de “flecos”, se han reunido desde las 9 de la mañana en el Palau de la Generalitat, han hecho una pausa para comer, y posteriormente se han vuelto a encontrar hasta poco después de las 6 de la tarde. “Mañana martes continúan las reuniones para cerrar los últimos flecos”, han informado los socialistas en un breve comunicado. El mismo texto ha sido enviado desde del departamento de Presidencia. Que se haya pactado este enunciado es un signo de que las negociaciones se han encarrillado tras semanas de suspense. Hace casi cuatro meses que el líder de ERC, Oriol Junqueras, vetaba al PSC como posible socio por “no estar comprometido con el fin de la represión o al menos sigue avalando que continúe”. Desde entonces, el Gobierno y ERC han logrado cambiar el Código Penal y se dio luz verde a los Presupuestos Generales del Estado.

“Toda la confianza en los equipos negociadores. Las conversaciones siguen las próximas horas y lo haremos todo para llegar a un acuerdo”, ha asegurado Vilalta en la sede del partido, tras la reunión semanal de la cúpula republicana. En medio de la rueda de prensa ha llegado la noticia de la interrupción de las negociaciones en el Palau. Vilalta ha recordado que el modelo de la vía orbital de Barcelona no es el suyo (de hecho, la ponencia aprobada el sábado en su congreso la califica de “anacrónica”) pero ha insistido en que han cedido en ese punto para lograr “el bien mayor” de poder contar con los Presupuestos.

Una de las grandes dudas sigue siendo la ampliación de El Prat - Josep Tarradellas, que los socialistas ponen como uno de los puntos trascendentes para dar el sí a las cuentas, junto a finalizar la tramitación del proyecto recreativo y de convenciones del Hard Rock. Vilalta ha asegurado que hay punto de “acuerdo”, aunque los republicanos rechazan específicamente “la ampliación impuesta por Aena”. Ese plan implica acabar con una zona de protección natural de la red Natura 2000, de la Unión Europea. La ponencia aprobada por las bases quiere que se conserve ese espacio pero el redactado da entender que queda la puerta abierta para discutir otras alternativas de crecimiento. La duda es si eso es suficiente para el PSC, que parece querer que claramente se abrace la palabra “ampliación” en el acuerdo.

El comunicado vespertino del PSC abre la puerta a un acuerdo no muy lejano en el tiempo. Tras la reunión de la comisión ejecutiva del partido, Elia Tortolero, su portavoz, remarcó que aún quedaban cosas por cerrar “que no eran menores”. “El acuerdo de la B-30 es un paso importante porque respeta la voluntad del Parlament, de los territorios y es para prosperar”, dijo. Los socialistas presentaron el 28 de diciembre un documento con sus peticiones, que exigen que se acepten íntegramente. Dicen que es un plan de mínimos aunque en realidad es un todo o nada como han llegado a deslizar. El aeropuerto, es desde luego, el gran escollo que les separa pero hay otros puntos relevantes que han reivindicado estos días los socialistas y que seguían en el aire.

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El interrogantes es si el PSC se mantendrá firme en su posición y, por tanto, si ERC ha seguido cediendo a sus exigencias o si bien ha modificado su postura. La portavoz socialista Alícia Romero ha ido desgranando las últimas semanas los puntos de desacuerdo. El PSC rechaza, por ejemplo, la apertura de las nuevas delegaciones del Govern en el exterior, exige un plan de choque de las listas de espera y que el Ejecutivo renuncie al plan piloto de la renta universal que pactó con la CUP hace dos años y que supondría un desembolso de 40 millones de euros. Los socialistas dicen que esa renta es inviable porque para hacerla efectiva se necesitaría una inversión de más de 30.000 millones, casi la misma suma total de los presupuestos catalanes. Por ello y por mucho que la consejera Meritxell Serret lo haya presentado en Finlandia, quieren que esa partida se destine a un aumento del 7% de la tarifación social para crear, por ejemplo, 2000 plazas de residencia o mejorar las condiciones laborales de los trabajadores. Además de estas diferencias, el PSC reivindica, en contra del criterio del Govern, que los 759 millones de euros de la Disposición Adicional Tercera se inviertan en infraestructuras. ERC se abstuvo en este punto en el debate del jueves pasado en el Parlament.



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