Nacen cinco tortugas bobas en la playa de la Mar Bella

La playa de la Mar Bella de Barcelona vio nacer la noche del jueves al viernes a las primeras cinco crías de tortuga marina caretta caretta (también conocida como tortuga boba), una especie protegida y catalogada como vulnerable. El Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona explicaron ayer que los cinco ejemplares forman parte del nido de 77 huevos identificado el pasado 16 de julio. El nido fue entonces trasladado lejos de la orilla para evitar que fuera engullido por el mar, si había oleaje fuerte.

Las cinco tortugas recién nacidas fueron trasladadas a la Fundación CRAM, donde serán criadas en cautividad hasta que tengan un peso adecuado para ser liberadas. La previsión ahora es que en las próximas noches nazcan otras crías, por lo que un grupo de voluntarios vigilarán el nido, como han hecho día y noche desde que se encontró.

Esta ha sido la primera vez que se ha detectado un nido de la tortuga boba en una playa de la ciudad de Barcelona, un nido que debe sumarse a otros tres detectados este verano en distintos puntos del litoral catalán.

En el nido de la Mar Bella quedan ahora 55 huevos, pues otros 17 se trasladaron desde un principio a las instalaciones de la Fundación CRAM para que fueran incubados de forma artificial.

Cuatro de las cinco tortugas nacidas ayer presentan algún tipo de malformación, algo esperable dado que los huevos han eclosionado en solo 46 días, cuando lo habitual es que salgan del huevo a partir de los 60 días.

Este está siendo un verano récord en puestas de huevos de tortugas en las playas catalanas, con cuatro casos, algo que no ocurría desde 2014. La semana pasada se halló otro nido con huevos de tortura boba (caretta caretta) en la playa del Trabucador, en el delta de l’Ebre.

Los biólogos creen que este aumento de la presencia de esta especie de tortuga, que habitualmente desova en las playas del Atlántico —con mayor abundancia en Florida, México, Costa Rica y Panamá— y que acude cada vez más a desovar en las playas del Mediterráneo Occidental, se debe al cambio climático, aunque aún no disponen de datos concluyentes.

En lo que va de verano, además de las puestas del delta y de la playa de Barcelona, también se han localizado nidos de tortuga boba en la playa de Vila-seca (Tarragona), donde una misma madre hizo dos puestas, que fueron agrupadas por los biólogos.