Los mejores ‘gimbales’ para sacar fotos en movimiento con el móvil

Si eres amante de la fotografía y no puedes parar de capturar todo lo que hay a tu alrededor en el día a día o en tus viajes, sabrás que conseguir vídeos sin temblores o imágenes de larga exposición que no salgan borrosas no siempre es fácil. Un gimbal puede convertirse en tu mejor aliado.

¿Qué es un gimbal y para qué sirve?

Este dispositivo, también conocido como estabilizador, permite reducir la vibración, los temblores y los movimientos involuntarios típicos cuando se graba en movimiento con el fin de conseguir la mejor calidad en las imágenes. Estéticamente podría definirse como un trípode aéreo que está formado por dos partes: un cuerpo que sostiene la cámara y unos agarres para sujetarla y dirigirla fácilmente con las manos. Gracias a un conjunto de sensores, acelerómetros y algoritmos de control, mantienen la cámara totalmente estabilizada mientras se graba, incluso en actividades como correr o saltar sin la necesidad de contar con un suelo firme o nivelado.

Más allá, son capaces de tomar el control de la cámara del móvil para iniciar un vídeo, tomar una foto o realizar acciones como acercar o alejar el zoom. Para utilizarlo, es importante elegir un modelo que se adapte a las necesidades de cada usuario y con el que se puedan conseguir los resultados deseados. Y para facilitar la búsqueda, hemos seleccionado algunos de los mejores gimbales para cámaras del mercado.

¿Qué modelos de estabilizadores para el smartphone hemos elegido?

Con un presupuesto máximo de 170 euros, los gimbales que participan en esta comparativa son: DJI OSMO Mobile 6 (9,5), ZHIYUN Smooth Q4 Combo (8,5), Rollei Steady Butler Mobil 3 SE (7,75) y Quimic estabilizador para móvil (6,5). Estos son los aspectos que hemos tenido en cuenta a la hora de analizarlos:

⋅ Diseño: se pueden plegar sus partes, tienen forma de palo o cuentan con agarres laterales, el teléfono se acopla y se extrae con facilidad, sus ángulos de rotación…

⋅ Materiales: cómo es el acabado de cada modelo, su resistencia y si los materiales con los que están fabricados favorecen su ergonomía.

⋅ Ergonomía: ¿son fáciles de manejar manualmente?, ¿se adaptan bien a las manos de los usuarios?, ¿su peso provoca dolor en las muñecas?

⋅ Estabilidad: si es lo suficientemente estable para utilizar corriendo, saltando o en vehículos en movimiento, si puede colocarse fijo en un lugar inestable y conseguir buenos resultados…

⋅ Experiencia de uso: ¿el gimbal cumple su función, es fácil de manejar y permite conseguir imágenes de buena calidad?

⋅ Compatibilidad: ¿puede utilizarse con cualquier smartphone o está diseñado únicamente para algunos modelos? Si es así, para cuáles.

⋅ Extras: si dispone de diferentes modos o tecnologías que incrementen sus capacidades o si puede manejarse desde el teléfono móvil a través de alguna app.

Comparativa sobre los mejores gimbales para móvil: así los hemos probado

A lo largo de varias semanas hemos utilizado cada una de estas cuatro propuestas con distintos móviles (un móvil de gama baja de marca Xiaomi, un Samsung de gama media y un iPhone), con los que hemos grabado vídeos durante acciones tan variadas como correr, saltar, desde la ventanilla de un coche o en terrenos abruptos para comprobar tanto su estabilidad como los planos que se obtienen realizando giros o movimientos bruscos.

El gimbal de DJI ha logrado una valoración media de 9,5 puntos y es el mejor de la comparativa. Esto se debe a la calidad de las imágenes que se consiguen con él, gracias a sus múltiples posibilidades de estabilización, enfoques y versatilidad a la hora de grabar diferentes tipos de planos.

Gimbal DJI OSMO Mobile 6: nuestra elección

Con un diseño plegable y extensible y 309 gramos de peso, este gimbal es muy fácil y ligero de manejar. Está formado por un mango revestido con material antideslizante que garantiza un agarre ergonómico, en el que se encuentran los distintos botones de control y que se va desplegando para colocar el teléfono móvil sobre un brazo extensible: se encaja magnéticamente a través de un imán circular que lleva incluido y que mantiene el móvil completamente fijo.

Además, una vez que el gimbal DJI OSMO Mobile 6 detecta el smartphone, se inicia la app DJI Mimo desde la cual se puede comenzar a grabar todo tipo de contenido con múltiples posibilidades de edición, así como controlar diferentes acciones como tomar fotos, empezar una grabación, hacer zoom, adaptar el enfoque... Es compatible con una gran variedad de marcas como Apple, Samsung, Huawei, Xiaomi u OPPO, aunque los mejores resultados se obtienen con iPhone, ya que la app está pensada sobre todo para el teléfono de la firma de la manzana.

Dispone de una estabilización en 3 ejes y tecnología integrada para evitar cualquier tipo de vibración en las grabaciones y, como su brazo se extiende hasta 215 mm, resulta ideal para grabar planos picados y contrapicados con unos resultados realmente buenos.

Otra de sus características destacadas es que cuenta con tecnología Active Track 5.0 gracias a la cual es capaz de seguir a una persona durante toda la grabación sin perder el enfoque, incluso si está caminando, corriendo o montando en monopatín. Desde una pequeña rueda situada en su lateral también es posible controlar el zoom, para conseguir desenfoques o acercar y alejar el plano sin movimientos bruscos.

Además, el dispositivo es muy versátil tanto para grabar a terceras personas como a uno mismo, ya que dispone de unos apoyos para colocar en la parte baja del mango, convertirlo en trípode y hacer fotos o vídeos dejándolo apoyado sobre una superficie o la posibilidad de utilizarlo a modo de palo selfie gracias a su brazo extensible.

También funciona con control gestual con el que iniciar la grabación o tomar una fotografía desde la distancia con solo levantar una mano. Funciona con batería que se carga a través de un cable tipo C y que garantiza un tiempo de uso de unas seis horas.

Gimbal ZHIYUN Smooth Q4 Combo: la alternativa y mejor relación calidad-precio

Su diseño es muy similar al modelo de DJI: una empuñadura de agarre ergonómica con un un brazo extensible de hasta 215 mm para grabar desde distintos ángulos que finaliza en un pinza en la que colocar el teléfono magnéticamente. Tiene un peso de 880 gramos, por lo que resulta algo más pesado de manejar aunque tampoco hace que se cargue demasiado la muñeca y puede plegarse de manera cómoda para guardarlo cuando no se esté utilizando.

En su mango se encuentran las distintas ruedas de control con las que subir y bajar el brillo de la imagen, ajustar el enfoque y los botones para iniciar o parar la grabación o para acceder a sus modos. Curiosamente, los controles están situados en el lado izquierdo del dispositivo, por lo que resulta más cómodo utilizarlo con la mano izquierda, lo que puede ser un poco difícil para los diestros si no disponen de una buena habilidad para utilizar esa mano.

Para conseguir mejores resultados hay que sincronizar el móvil con la app ZY Cami escaneando un código QR o buscándola en la tienda de aplicaciones de cada sistema operativo. Una vez descargada, hay que conectarla a través de Bluetooth y crear una cuenta para poder utilizarla. En este punto cabe destacar que a veces da fallo y se desconecta, por lo que es necesario apagar el Bluetooth y volver a sincronizar la app.

Con ella se pueden editar los vídeos, aplicar filtros, acceder a distintos modos de grabación como disparo inteligente, cámara lenta o establecer el control por gestos para utilizarlo desde la distancia o el modo seguimiento, aunque este último se pierde si se hacen movimientos muy bruscos.

Pero la principal característica que diferencia este modelo es que dispone de una luz flash incorporada que se puede colocar a través de un imán sobre el teléfono móvil. Así, se consigue una mejor iluminación y brillo de la imagen, siendo ideal para grabar por la noche o en ambientes poco iluminados.

El gimbal ZHIYUN Smooth Q4 Combo también está equipado con un trípode, cuatro filtros de luz de diferentes colores para colocar sobre el flash y que le aportan un toque especial a los vídeos, un cargador y un pequeño estuche. En cuanto a su autonomía, la batería dura alrededor de 15 horas.

Gimbal Rollei Steady Butler Mobil 3 SE

Un gimbal de tres ejes con diseño tradicional que puede girar hasta 340º para capturar planos desde distintos ángulos. Es compatible con todo tipo de smartphones, que se colocan en la pieza de enganche a través de conexión magnética. Sin embargo, cabe destacar que aquellos teléfonos que disponen de cámaras de gran tamaño y que sobresalen, como el iPhone 13 Pro Max, no quedan del todo estables en este dispositivo.

En el mango del gimbal Rollei Steady Butler Mobil 3 SE se encuentran los controles de encendido y apagado así como la ruleta con la que controlar el enfoque, el FPV (vista en primera persona) o manejar el giro. Estas funciones pueden dirigirse además a través de su app Rollei Smart Gimbal 2, disponible para iOS y Android. Es gratuita y con ella se puede acceder a seguimiento facial, calibración, seguimiento de objetos, imágenes panorámicas, mapas de tiempo… Un inconveniente de la aplicación es que solamente se puede usar cuando se cuenta con conexión a Internet, por lo que no funciona en lugares donde no hay cobertura.

Los vídeos que se consiguen con él son de buena calidad aunque si se realizan giros muy bruscos la imagen no queda estabilizada del todo. Dispone de un pequeño trípode para colocar en la parte inferior y conseguir un apoyo para grabar sobre el suelo y también viene incluido un cargador tipo C y un manual de instrucciones para aprender más sobre su uso.

Gimbal Qimic estabilizador de móvil

A diferencia de los otros modelos analizados en esta comparativa, el gimbal de Qimic está formado únicamente por un eje. Esto se traduce en que no tiene el mismo nivel de rotación y estabilidad que los que cuentan con tres. Por ello, los resultados que se obtienen con este dispositivo, aunque son de buena calidad, no tienen el mismo nivel de profesionalidad que los otros: está más bien pensado para personas que buscan un gimbal económico para grabar vídeos esporádicos en su tiempo libre.

En cuanto a su diseño, es muy similar al resto: está formado por un mango que se puede alargar hasta 60 cm que termina en una pinza en la que colocar el móvil con un sistema de clip, y se complementa con un pequeño mando de control que se adhiere magnéticamente al palo. Es el encargado de manejar el gimbal y, aunque queda bien fijado, hay que tener cuidado a la hora de utilizarlo porque con los golpes puede caerse y perderse. Es compatible con una gran gama de dispositivos, aunque el fabricante advierte de que no es compatible con los modelos A10, A30 y A40 de Samsung.

A la hora de utilizarlo hay que colocar el teléfono en la parte superior y sincronizarlo vía Bluetooth con el mando de control remoto. Esta es otra de las características que le diferencian de los otros gimbales, ya que no utiliza una app sino que todo se dirige desde el propio mando. Dispone de únicamente tres botones: cámara (para disparar o comenzar la grabación) encendido (necesario para sincronizarlo con el dispositivo) y M .

Este último es el encargado de activar la rotación de la cámara o cambiar entre el modo de disparo vertical u horizontal. También dispone de un sistema anti-vibración, que ayuda a equilibrar la imagen para que no salga desenfocada. También puede utilizarse a modo de palo selfie, gracias a su brazo extensible, o apoyarlo en el suelo con los soportes de trípode. Lo que hay que cargar en este dispositivo es el mando a distancia a través de un USB, pero se descarga con bastante rapidez.

*Todos los precios de compra incluidos en este artículo están actualizados a 5 de marzo de 2023.

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