15 fotos15 maravillas protegidas para no morir de éxitoDe la playa tailandesa de Maya Bay a las pagodas de Bagan, enclaves que han limitado el acceso de los visitantes para preservar su belleza 13 mar 2018 - 18:48CETWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceEl idílico arenal tailandés de Maya Bay se hizo famoso en el año 2000 cuando apareció en la película ‘La playa’. Con el estreno del filme de Danny Boyle, protagonizado por Leonardo DiCaprio, esta playa de la isla de Ko Phi Phi Lee, al sur de Tailandia, se convirtió en un auténtico imán turístico. Después de haber recibido hasta 5.000 visitantes al día en los últimos años, que llegan en barco desde los resorts de Krabi y Phuket, las autoridades locales anunciaron el pasado mes de febrero el cierre de Maya Bay. El objetivo es que se pueda recuperar su arrecife de coral. El veto a los visitantes empezará en junio y durará, por ahora, tres meses. Es una de las últimas noticias sobre destinos y monumentos que limitan parcial o completamente el acceso de los visitantes para preservarse. A continuación hablamos de algunos más. Más información: phi-phi.comPower Sport Images (Getty Images)Maya Bay no es la primera playa tailandesa que sufre su fama ni la única en la que se ha prohibido el acceso a los bañistas por su impacto medioambiental. Aplicando la misma táctica, en mayo de 2016 las autoridades anunciaron el cierre de la pequeña isla de Koh Tachai y de su playa, situada en el mar de Andamán y considerada por muchos como una de las más bonitas de Tailandia. El objetivo del cierre era proteger los corales y la flora y fauna de uno de los mejores destinos para bucear. Las anclas de los barcos, los hoteles en primera línea de playa o los desperdicios que acababan en el mar aceleraron el empeoramiento del estado de los arrecifes. Según la página web del parque nacional del archipiélago de Similan, del que forma parte este paraíso, hoy este arenal solo está abierto a visitas entre noviembre y abril. Más información: similan-islands.comaiaikawa (age)Bagan tiene más de 2.500 monumentos budistas construidos entre el siglo X y XIV, y algunos de ellos son templos y pagodas muy populares entre la población, los peregrinos y los turistas. Las autoridades de Myanmar anunciaron el pasado mes de noviembre la prohibición de subir por las escaleras de sus famosas pagodas para evitar su deterioro. Si maravillarse de las vistas de la meseta de Bagan durante el atardecer en lo alto de uno de estos templos era un imprescindible para muchos visitantes, ahora las autoridades están pensando en medidas para reemplazar tal experiencia, como la construcción de pequeñas plataformas elevadas o la instalación de globos aerostáticos cerca de los templos.lkunl (getty images)Santorini es otro de los destinos que padece las consecuencias de su popularidad. Para hacer frente al turismo masivo y su impacto, la isla griega va a limitar este año el número de pasajeros de cruceros que pueden llegar diariamente a la isla griega (de unos 15.000 habitantes): frente a los 12.000 que llegaban en días punta el año pasado, este 2018 podrán ser un máximo de 8.000. Las autoridades también han implementado un nuevo sistema para el control de los cruceros con el objetivo de distribuir mejor sus llegadas y salidas. Según un estudio de la Universidad de Aegean y de la organización Dianeosis, el gran número de visitantes que llega no solo ha provocado un considerable aumento de la construcción, sino que ha generado problemas de suministro de agua y en el tratamiento de residuos, además de un incremento de la contaminación.Sylvain Sonnet (getty image)Hace más de una década, el Instituto Nacional de Antropología e Historia de México (INAH) decidió prohibir a los visitantes subir las escaleras hasta la cima de las pirámides del yacimiento arqueológico de Chichén Itzá, en la Rivera Maya, para evitar su deterioro. Una decisión adoptada por el desgaste observado en los restos de la ciudad maya, declarada patrimonio mundial por la Unesco en 1988. Especialmente dañada estaba la escalera —custodiada por dos cabezas de serpiente— hasta la cima del templo de Kukulkán, el monumento principal del yacimiento y uno de los que más interés despierta en Chichén Itzá. Incluso se descubrieron pintadas de recuerdo de los visitantes en el pequeño templo superior. Más información: mundomaya.travelCRIS BOURONCLE (getty images)Desde principios de la década de 1980 y hasta 2001, la cueva de Altamira, en Cantabria, mantuvo un régimen de visitas que permitía acceder en turnos de cinco personas y un guía (llegando a algo más de 11.000 visitantes al año). Desde 2002, sus puertas se cerraron a cal y canto a los visitantes, una medida que se mantuvo hasta 2014 y durante la cual tan solo pudieron entrar a la cueva investigadores para el estudio de la conservación de las pinturas rupestres realizadas entre 35.000 y 15.000 años atrás y descubiertas en 1897. Desde septiembre de 2014, los visitantes ya son de nuevo bienvenidos. Eso sí, solo unos pocos y por sorteo. El acceso está controlado y limitado a cinco personas y dos guías a la semana, que visitan la cueva de Altamira los viernes. Los demás pueden visitar la Neocueva (en la imagen), una fiel réplica de la original. Más información: www.mecd.gob.es® Museo de AltamiraLas cuevas de Lascaux, en Montignac, al sur de Francia, son patrimonio mundial de la Unesco y hoy están vetadas a turistas. Descubiertas por cuatro adolescentes en 1940, en 1948 se abrieron al público atrayendo a numerosos curiosos. Una situación que se mantuvo hasta la primavera de 1963, cuando el Gobierno francés cerró la gruta porque las frágiles pinturas rupestres del lugar se estaban viendo afectadas por el gas carbónico desprendido durante las visitas. Las pinturas neolíticas de hace 17.000 años de la llamada sala de los toros de Lascaux se pueden ver hoy en el Lascaux Centre, una reproducción de la cueva construida a pocos kilómetros de distancia. Una réplica (en la imagen) en la que el visitante queda atrapado por la misma atmósfera fría y oscura (en la que también se ha puesto ambientación sonora). Más información Lascaux: www.lascaux.fr/esMEHDI FEDOUACH (getty images)La cueva de Chauvet, a unos 80 kilómetros al norte de Aviñón (Francia), fue descubierta el 18 de diciembre de 1994 por tres espeleólogos aficionados, encabezados por un guarda forestal llamado Jean-Marie Chauvet. Las autoridades francesas quisieron evitar el error cometido en la cueva de Lascaux, y los efectos negativos que provocó que se convirtiera en una atracción turística, así que una de las mayores cuevas paleolíticas del planeta nunca ha llegado a ser abierta al público. A Chauvet tan solo han accedido algunos investigadores y el cineasta Werner Herzog para rodar el documental ‘La cueva de los sueños olvidados’ (2010). Declarada patrimonio mudial por la Unesco en 2014, el cierre ha conseguido que sus casi mil pinturas rupestres, realizadas hace 36.000 años, se conserven en perfecto estado. Una conseguida réplica, la Neocueva de Pont d'Arc, sumerge al visitante en un ambiente subterráneo, fresco, húmedo y oscuro siguiendo las huellas de los descubridores de la cueva original, que se encuentra a pocos kilómetros. Más información Chauvet: archeologie.culture.frJ. Clottes-MCCDescubierta en 1904, el mausoleo de Nefertari, la esposa favorita del rey Ramsés II, se cerró en 1950 por los problemas derivados de las visitas que amenazaban sus pinturas, de las mejor elaboradas y conservadas. Y así permaneció durante 45 años. En 1992 finalizaron seis años de trabajos de conservación llevados a cabo por el Getty Conservation Institute y el Consejo Supremo de Antigüedades de Egipto. En 1995, la tumba de Nefertari se abría de nuevo al público, pero debido al potencial daño causado por el aumento de la humedad, el dióxido de carbono y la actividad de microorganismos introducidos por los visitantes, el número de personas que accede a este pedazo de la historia de hace más de 3.200 años es fuertemente controlado por las autoridades. En 2011 incluso se habló de la posibilidad del cierre definitivo. Más información: www.sca-egypt.org/ y www.getty.eduBrian BRAKE (getty images)Durante años, la tumba de Seti I, descubierta en 1817 en el Valle de los Reyes de Luxor, estuvo prácticamente cerrada para preservarla. Solo se abría para estudiantes y algunos turistas adinerados. La también conocida como tumba de Belzoni o KV17 es una de los más bellas, aunque muchos de sus elementos ya no se encuentren en su interior (el sarcófago del faraón está en el museo Soane de Londres desde 1824 y otras piezas en el Louvre de París y el museo arqueológico de Florencia). Sus pinturas han sufrido considerablemente debido a la humedad, el humo de las antorchas y el vandalismo, por lo que muchas han perdido su brillo e intensidad original. Para atraer de nuevo a los turistas, alejados de Egipto en los últimos años, las autoridades decidieron reabrir en 2016 la tumba de Seti I. Eso sí, el número de visitas está limitado. Más información: www.sca-egypt.orgDEA / P. LIACI (getty images)Ni‘ihau es la isla habitada más pequeña de Hawái, un paraíso propiedad de la familia Robinson desde el siglo XIX. Elizabeth Sinclair compró la isla en 1864 prometiendo mantener su cultura y tradiciones, lo que han tratado de hacer desde entonces sus herederos vetando que los extranjeros pisen Ni‘ihau. Hoy, además de las pocas decenas de nativos hawaianos que viven en una isla en la que apenas ha llegado la tecnología hay una pequeña base de la Marina de Estados Unidos. Hasta no hace mucho, el acceso a la isla solo estaba permitido al personal militar y sus familiares, miembros del Gobierno estadounidense e invitados de la familia Robinson. Ahora grupos limitados de turistas pueden acceder a Ni‘ihau en una visita de medio día que cuesta 440.000 dólares por persona y durante la cual está estrictamente prohibido acercarse a la población indígena. Más información: www.niihauheritage.org y niihau.usgetty imagesLa isla de Lord Howe, en Australia, solo acepta la estancia de 400 turistas al mismo tiempo. Su objetivo es proteger su rico ecosistema, con 207 especies de aves (130 de ellas autóctonas) y 1.600 especies de insectos. Once kilómetros de largo y menos de tres de ancho, con espectaculares playas para bucear o surfear, que son patrimonio mundial de la Unesco desde 1882 por su belleza y biodiversidad. En la isla, considerada uno de los sitios más limpios del planeta, tan solo tiene un pueblo con poco más de 300 habitantes. Más información: www.lordhoweisland.info y www.australia.comJames D. Morgan (getty images)Escalar la Gran Pirámide de Keops, en Giza (al sur de El Cairo), no solo es arriesgado, también está prohibido por las autoridades. Construida como una tumba funeraria 2.500 años antes de Cristo, algunos siguen tratando de escalar a escondidas sus 140 metros de altura, con el consiguiente daño en las piedras de la estructura y el peligro para quienes lo intentan. Está prohibido e intentarlo puede conllevar incluso penas de cárcel.Mekhamer Photography (getty images)Pravcicka Brana, en el parque nacional de la Suiza bohemia, es el arco de roca natural más largo de Europa, situado a tres kilómetros de Hrensko, al norte de la República Checa. “El acceso al arco está cerrado para protegerlo del gran número de visitantes”, indica su página web. De unos 20 metros de alto, desde 1982 los visitantes tienen prohibido caminar por la parte superior para reducir la erosión de la roca producida por las pisadas y frenar así el proceso de desintegración. Los curiosos pueden admirar el arco sentados justo debajo o desde varios puntos de observación. Hoy la zona es propiedad privada del hotel Falcon's Nest, construido en 1981, y hay horarios para acceder a Pravcicka Brana: de abril a octubre está abierto de 10.00 a 18.00 y entre noviembre y marzo solo abre los viernes y fines de semana de 10.00 a 16.00. Además, se tiene que pagar una entrada de tres euros. Más información: www.pbrana.cz/ensubtik (getty images)Monterosso al Mare, Vernazza, Corniglia, Manarola y Riomaggiore son probablemente cinco de los pueblos más famosos de Italia. Un entorno de cinco pequeñas localidades que conforman el parque natural de Cinque Terre, al norte del país, cuyos 4.000 habitantes ven alterada su vida en temporada alta con la llegada masiva de visitantes, con cifras que han alcanzado los 2,5 millones de turistas al año. Con el objetivo de proteger el territorio, el año pasado se anunció que se están estudiando medidas para tratar de controlar el número de turistas. Por lo pronto, este año se ha puesto en marcha una aplicación en la que se puede comprar la Cinque Terre Card y que indica en tiempo real los senderos que están más transitados para desviar a los transeúntes hacía los que están menos copados. En un futuro, la ‘app’ prevé crear una lista de espera virtual para los cuatro senderos, aunque por ahora las autoridades no han limitado el número de visitantes. Más información: www.parconazionale5terre.itgetty images