Viñedos viejos

Felizmente siguen surgiendo profesionales del vino con visión comercial que han comprendido la inmensa riqueza que atesora el viejo viñedo español, sobre todo en zonas poco valoradas donde pequeñas parcelas han escapado a la plantación de clones productivos de baja calidad.

Es lo que hace Moncayo Wines en tierras de Campo de Borja, el gran reservorio de las mejores garnachas aragonesas, como ya demostró Borsao y sentenció Aquilón. A poco que se investigue, todavía se pueden encontrar tesoros vitivinícolas escondidos. Ellos han localizado viñas de entre 40 y 80 años, situadas en las estribaciones del Moncayo, y a una altitud de unos 680 metros. Cepas sometidas a un clima continental extremado que se beneficia de las húmedas nieblas del Ebro y el frío soplo seco del cierzo.

Con su pequeña producción elaboran Ove por separado, con fermentación en barricas abiertas de roble francés de 500 litros, posterior maloláctica y crianza en roble del centro de Francia. Así consiguen un vino sensual, potente, de nítido aroma, que encierra, junto a notas especiadas y tostados, abundante fruta madura, negra y roja. Goloso, compotado, un punto ardiente, con la acidez correcta, termina reafirmando el carácter de la garnacha: un cálido y fluido baño de fruta.