Rural-trip por la Península
Desde un palacio renacentista revestido con 'art-decò', hasta una casa de campo reinventada en spa de lujo. Cinco casas rurales para este otoño por nuestro experto Paco Nadal
Descubrir remotas zonas rurales y recorrer hermosos parques naturales; conocer a gente emprendedora anclada a un particular estilo de vida o disfrutar, por ejemplo, de una salita de lectura con lámpara de pie, chaise-longue y mantita para sentirse como en casa, en plena Marina Alta. Las acogedoras casas rurales que pueblan la península se convierten por éstas, y muchas razones más, en un destino ideal para el otoño.
Nuestro experto Paco Nadal, autor de la guía Casas Rurales con encanto (El País Aguilar) propone cinco de ellas como mejor pasaporte para perderse, durante unos días, en recónditos rincones de nuestra geografía.
01 Aislados en el Maestrazgo
Peña Abantos, casa rural ubicada en el Maestrazgo de Teruel, llamó la atención de nuestro experto por su localización: aislada y solitaria en mitad de un bosque de pino negro y albar, a ocho kilómetros -por una pista de tierra- de la carretera más cercana, y a 15 del pueblo más próximo. Además, se asoma a un cantil de piedra desde el que se divisa el valle de Nogueruelas, la sierra de Javalambre y a las águilas en pleno vuelo.
La historia personal de sus dueños resulta igual de atractiva que esta acogedora casa, en la que todo es obra suya, desde los cabeceros a la piscina. Después de más de 20 años navegando a vela por todo el mundo, ganándose la vida con los trabajos más dispares en los puertos más remotos, decidieron cambiar las soledades del mar por las no menos emocionantes soledades de la sierra del Maestrazgo turolense. El resultado asegura ahora a sus huéspedes silencio, paz y relajación en un entorno memorable.
- Peña Abantos (vía Peña Abantos 1, Nogueruelas, Teruel). Telf.: 978 728 190 - 609705932 - 618849122. www.ruralabantos.com
02 El Capricho de la portuguesa
No se trata de la típica casa del abuelo reconvertida en alojamiento rural, lleno de aperos de labranza por las paredes. Hay criterio, buen gusto y multitud de detalles: colores intensos pero cálidos, una obra gráfica original que decora los espacios comunes o el rincón de lectura con lámpara de pie, chaise-longue y mantita para sentirse como en casa.
Lo mejor aguarda en el spa, que ocupa las antiguas cuadras y bodega, e incluye un jacuzzi, una alberca a 36 grados con música suave y velas, así como una piscina en el antiguo pozo con agua climatizada que garantizan horas de asueto sin necesidad de salir de la casa. Y cada habitación es única y llena de sorpresas, desde la sugerente Flor de Pasión a la coqueta y abuhardillada La Benialí.
Para disfrutarla, hay que conocer Vall de Gallinera, en Alicante, uno de los más encantadores valles de la Marina Alta, pura esencia morisca a solo media hora de la atestada costa de Denia.
- El Capricho de la portuguesa (Trinquet 7, Benialí, Alicante). Telf.: 966 40 66 74 - 966 40 65 54. www.elcaprichodelaportuguesa.com
03 El Halcón Peregrino
El valle del Nansa, en Cantabria, es una de las joyas ecológicas de esa comunidad. Un emplazamiento que enamora, y en el que se emplaza El Halcón Peregrino, casa rural interior subyuga: rehabilitado con acierto y sin caer en clichés manidos.
La planta baja alberga un gran salón dividido en varios ambientes, con ventanales al valle y una curiosa chimenea de piedra en el centro. Las seis habitaciones del primer piso son muy amplias y luminosas, especialmente las dos suites, con maderas de tonalidades claras (cedro, sequoia) que les dan un toque nórdico fresco y ligero. Y los baños se convierten en una prolongación de la naturaleza exterior, gracias al uso de piedra natural y productos de acogida muy campestres: jabones de limón y aloe, champú de kiwi y gel de tomillo.
- El Halcón Peregrino (La Cerra de Coria, Rábago, Cantabria). Telf.: 942 74 66 79. www.elhalconperegrino.com
04 Palacio viejo
No hay que guiarse solo por su nombre, pues este enorme caserón ubicado en el centro de la Villa de Pastrana (Guadalajara) oculta bajo se vetusta nomenclatura un acogedor alojamientos que, aunque es fiel a su pasado nobiliario y señorial -se trata de un auténtico palacio renacentista del siglo XV-, huye del austero y temible estilo castellano gracias a su decoración interior en tonos pastel, telas estampadas y muebles modernistas y art-decò.
Hay que degustar del tiempo y el silencio bajo la parra centenaria de su patio trasero, rincón encantador cuyo conjunto completan el huerto y la alberca. Y si aún queda tiempo, los atractivos exteriores no defraudan: Pastrana y su casco histórico, la ciudad visigoda y parque arqueológico Recópolis, la sierra de Altomira...
- Palacio viejo (Princesa de Éboli 19, Pastrana, Guadalajara) Telf.: 949 37 07 05. www.atlasrural.com
05 La Posada de Adul
Tradicional, sencilla, pulcra y blanquísima, La Posada de Adul, ubicada la localidad de Carcabuey, se convierte en el alojamiento perfecto para explorar el parque natural de la sierras Subbéticas y la ruta de los pueblos barrocos de Córdoba.
Fiel a la rusticidad de las típicas viviendas andaluzas, especialmente por sus paredes de yeso sin enlucir, armarios de obra con una tela por puerta y cestos de mimbre para las mantas supletorias.
- La posada de Adul (Tercia 18, Carcabuey, Córdoba). Telf.: 957 55 34 71 - 669 42 66 62. http://posadadeadul.tourismbrochures.net
Más propuestas en la guía Casas Rurales con encanto de El País Aguilar. ¿Qué casa rural recomendarías tú?
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.