Todo se reduce a eso
La no negociación entre PSOE y Unidas Podemos pudo parecer una cuestión política en la que no hubo acuerdo, pero se ha tratado de un pugilato entre Sánchez e Iglesias para quedar uno por encima del otro. Vamos, como pasa en tantas parejas y relaciones de trabajo y sociales. Una lucha de poder, y al país que le vayan dando. En estos casos la responsabilidad suele estar repartida, aunque lo normal es que haya uno con más cuota que otro, más manipulador, el que tiró la primera piedra. Para mí fue Iglesias, tras unas elecciones anteriores, cuando le formó Gobierno al PSOE. Ahí empezó el “no me fío” de Sánchez.
Carlos San Antonio Monsell. Madrid
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