Comparativa | Los mejores portátiles para ‘gamers’ por menos de 1.200 euros

No todos los ordenadores están pensados para jugar. Tienen que reunir una serie de características concretas que les permitan ofrecer el máximo rendimiento a la hora de jugar a títulos que requieren de mucha potencia gráfica y de procesador. Tradicionalmente, este mercado estaba reservado a los equipos de sobremesa aunque con el paso del tiempo los fabricantes han ido incorporando a su oferta equipos portátiles diseñados para este tipo de actividades y, además, que pueden trasladarse de un lugar a otro con relativa facilidad. [Si lo prefieres también puedes leer la comparativa sobre portátiles ultrafinos aquí]

¿Qué modelos hemos elegido?

En nuestra selección se ha fijado un presupuesto máximo de 1.200 euros por máquina. Los portátiles para gamers, sobre todo los que tienen un perfil más avanzado, requieren un desembolso económico mucho mayor. Pero esta vez, desde EL PAÍS Escaparte, nos hemos centrado en propuestas pensadas para jugadores ocasionales o que se inician en este universo, tienen un presupuesto ajustado pero no quieren renunciar a un equipo de calidad.

Así, los modelos elegidos son los siguientes: Acer Nitro 5 (7,5), Asus TUF Gaming FX705GD-BQ137 (7,75), HP OMEN 15 DC0019NS (7,75) y Lenovo Legion Y530-15ICH-1060 (8,25). Cada uno ha sido analizado y valorando a partir de distintos criterios, entre los cuales destacan:

- Diseño. ¿Qué acabado ofrece el portátil? ¿Tiene una estructura pensada para garantizar su resistencia en los desplazamientos? Son preguntas obvias, pero importantes, como también lo son sus dimensiones y peso. Nunca se podrán equiparar a los modelos ultrafinos, pero los fabricantes tienen que garantizar una relativa comodidad en los desplazamientos.

- Rendimiento. Es clave. La configuración elegida debe asegurar que el portátil fluye y se desenvuelve bien a la hora de jugar al título que se elija.

- Pantalla. Qué las imágenes tengan calidad y que no haya brillos. Los colores tienen que estar representados de manera natural, que la nitidez y definición sean las adecuadas...

- Sonido. De nada sirve que el portátil muestre una gran calidad de imagen si, por ejemplo, el audio se distorsiona. Una buena imagen combinada con un buen audio arroja experiencias más envolventes y realistas.

- Teclado: Cuánto más cómodo resulte, mucho mejor. El tacto de las teclas y la respuesta que proporcionan garantizarán un mejor o peor rendimiento de esta parte del portátil.

- Autonomía. En este caso, me he visto obligada prácticamente a estar pendiente del cargador: la autonomía continúa siendo el caballo de batalla de los portátiles gamers por la gran cantidad de recursos que consumen.

Así los hemos probado

Cada uno de estos portátiles nos ha acompañado a lo largo de varios días para comprobar cómo funcionan y qué rendimiento proporcionan a la hora de jugar a títulos que requieren de una determinada potencia y procesamiento gráfico. Asimismo, hemos aprovechado la ocasión para poner a prueba sus prestaciones a nivel multimedia y usarlos también para ver alguna que otra película y serie de televisión.

El portátil gamer que ha resultado ganador es el Lenovo Legion Y530-15ICH-1060. Su diseño y construcción son impecables, y el equilibrio que alcanza entre rendimiento, precio y prestaciones es muy bueno a pesar de que la batería dure menos de lo que nos hubiese gustado.

Lenovo Legion Y530-15ICH-1060: Nuestra elección

Nada más sacarlo de su caja, lo primero que llama la atención es su gran acabado y construcción. Con un perfil de 24,2 milímetros y un peso de 2,3 kilogramos, incorpora al igual que otros modelos de su clase un teclado que se retroilumina: pero no lo hace en color rojo como cabría esperar, sino en blanco. Destacan, por otro lado, los finísimos bordes que rodean a su pantalla IPS antirreflectante de 15,6 pulgadas y resolución Full HD. Al igual que otros paneles que hemos visto, es capaz de arrojar frecuencias de actualización de hasta 144 Hz y, además, soporta más de dos millones de píxeles. A nivel de imagen, reproducción de los colores, brillo y contraste es una de las pantallas que más nos ha gustado; sobre todo cuando entran en acción sus altavoces que llevan el sello de la firma Harman Kardon.

Su configuración le permite desenvolverse con soltura y fluidez durante el desarrollo de las partidas. Uno de los aspectos que más ha cuidado el fabricante está relacionado con el calor que suelen generar este tipo de máquinas. ¿Cómo lo han afrontado los ingenieros de la compañía? La clave se encuentra en un sistema térmico de doble canal que ofrece cuatro salidas de ventilación térmicas con el fin de mejorar el flujo del aire que se genera. Asimismo, el equipo tiene 70 aspas de ventilador individuales que minimizan el ruido y tanto la GPU como la CPU se refrigeran individualmente para que el sistema cuente con temperaturas más frías. La combinación de todos estos elementos repercute, por otro lado, y de forma positiva en el rendimiento que logra alcanzar.

La conectividad se ha resuelto de forma bastante eficaz, aunque no tiene ranura para lector de tarjetas de memoria: salida HDMI 2.0, miniDisplayPort 1.4, un puerto USB 3.1 de clase C y tres puertos USB 3.1 de tipo A.

HP OMEN 15 DC0019NS: el aspirante

Presenta una excelente construcción y luce un diseño cien por cien gaming en un cuerpo de 360 x 263 x 25 milímetros de grosor y 2,38 kilogramos. El touchpad se muestra eficaz y debajo de él se sitúan dos botones (uno a la derecha y otro a la izquierda) que imitan a los de los clásicos ratones. Mientras, el teclado es de tipo isla e incluye parte numérica. Su característica más atractiva es que la retroiluminación es personalizable y que puede aplicarse por zonas. Para ello, hay que dirigirse al Centro de Comandos OMEN que trae instalada la máquina y que provee a su vez de otras características de interés como, por ejemplo, la posibilidad de consultar el rendimiento que logra en cada momento.

Con una pantalla de 15,6 pulgadas, acabada en mate y 1.920 x 1.080 píxeles de resolución, ofrece una frecuencia de refresco de 144 Hz. La experiencia de usuario resulta satisfactoria no sólo por el modo en que es tratado el color, sino por cómo se perciben los niveles de contraste, definición y detalle. ¿Y el audio? Deja un buen sabor de boca ya que los altavoces llevan el sello de la danesa Bang & Olufsen. Es aconsejable, por otro lado, la utilización de auriculares no sólo para experimentar una mejor sensación sonora sino también para evadirse por completo del ruido de los ventiladores. Este ruido no es que sea excesivamente molesto, pero así podremos concentrarnos mucho mejor.

Su configuración técnica revela que esta máquina ha nacido para jugar y su rendimiento es más que notable. En la línea del resto de propuestas seleccionadas, viene con un procesador de seis núcleos Intel Core i7-8750H, memoria RAM de 16 Gbytes y un disco duro de un terabyte de capacidad al que se añade una unidad SSD de 128 Gbytes. La gráfica es una NVIDIA GeForce GTX 1050 con 4 Gbytes de memoria dedicados. A nivel de conectividad nuestras necesidades quedan perfectamente cubiertas. Su principal desventaja, como suele ser habitual en los portátiles gamers, es la escasa duración de su batería. Como contrapartida, el equipo incorpora una función de carga rápida.

Asus TUF Gaming FX705GD-BQ137

Este portátil para gamers forma parte de la categoría de productos tecnológicos provistos de la certificación militar MIL-STD-810G, una norma que reconoce su alta durabilidad y resistencia. Además, la parte inferior muestra un diseño hexagonal que acrecienta la rigidez de la estructura.

Con un tamaño de 360,4 x 262 x 26,8 milímetros y un peso de 2,2 kilogramos, al abrir su tapa nos encontramos con una pantalla con retroiluminación LED y antirreflejos de 15,6 pulgadas, resolución de 1.080p y un diseño al que Asus denomina NanoEdge. ¿Qué tiene de especial? Principalmente, el fino grosor de sus marcos laterales que acrecienta la sensación de inmersión en los juegos y las películas. El teclado se retroilumina en color rojo (el nivel de intensidad puede seleccionarse en función de nuestras necesidades), es cómodo de utilizar y brinda un control preciso gracias a una tecnología conocida como Overstroke. Mientras, el reposamuñecas tiene unas dimensiones que garantizan su uso durante muchas horas. A lo largo de todo ese tiempo, uno va comprobando cómo el sistema de refrigeración es efectivo aunque el ruido de sus dos ventiladores se deja notar más que el de otras propuestas.

Ofrece un rendimiento bastante fiable y fluido. Así, lo hemos probado con varios juegos y no hemos tenido problemas. Para ello, combina un procesador Intel Core i7-8750H de octava generación, una memoria RAM de 16 Gbytes ampliable a 32 Gbytes, una unidad de almacenamiento híbrida que combina un disco HHD de 1 Terabyte y otro SSD de 256 Gb, y una tarjeta gráfica dedicada NVIDIA Geforce GTX 1050 con 6 Gbytes GDDR5 dedicados.

Todos sus puertos e interfaces de comunicación se ubican a la izquierda, aunque no tiene ranura para tarjetas de almacenamiento. Tampoco viene con sistema operativo. Su tecnología Wi-Fi es muy rápida, lo que permite (entre otras ventajas) ampliar el alcance de la señal o disfrutar de una conexión más estable en el caso de las partidas online.

Acer Nitro 5 AN515-52: mejor relación calidad-precio

Con un precio que se aproxima a la barrera psicológica de los 800 euros, este Nitro 5 de la taiwanesa Acer se plantea como una opción bastante económica para los jugadores ocasionales. Incluso, para utilizar algunos programas de edición de vídeo y fotográfía. Alcanza un grosor de 26,8 milímetros, pesa 2,7 kilogramos e integra un teclado completo que se retroilumina en rojo, proyectando así una estética acorde a la que suelen mostrar los modelos que pertenecen a esta categoría. La pantalla tiene un tamaño de 15,6 pulgadas y una resolución Full HD, mientras que el audio combina las tecnologías Acer TrueHarmony y Dolby Premium para una experiencia más enriquecedora. Así, la unión de ambos apartados permite ofrecer unos resultados bastante satisfactorios teniendo en cuenta la franja de precio en la que se sitúa.

A la cabeza de su configuración destaca un procesador Intel Core i7-8750H de octava generación de seis núcleos, una memoria RAM con 8 Gbytes de serie y una unidad de almacenamiento que combina un disco tradicional de 1 Terabyte de tamaño y una unidad SSD de 128 Gbytes. La parte gráfica corre a cargo de la controladora NVIDIA GeForce GTX 1050 con 4 Gbytes de memoria y tecnología de gráficos GDD5. ¿El resultado? La combinación de sus componentes le permite desenvolverse con relativa fluidez jugando a títulos actuales, aunque en momentos puntuales se nota que esos 8 Gbytes de RAM se quedan un poco cortos.

El sistema de refrigeración mantiene temperaturas bastante constantes sin que la máquina se caliente en exceso y sorprende de manera positiva. Se lo debe al diseño de doble puerto de escape que ha desarrollado la firma y a la tecnología CoolBoost, propiedad de Acer. Al emplear el sistema NitroSense podremos supervisar y gestionar determinados valores como la velocidad a la que trabaja el ventilador.

Sus opciones de conectividad incluyen dos puertos USB 2.0, uno USB 3.0 y otro USB 3.1, así como HDMI lector de tarjetas de memoria SD y SDXC. En condiciones de uso normal, el portátil brinda una autonomía de hasta cinco horas que se reduce cuando se exprime al máximo su rendimiento.

*Todos los precios de compra incluidos en este artículo están actualizados a 12 de julio de 2019.