Cada cuatro años
Esta mañana he salido de casa y me he encontrado con unos obreros arreglando la calle. Pensé que estaba soñando. He continuado y otros obreros estaban adecentando una rotonda. No es posible, me he dicho. Más adelante, había unos trabajadores limpiando un jardín. Esto ya era el colmo. He llamado a mi amigo Josemi, especialista en fenómenos paranormales, y le he explicado la situación. Me ha dicho que en su ciudad pasaba lo mismo, que es un fenómeno que no se puede explicar científicamente y que ocurre cada cuatro años. De la misma manera que aparece, desaparece. No se sabe la fecha exacta de su aparición, pero sí la de su desaparición. Este año está previsto que termine el 26 de mayo.
Antonio Casero Martínez
Puerto de la Cruz (Tenerife)
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
