Durante gran parte de la guerra, los rebeldes de Ghouta cargaron contra Damasco, incluida la Ciudad Vieja, donde a menudo se observan marcas de metralla en las calles o paredes. Ahora los cafés vuelven a llenarse y los jóvenes salen por la noche
Una mujer mira por la ventana de un tren a las afueras de Damasco, el 12 de septiembre de 2018. MARKO DJURICA (REUTERS)"Durante la guerra, cuando las bombas caían, había días que no teníamos clientes, pero nunca dejamos de trabajar" dice Dana, camarera en un bar de Damasco, el 12 de septiembre de 2018. MARKO DJURICA (REUTERS)Una familia camina por la ciudad de Damasco, el 12 de septiembre de 2018. MARKO DJURICA (REUTERS)Un conductor fuma shisha tras llegar a la feria internacional recién abierta en Damasco, el 12 de septiembre de 2018. MARKO DJURICA (REUTERS)Niños juegan en un parque abierto recientemente, el 12 de septiembre de 2018, en Damasco. MARKO DJURICA (REUTERS)Un grupo de personas canta en un tren durante su trayecto hacia una feria internacional, el 12 de septiembre de 2018, a las afueras de Damasco. MARKO DJURICA (REUTERS)Un peluquero habla con un cliente en su tienda de Damasco, el 13 de septiembre de 2018. MARKO DJURICA (REUTERS)"Me gusta mi trabajo. Me gustan los bares y la vida nocturna de aquí. Pero me gustaría irme de Siria. No veo futuro aquí", declara a Reuters Rasha, dueña del bar Esco, el 13 de septiembre de 2018, en Damasco. MARKO DJURICA (REUTERS)Un grupo de jóvenes celebra el cumpleaños de uno de ellos en un bar de Damasco, el 13 de septiembre de 2018. MARKO DJURICA (REUTERS)Dos mujeres hablan en un bar de la ciudad de Damasco, el 13 de septiembre de 2018. MARKO DJURICA (REUTERS)Varias personas pasean frente a la mezquita Umayyad, el 14 de septiembre de 2018, en Damasco. MARKO DJURICA (REUTERS)Soldados rusos rezan dentro de la mezquita Umayyad en Damasco, el 14 de septiembre de 2018.MARKO DJURICA (REUTERS)Una pareja celebra su boda a las afueras de Damsco, el 14 de septiembre de 2018. La pareja planea quedarse trabajando en Siria a no ser que encuentren una mejor oportunidad en el extranjero. MARKO DJURICA (REUTERS)Un cementerio dañado visto desde un tren hacia las afueras de Damasco, el 15 de septiembre de 2018. MARKO DJURICA (REUTERS)Una mujer sale de un taxi durante la hora punta en Damasco, el 16 de septiembre de 2018. MARKO DJURICA (REUTERS)Un cartel del presidente sirio Bashar al-Assad en Douma, a las afueras de Damasco, el 17 de septiembre de 2018. MARKO DJURICA (REUTERS)Dos mujeres esperan a ser examinadas en un hospital de Douma, a las afueras de Damasco, el 17 de septiembre de 2018. MARKO DJURICA (REUTERS)Un grupo de niños juega a fútbol en una calle de al-Khalidiya, en la zona de Homs controlada por el gobierno, el 18 de septiembre de 2018.
MARKO DJURICA (REUTERS)Una mujer camina entre los escombros de Homs, el 18 de septiembre de 2018. MARKO DJURICA (REUTERS)Una bandera siria ondea al lado de un punto de control en al-Khalidiya, parte de Homs controlada por el gobierno, el 18 de septiembre de 2018. MARKO DJURICA (REUTERS)Un residente del barrio de al-Khalidiya posa entre los escombros en la zona de Homs controlada por el gobierno, el 18 de septiembre de 2018. MARKO DJURICA (REUTERS)
