La gloriosa era ‘disco’ que Tom Ford lleva años reivindicando se plasma en las proporciones moderadamente desmesuradas de estas gafas de sol. Atención al puente superior con apoyo para la frente, al tamaño de las lentes (y a su radical geometría) y a las varillas con detalles dorados.Chus Antón/Ángela Esteban LibreroEl modelo New Andy de Dsquared2 reinventa una silueta de pasta clásica introduciendo detalles sutiles. Por ejemplo, esos salientes en pico que destacan bajo el puente, en torno a la nariz. O el cambio de grosor en el acetato de la montura, que forma un pequeño escalón en los laterales del frente.Chus Antón/Ángela Esteban LibreroEstas gafas de sol Giorgio Armani, con lentes suavemente rectangulares, fina montura de acetato mate efecto carey y puente doble, son elegantes, pulcras y ligeras. Es decir, las cualidades que definen la estética del diseñador italiano. Cuatro décadas de trabajo y un éxito estratosférico le avalan.Chus Antón/Ángela Esteban LibreroHay una declaración de amor al futurismo en las gafas Game de Prada. Fíjese en el modo en que el puente y la parte superior de la montura conforman una única pieza de acetato a juego con las varillas. O en los nervios metálicos que, como en un mueble ‘bauhaus’, estructuran toda la gafa. Rara y perfecta.Chus Antón/Ángela Esteban LibreroEl concepto XXL cobra pleno sentido en estas gafas de sol Gucci que, la verdad, lo tienen todo: montura de pasta sin miedo al tamaño, anchas varillas decoradas con la franja rojiverde emblema de la marca y también ese aire ‘retro’ que aporta la lente amarilla. ¡Bienvenidos a 1979!Chus Antón/Ángela Esteban Librero
