En 2010 Sara Carner fundó una firma para producir perfumería de autor en Barcelona. Comenzó dedicando fragancias a barrios de la ciudad, que pronto se le quedó pequeña. Hoy sus clientes están en Europa, Estados Unidos, Nueva Zelanda, Turquía o Azerbaiyán. Este 'eau de parfum', Besos, es una oda al romanticismo con ecos mediterráneos. 144,99€/100mlHace solo un año que comenzó su andadura, pero esta firma ha despuntado dedicando una fragancia a un elemento cotidiano pero carente de olor: las etiquetas de Twitter. Su fragancia #hashtag es unisex y milénica, se elabora artesanalmente en Barcelona e incluye notas exóticas de incienso, cedro, iris y violetas. Eficaz y directa como un 'tuit'. 145€/87mlAunque el origen de Eight & Bob se remonta a la Costa Azul de los años treinta e incluye anécdotas con fans tan ilustres como John Fitzgerald Kennedy, su resurrección contemporánea es obra de los responsables de la 'boutique' valenciana Hannover 1998. Su fragancia Nuit de Megève evoca una tórrida historia de amor en una estación de esquí. 150€/100mlLa única representante madrileña es la firma fundada por Oliver Valverde, que antes de perfumista fue DJ e ingeniero de sonido. Quizás por eso Nebula I, traducción olfativa de la nebulosa de Orión, es tan abstracta y envolvente como una sesión de 'techno'. Por cierto, acaba de inaugurar su primera tienda en Madrid (Palma, 58). 150€ /50mlEl catalán Santi Burgas aprendió a formular perfumes estudiando el lenguaje comunicativo de las hormigas y en su nueva colección, Palindrome, juega a crear fragancias que se leen igual en ambos sentidos. Es decir, que tras pulverizarla evoluciona y vuelve al punto de origen. Suena complicado, pero cumple lo que promete. Y además huele muy bien. 180€/100ml
