Cada año, a finales de julio, el municipio toledano de El Carpio de Tajo celebra las carreras de gansos , consistentes en descabezar estas aves a caballo mientras cuelgan de una cuerda
Un operario coloca uno de los postes de donde se colgarán los 21 gansos utilizados durante los festejos.Álvaro GarcíaDos mujeres han participado este año en las carreras como caballistas.Álvaro GarcíaMinutos antes de las siete de la tarde, los jinetes marchan por las calles de El Carpio hacia la Plaza de España.Álvaro GarcíaDurante estas carreras, los jinetes "deben demostrar su arte ecuestre abrazándose por el hombro e intentando que los caballos vayan lo más parejo y rápido posible", explica el Consistorio.Álvaro GarcíaLos operarios colocan un ganso en la cuerda. Los técnicos introducen a los animales, una vez descabezados, en bolsas de basura.Álvaro GarcíaUn jinete consigue descabezar a uno de los gansos colgados de la cuerda. Los animales se colocan de uno a uno en la soga. Y los caballistas van pasando para tratar de arrancarles la testa.Álvaro GarcíaDebido a estas fiestas, el pueblo toledano esta hermanado con la localidad alemana de Höntrop, donde también se celebran carreras similares. Según explica el Ayuntamiento, cada cuatro años, un jinete de dicho municipio acude a El Carpio. En la imagen, el caballista germano, este 2017.Álvaro GarcíaLos caballistas celebran con gritos sus actuaciones, mientras el público aplaude y vitorea a los participantes.Álvaro GarcíaDetalle de uno de los jaeces con los que engalanan a los caballos para las fiestas.Álvaro GarcíaDos jinetes se abrazan durante una de las carreras previas al descabezamiento de los gansos.Álvaro GarcíaEn la imagen, un caballista entrega a un operario la cabeza que ha arrancado junto con el cuello.Álvaro GarcíaDos jinetes atraviesan la Plaza de España, con el Ayuntamiento al fondo. Para que los caballos puedan correr mejor, las calles se cubren de tierra para la ocasión.Álvaro García