¿Qué fue de los protagonistas de 'Dawson Crece'?

Dawson Crece se emitió desde 1998 hasta 2003 y duró seis temporadas. En nuestro país, era una de esas series mágicas porque sólo la veían los abonados a Canal +. Vamos, una de esas series que no podías comentar con nadie puesto que contabas con los dedos de una mano las personas que tenían ese servicio de televisión de pago. Años después, Dawson llegó a La 2 y todo el mundo pudo conocer el pueblo ficticio de Capeside y adentrarse  en las tramas de la serie de Kevin Williamson, que ya había firmado otras obras cumbres del universo teen como la saga Scream, Sé lo que hicistéis el último verano y The Faculty.

Mucho más descarnada y menos frívola que compañeras de género, si las series de adolescentes fueran un género en sí mismas, Dawson Crece tocaba absolutamente todos los temas que otras no se atrevían (incluso que su protagonista fuera un cinéfilo pedante e insoportable). La serie comenzaba cuando el personaje de Jen Lindley, interpretada por Michelle Williams, llegaba al tranquilo pueblo de Capeside castigada por sus padres y directa a vivir con su abuela ultracatólica. A lo largo de los episodios descubríamos que el personaje ha sido desterrado de su pueblo por haber sido promiscua y coquetear con todas las drogas conocidas.

Nada más llegar a su nueva vida, se metió sin reparos en la tensión sexual no resuelta entre Dawson (Van der Beek) y Joey (Holmes) y la resolvió haciendo lo que mejor sabía hacer, enrollándose con el prota y llevando su mala relación con la chica buena hasta sus últimas consecuencias. La tensión entre ellas se cortaba con un cuchillo. 

Pero si de algo servía Dawson crece era como reflejo de su época. Uno de sus principales cometidos era enseñarnos de primer mano cómo vestían las chicas guais a finales de los 90 en la costa de Massachussetts. Y también para conocer bandas como Train o Sixpende None the Richer.

Por si esto fuera poco y hace nada menos que 16 años Dawson Crece reflejaba en la televisión estadounidense el primer beso gay entre dos chicos. Jack McPhee (Kerr Smith) salía del armario tras haber sido el chico de Joey y completaba la fantasía de cualquier homosexual adolescente: besar a uno de sus compañeros del equipo de fútbol americano (y tener el apoyo de sus amigos en un pueblo minúsculo de la América profunda, pero eso es otra historia). En definitiva, Dawson Crece era la serie de los raritos y reflejaba a raritos en sus cuatro principales personajes. Y esto es lo que ha sido de ellos.

James Van der Beek (Dawson Leery)

Su sufrimiento en la pequeña pantalla le llevó a convertirse en un meme sinónimo de desesperación y tristeza. Eso sí, a pesar de ser un pesado se llevaba a todas las chicas monas de calle. Su carrera, por el contrario, no fue tan bien. Actualmente participa en CSI Cyber junto a Patricia Arquette en un papel principal. Antes de esto, fue James van der Beek en Don't Trust the Bitch in Apartment 23, una ficción que se reía de él dándole el papel de desesperado actor venido a menos y que James aceptó no sabemos si para pagar el alquiler o porque de verdad tiene esa capacidad de reírse de sí mismo. Por lo demás, su carrera se ha reducido a papeles episódicos en series más o menos conocidas y a algún papel con continuidad.

Katie Holmes (Joey Potte)

Los que siguieron la serie cayeron rendidos a los pies de esta actriz hasta entonces desconocida. Por lo visto, por aquel entonces resultaba tremendamente seductor que interpretara un papel tan vulnerable y bondadoso. Años después de la serie apareció Tom Cruise en escena y toda esa magia se desvaneció: definitivamente Katie no era Joey. No sabemos qué hay de cierto tras aquella leyenda que aseguraba que Tom Cruise no quería dejarla trabajar pero la prometedora carrera en cine que comenzó con La Tormenta de Hielo, Jóvenes Prodigiosos o Batman Begins se vio truncada y pasó a tener papeles en películas mediocres. Desde hace algunos años su trabajo más reconocido ha sido el papel de Jackie Kennedy en The Keneddys, la serie de televisión de la famosa familia.

Michelle Williams (Jen Lindley)

Si hay alguien que de verdad consiguió una carrera en condiciones en el cine y la televisión esa es Michelle Williams. Ella interpretaba a Jen Lidley y, en cierto modo, tuvo la fortuna de que los guionistas decidieron matar a su personaje. No sabemos por qué pero eso siempre hace que los actores se repongan y no se encasillen. Tres veces nominada a los Oscar, la última por Mi Semana con Marylin, Michelle no ha dejado de trabajar en grandes producciones de Hollywood. Es la madre de Matilda, la única hija de Heath Ledger, con quien mantuvo una relación tras el rodaje de Brokeback Mountain. Más interesada en el trabajo que en el colorín la actriz ha atraído miradas de grandes marcas como Louis Vuitton quien la convirtió en la embajadora del bolso Capucine y el W.

Joshua Jackson (Pacey)

Al igual que Katie Holmes, la carrera de Jackson se ha visto fagocitada por su relación con Diane Kruger, con la que se ha limitado a pasear como acompañante por las alfombras rojas de todo el mundo. Su personaje era el del amigo feillo (para gustos colores, claro) y divertido que al final se lleva de calle a la chica buena porque esconde un gran corazón. Y, claro, el rumor de su supuesta relación con Katie Holmes se alimentó para regocijo del público.

Apareció en Scream 2, Leyenda Urbana y Crueles Intenciones pero el que parecía la joven promesa de Hollywood se quedó en eso, en promesa, aunque participó en series de éxito como Fringe. Actualmente su papel en la laureada serie The Affair lo mantiene como uno de los actores jóvenes (de televisión) a tener en cuenta, pero no estrena nada en pantalla grande desde 2011. Por el contrario, su reciente divorcio de Diane Kruger y los rumores de un posible nuevo romance con Katie Holmes le han vuelto a poner de actualidad. Quizás el argumento de Dawson crece se repita una vez más. Pero esta vez en la vida real.