Aunque llevan tiempo apartados de los focos y tiene muchos años, personajes como Chuck Berry, Angela Lansbury, Kirk Douglas o Jerry Lee Lewis siguen dando guerra. Celebrémoslo
Reconozcámoslo: las redes sociales se han convertido en una caja de sorpresas capaz de resucitar a famosos fallecidos y de liquidar a los vivos. Son una dimensión paralela que moldea con inconsciencias el inconsciente colectivo. Muchos de ustedes habrán oído ya hablar de ese Efecto Lázaro, ese que provoca que, de repente, Internet convierta en actualidad una noticia del pasado, como una de las múltiples dimisiones de Esperanza Aguirre o la muerte de Miliki. Todo sea por volver a vivir aquellos momentos intensos con la misma capacidad de sorpresa que si se produjeran ahora mismo. Somos así.
Quizá ese mismo mecanismo de sorpresa se ponga en marcha cuando descubra que todos estos personajes que la conciencia colectiva ha enterrado en el fondo de su memoria siguen vivos y, a pesar de haber alcanzado una edad más que venerable, casi todos coleando. Porque, no nos mienta, ¿acaso no siente un cierto cosquilleo de alegría al descubrir que, por ejemplo, Joan Collins sigue al pie del cañón? Y lo mismo ocurre con el mítico Chuck Berry. Siga leyendo y descubrirá más víctimas de esto que hemos llamado el Efecto Renacido.Sorpresa. Jerry Lewis (Nueva Jersey, 1926) no sólo vive en cada una de las muecas de Jim Carrey o Adam Sandler. Con 90 años recién cumplidos (el 16 de marzo), la estrella cómica por excelencia de los cincuenta y los sesenta, el tipo que convirtió a Dean Martin en un actor serio, aún se permite de vez en cuando ponerse ante las cámaras. El protagonista de 'El ceniciento' (1960) o 'El profesor chiflado' (1963), además de haber puesto voz al padre del profesor Frink en un episodio de 'Los Simpson' en 2003, estrena en este 2016 la película 'The trust', en la que interpreta al padre de Nicolas Cage. Incluso suena para un nuevo proyecto, 'Big finish', junto a Debbie Reynolds y Mary Tyler Moore. Al pie del cañón. Sí señor.A Groucho Marx le gustaba decir que era “tan viejo que aún recordaba cuando Doris Day era virgen”. El inolvidable Groucho nos dejó en 1977, pero la actriz, sobre cuya virginidad sólo podemos añadir que se casó por primera vez en 1941 (con 19 años), sigue entre nosotros. Doris Day (Cincinatti, 1924) debutó en el cine en 1948 con 'Romance en alta mar' y llegó pronto a la cima. En 1956 la llamó Alfred Hitchcock para 'El hombre que sabía demasiado', película en la que además interpretó la canción 'Qué será, será'. No le gustaba nada y lo hizo a regañadientes. Incluso juró que nunca más nadie escucharía ese tema. Sin embargo, la vida es tan cruel que se llevó el Oscar y no se la pudo quitar nunca de encima. Se convirtió incluso en la sintonía de su espectáculo televisivo (1968-1973). Retirada del mundo del espectáculo desde que concluyo 'El show de Doris Day' (1973), ha vivido desde entonces dedicada a la defensa de los derechos de los animales, aunque en 2011 lanzó un disco, 'My heart'.Cordon (Cordon)Qualquiera que haya visto un capítulo de 'Se ha escrito un crimen' está prevenido. No hay nada que acorte más la vida que recibir la visita de Jessica Fletcher. Sin embargo, Angela Lansbury (Londres, 1925) parece absolutamente inmune. A sus 90 años, sigue en activo y no haciendo papelitos cómodos para televisión, sino a función diaria en el teatro. En 2014 se enroló junto a James Earl Jones en la función 'Paseando a Miss Daisy' y ojo a lo que dijo: “Soy demasiado mayor para interpretar a una mujer de 72 años en el cine, pero en el escenario, con maquillaje, aún puedo”. Además de por esta frase, Lansbury será eternamente recordada por una inabarcable carrera como secundaria –'El largo y cálido verano' (1958), 'El mensajero del miedo' (1962)…–. En 2013 recibió el Oscar Honorífico a su trayectoria, que empezó por cierto en 1944 de la mano de George Cukor con 'Luz que agoniza'. Lo recogió tan campante.CordonCon 'Mary Poppins' (1964) y 'Chitty Chitty Bang Bang' (1968), Dick Van Dyke (Misuri, 1925) se ganó la inmortalidad, al menos para la generación que creció en España en los sesenta, despistada por aquellos doblajes neutros que traían las películas Disney. Dick debutó tarde en el cine, con 34 años, después de deambular por distintas series de televisión desde los 28. A esta volvió de forma recurrente (tuvo su propio 'show' en 1988) y, ya en plena madurez, bordó a ese Sherlock Holmes con bata blanca que protagonizaba 'Diagnóstico: asesinato' (1993-2002). Aunque ya no está para andar enredando en las chimeneas, a sus 90 años, Dick acaba de participar en la película 'Life is boring', de Chip Godwin. Un título, por cierto, que no tiene nada que ver con la vida plena que ha llevado.GettyNo falla, cuando uno esta en la playa y mira hacia la orilla, siempre espera ver salir de agua a una sirena en biquini con las curvas inolvidables de Ursula Andress (habrá quien prefiera las de Halle Berry, pero eso no es más que una buena copia). Aquella irrupción en 'Agente 007 contra el doctor No' (1967) la aupó a 'sex symbol' de los sesenta. Si en las películas compartía planos junto a Elvis Presley, Frank Sinatra, Peter Sellers y Woody Allen, en la vida real lo hacía junto a Marlon Brando, James Dean, Ryan O’Neal o John Derek, único hombre con el que ha llegado a casarse. El brillo de su carrera hace tiempo que se apagó. Lo último reseñable fue un papel episódico en 1988 en la serie 'Falcon Crest'. En la actualidad, con 80 años (nació eb Ostermundigen, Suiza, 1936), lucha contra la osteoporosis que ha convertido sus huesos en talco, pero aquella imagen saliendo del agua…En una escena de 'Regreso al futuro' (1985), Marty McFly, que está de viaje a 1955 para asegurarse de que sus padres lo engendren, pilla una guitarra y se pone a tocar 'Johnny B. Goode' ante un enfervorecido público que jamás ha escuchado nada igual. Un avispado productor llama a un tal Chuck y le anuncia que ya tiene el sonido que tanto tiempo lleva buscando. A Chuck no se le ve, es cierto. Seguramente porque, tanto en 1955, como en el 85, como antes de ayer, estaría de gira. La carrera, y la vida (¿acaso hay diferencia?), de este padre del rock and roll (referente absoluto de Rolling Stones, Beatles, The Who y todo dios) es interminable. Está a punto de cumplir los 90 años (nació en Misuri en 1926) y, aunque ya no está para hacer el paso del pato sigue siendo capaz de tocar con mucho sentimiento. Su última gira fue en 2014 y ese mismo año recogió en Estocolmo el premio Polar, considerado el Nobel de la música.CordonA pesar de ser un cascarrabias y de sus bruscos ademanes es imposible no cogerle cariño a Gene Hackman (California, 1930). Lo dio todo en el cine, y ganó su primer Oscar (de los dos que tiene), como Popeye en 'French connection' (1971). Algunos le recordarán haciendo de Lex Luthor con peluca en 'Superman' (1978) y 'Superman II' (1980). En 1992, junto a su amigo Clint Eastwood, volvió a tocar la gloria con 'Sin perdón' y ganó su segunda estatuilla dorada, esta vez como actor secundario. Después, algún que otro trabajo alimenticio (si exceptuamos 'Los Tenenbaums', 2001) y, en 2004, el silencio. Es una forma de hablar, porque, con 100 películas a sus espaldas, el bueno de Gene decidió cambiar de carrera. En 1999 había publicado una novela, junto al submarinista Daniel Lenihan, y con 74 años tomó la decisión de dedicarse en exclusiva a su faceta literaria. Ya ha publicado otros dos libros, pero además pinta, pilota aviones y participa en carreras de coches. Con una vida sí, quién no quiere llegar a los 86 años.Eso de "mala hierba nunca muere" le viene como anillo al dedo a este otro padre del rock (con Chuck Berry y Little Richard, los tres en esta lista), que en octubre cumplió 80 años. Visto su historial pocos habrían apostado que llegaría a tan venerable edad (nació en Luisiana, en 1935). Y mucho menos en libertad. The Killer (El asesino), un apodo muy bien traído, grabó sus primeras canciones en 1952, con 16 años. Un año después se casó con Myra Gale Brown, de 13 años, y ya ni el escándalo ni el éxito lo abandonarían nunca. Divorcios, hijos muertos, canciones como 'Great balls of fire' y la muy sospechosa muerte de su quinta esposa, Shawn Stephens, sólo tres meses después de su boda, jalonan la leyenda de esta estrella a la que, quizá, aún le quede algún capítulo por escribir. De hecho, su último disco, 'Rock & roll time', salió hace apenas dos años, y sigue dando conciertos. Por cierto, acaba de publicarse en castellano su excelente biografía, 'Fuego eterno' (Ed. Contra).CordonEsta actriz londinense de 82 años bien puede aplicarse la famosa frase de Mae West: “Cuando soy buena, soy muy buena, pero cuando soy mala, soy aún mejor”. Lo demostró en 1981 cuando, después de 30 años de carrera, se convirtió en la malvada Alexis Carrington de la serie 'Dinastía'. Durante más de 200 episodios (le serie duró hasta 1989), se dedicó a hacerle la vida imposible a la cándida Krystle (Linda Evans), pero cuando aquello terminó su carrera no volvió a ser la misma. Lo alucinante no es que Collins siga trabajando, sino que desde 2014 lo hace en una serie británica titulada 'Benidorm' y que, efectivamente, se desarrolla en la ciudad alicantina. La actriz da vida a la propietaria de la cadena hotelera que acoge a los ingleses protagonistas de la serie y, ya sea por el maquillaje o por los efectos digitales, lo cierto es que se mantiene prácticamente igual.CordonSi le decimos que Issur Danilovich Demsky cumplió el pasado 9 de diciembre los 99 años, puede que se quede frío. Eso es porque no sabe que este fue el nombrecito que Kirk Douglas (Nueva York, 1916) heredó de sus padres, de origen bielorruso. Ya con el que todos conocemos, el actor campa a sus anchas por Hollywood desde 1941, con películas como 'El loco del pelo rojo' (1956), 'Senderos de gloria' (1957) o 'Espartaco' (1960). Es cierto que su último trabajo data de 2008, pero, al borde de su particular centenariazo, el inolvidable Espartaco no está más acartonado que otros mucho más jóvenes (o sea, de ochenta). Además, de vez en cuando aún se deja ver en algún que otro festejo. En la imagen aparece en la película 'Cosas de familia' (2003), con su exesposa Diana Douglas.Hubo una época, entre los setenta y los ochenta, que era casi imposible encender la tele o ir al cine y no encontrarse con su seductora sonrisa y su pelo perfectamente peinado a raya. Robert Wagner (Detroit, hoy 86 años) lo mismo huía de los nazis en la serie La fuga de Colditz (1972-1974) que del fuego en El coloso en llamas (1974) o de la fuerza de la gravedad en Aeropuerto 79 (1979). Incluso vivió su propio culebrón, cuando Natalie Wood, su esposa, cayó una noche de 1981 por la borda del yate de la pareja, The Splendor. Ella murió y tanto Wagner como su amigo y pasajero en aquella ocasión, Christopher Walken, jamás se quitaron de encima las sospechas. Un caso a la medida del matrimonio Hart, que entre 1979 y 1984 dio de nuevo gloria al actor con la serie Hart y Hart. Aquellos tiempos de gloria quedaron atrás, pero él sigue trabajando, como seguro que saben los seguidores de la serie Navy. Y por si alguien se lo pregunta, Stefanie Powers, su pareja en Hart y Hart, también vive, aunque a sus 74 años, lleva ya un par de años alejada de los platós.CordonImposible hablar de este entrañable cascarrabias sin acordarse de su trabajo en 'Lou Grant' (1977-1982), serie que arrastró hacia las facultades de periodismo a toda una generación. Aquel exigente director de 'Los Angeles Tribune', de honestidad innegociable, provenía sin embargo de la televisión, concretamente de la emisora ficticia WJM, adonde iba a parar Mary Tyler Moore en 'La chica de la tele' (1970-1977). Lou era aquí el jefe de la protagonista y, al cierre de esta serie, tuvo su propio 'spin off' (sí, ya entonces los había). Ed Asner (Kansas City, 1929) no ha parado de trabajar en ningún momento, aunque nunca ha repetido aquellos éxitos. Dando la cara, al menos, porque poniendo la voz a Carl Fredricksen, otro gruñón adorable, el entrañable abuelo de 'Up' (2009), tuvo un nuevo momento de gloria. A sus 86 años, Asner sigue a tope.EverettAl final habrá que dar la razón a los que ven algo diabólico en el rock, porque Little Richard (Georgia, 1932), que forma junto a Chuck Berry y Jerry Lee Lewis una especia de Santísima Trinidad de la inmortalidad, parece haber hecho un pacto con el diablo. El autor de 'Tutti frutti' o 'Long tall Sally' ganó un concurso local de jóvenes talentos en 1951 y estuvo aporreando las teclas de su piano hasta 2009, año en el que sufrió una operación en la cadera y decidió retirarse. En realidad no era la primera vez que lo hacía. En 1957, durante una gira por Australia, vio la luz mientras observaba desde la ventanilla del avión cómo ardía uno de los motores y se hizo ministro pentecostal. En 1962 volvió a la música, intentando compaginar sin éxito las drogas y la vida religiosa (al final ganó la fe y, por ende, su salud). Actualmente vive retirado y, ya con 83 años, se prodiga poco en público.Supercalifragilísticoexpialidoso. Nunca un palabro tan enrevesado se hizo tan popular. Los logopedas del mundo no dejan de sorprenderse. Era 1964 y 'Mary Poppins' irrumpió en los cines cautivando a niños y adultos. No había día torcido que no se enderezara con esas canciones y esos bailes. Gracias a este papel Julie Andrews (Londres, 1935) ganó su primer y único Oscar. Un año después, en 1965, protagonizó el musical ‘Sonrisas y lágrimas’. Solo estas dos películas le convierten en leyenda. Pero su vida también ha tenido sus sombras: en 1999, con 64 años, la actriz demandó a dos prestigiosos doctores a los que acusaba de haber destruido su voz y su carrera después de someterla a un operación de las cuerdas vocales de la que casi no se recupera. En 2000 la reina Isabel II de Inglaterra otorgó a Andrews el título de Dama Comendadora de la Excelentísima Orden del Imperio Británico. A pesar de sus 80 años, Julie sigue a tope: está a punto de dirigir ‘My fair lady’ para la ópera de Australia en el Sydney Opera House. Como dice su personaje en 'Mary Poppins': "La vida está ahí afuera esperándote. Ve y alcánzala".En 1973 se convirtió en el nuevo James Bond tomando el relevo a Sean Connery y no hubo quien le quitara el traje del agente 007 hasta 1985. Han pasado 30 años desde que Sir Roger Moore (Londres, 1927) perdiera la licencia para matar pero, con licencia o sin ella, aún tiene mucho por lo que luchar. Es embajador de buena voluntad de Unicef desde 1991 y, a sus 88 años, dedica todos sus esfuerzos a causas humanitarias. A pesar de que su generación es otra, se ha adaptado sin problemas a las nuevas tecnologías: sus cuentas de Twitter y de Facebook son la perfecta muestra de su agitada vida social. Conocedor del noble arte de pedir matrimonio, su primera boda fue en 1946, pero tuvo que casarse tres veces más y esperar 50 años hasta encontrar la armonía marital que ha conseguido junto a la sueca Kristina Tholstrup, su cuarta mujer. Hace tiempo que no se deja ver demasiado en la gran pantalla: la última película en la que participó fue ‘La Princesa de Castlebury Hall’, en 2011. Sin embargo, esta baja productividad en la industria no ha impedido que en 2007 le concedieran su propia estrella en el paseo de la fama de Hollywood.Hugh Hefner (Illinois, 1926) es probablemente uno de los hombres más envidiados que habita sobre la faz de la Tierra. Este señor de 90 años ha logrado que vivir rodeado de sugerentes mujeres cuente como parte de su jornada laboral. Lleva 60 años al frente de 'Playboy' (bueno, ahora delega la empresa su hijo Cooper, de 25 años), una de las revistas eróticas más populares del mundo. Precursor del erotismo gráfico en la década de los cincuenta, Hugh ha creado un imperio plagado de mujeres, que el día que van más abrigadas se embuten en un biquini. Con 86 años, después de dos matrimonios fallidos, el magnate se casó con Crystal Harris (en la foto, con él), a la que conoció en una fiesta de Halloween que Hefner organizó en su mansión. La joven por aquel entonces tenía 25 años. Algunos pensarán que casarse con una mujer a la que le sacas más de 60 años es algo excéntrico, pero no hay límites para Hugh. ¿Su última extravagancia? Poner en venta su mansión con una pequeña condición: él va incluido en el lote, como si fuera un electrodoméstico más de la cocina.Betty White (Illinois, 1922), la actriz que conquistó al público de los ochenta con su interpretación de la ingenua Rose Nylund en ‘Las chicas de oro’, tiene 94 años y muy pocas ganas de quedarse en casa haciendo ganchillo. En 2011, con 89, obtuvo una nominación a un Emmy por su papel en la serie ‘Hot in Cleveland’ (‘Póquer de reinas’ en España), donde interpretaba a la octogenaria y sarcástica Elka. A su entrega a la actuación hay que sumarle los paseos que se da por los juzgados desde el pasado mes de marzo, cuando una de las empleadas del hogar encargada de cuidar a la actriz la demandó por no pagarle y por hacerle trabajar más horas de las que le correspondían. Además, desde 2012 Betty tiene su propia estatua a tamaño real en el prestigioso museo Madame Tussauds de Washington. Y es muy moderna: tiene hasta Instagram. Por cierto, sus otras tres compañeras en 'Las chicas de oro' ya no están entre nosotros.He aquí dos de las grandes musas rubias de Alfred Hitchcock en una imagen reciente: Tippi Hedren (Minnesota, 1930) y Kim Novak (Illinois, 1933). Hitchcock descubrió a Hedren en un anuncio de televisión y puso Hollywood a sus pies con películas como ‘Los pájaros’ y ‘Marnie, la ladrona’. Pero fue un regalo envenenado. Obsesionado con ella y (dicen) dolido porque la actriz no quiso mantener relaciones con él, Hitchcock se empeñó en destruir la carrera que él mismo había creado, impidiendo que Tippi trabajara con directores como Truffaut. En 1957, con 27 años, Tippi se convirtió en madre de Melanie Griffith. Hedren es hoy una señora inquieta que ha creado su propia fundación, Shambala, en la que trabaja para defender los derechos de los animales. Por su parte, Kim Novak, considerada un mito sexual en su época, protagonizó ‘Vértigo’, de Hitchcock, en 1958. Al contrario que Tippi, no duda en defender al director: “Conmigo o con cualquier otra persona siempre fue un caballero”. Diagnosticada de bipolaridad, la actriz siempre ha sentido que encerraba muchas personalidades. En 2014, con 81 años, acudió a la gala de los Oscar con una actitud un tanto perturbadora que desató todo tipo de burlas en las redes sociales. Días después la actriz admitió que antes de acudir a la ceremonia había tomado medicamentos para relajarse, que le provocaron lentitud de movimientos y una alteración en los gestos de la cara. Afortunadamente, actualmente se encuentra en buena forma dedicada a criar a caballos en su rancho.