La toponimia y las lenguas españolas
Recibo periódicamente mensajes de lectores que se quejan de que sigan apareciendo en las páginas de EL PAÍS, escritos en castellano, nombres de capitales de provincia o autonomías españolas donde el catalán, el gallego y el vasco son idiomas cooficiales junto al castellano. En los últimos días me han escrito por este motivo dos lectores que apoyan su protesta en leyes aprobadas en la etapa democrática.
Lo que motivaba el mensaje de una lectora, Eva Fuentes, era un artículo del blog ‘El Comidista’ que figura en la portada digital de EL PAÍS. En dicho artículo (No es el garrafón, eres tú) me explicaba, se utilizan los topónimos deturpados de ‘La Coruña’ y ‘Tuy’, cuando los topónimos oficiales son ‘A Coruña’ y ‘Tui’.
He escrito un par de comentarios en el artículo para recordar que la Ley 3/1983 de Normalización Lingüística dice en su artículo nº10 que ‘los topónimos de Galicia tendrán como única forma oficial la gallega’.
Esta lectora añade: Le agradecería que interviniese para corregir este error, que supone un ultraje para mi tierra y mi idioma. Es una pena que un blog que tanto me ha gustado siempre haya hecho algo así y, encima, que ante los numerosos comentarios de sus lectores, no haga nada.
Mikel Iturriaga, responsable de ‘El Comidista’ responde:
El texto al que se refiere la lectora no era mío, sino de Mar Calpena. En cualquier caso, como responsable de ‘El Comidista’, lo único que puedo decir es que en el caso de ‘A Coruña’ la lectora tiene toda la razón. He corregido el error en cuanto lo he conocido, y no puedo más que pedir disculpas a los coruñeses, a los gallegos y a todas las personas sensibles con la toponimia de todo el planeta.
Debo precisar, no obstante, un par de cosas. En primer lugar, no hay nada ‘deturpado’, es decir, deformado, en los términos ‘La Coruña’ o ‘Tuy’, son simplemente los nombres castellanos de ambas localidades. En segundo lugar, como señala Alex Grijelmo, que supervisa el Libro de Estilo de este periódico desde hace años: La ley que cita la lectora no es de aplicación a los periódicos, sino a la Administración. No hay ninguna ley que le diga a la prensa española cómo debe escribir nada. Por otra parte, y aunque el Libro de Estilo recomienda que se escriba ‘A Coruña’, los blogs de EL PAÍS no están obligados a atenerse a dicho texto salvo en lo relativo a los principios éticos.
Y, a todo esto, lo que dice el Libro de Estilo sobre cómo escribir los nombres de ciudades de comunidades con idiomas propios aparte del castellano, es más amplio y complejo. Les cito el párrafo esencial:
Para los textos escritos en castellano, los nombres de poblaciones españolas deberán escribirse según la grafía aceptada oficialmente por el correspondiente Gobierno autónomo, que no siempre es la castellana. Las excepciones a esta norma son sólo las recogidas en este Libro de Estilo; entre ellas figuran los nombres de todas las comunidades autónomas, regiones, provincias o capitales de provincia. Por ejemplo, se escribirá ‘Cataluña’, y no ‘Catalunya’. No contarán entre estas excepciones los nombres catalanes de Lérida y Gerona, que se escribirán según la grafía catalana (es decir, ‘Lleida’ y ‘Girona’); ni los de Orense y La Coruña (‘Ourense’ y ‘A Coruña’).
En caso de ser igualmente válidas las dos grafías, la castellana y la del otro idioma oficial de la comunidad, se optará por la primera, como sucede, por ejemplo, con Vitoria (‘Vitoria-Gasteiz’).
El criterio se ha fijado atendiendo a la ‘toponimia mayor’ y ‘toponimia menor’, que Alex Grijelmo explica así: Se considera ‘toponimia mayor’ a las grandes ciudades y capitales, que suelen tener traducción a otros idiomas. Y ‘toponimia menor’, a las poblaciones pequeñas (que suelen reproducirse en otras lenguas con su grafía original autóctona).
En el Libro de Estilo, la toponimia menor se mantiene en el idioma oficial de la comunidad autónoma (aunque, obviamente, el castellano es lengua cooficial en todas ellas). Los únicos nombres de ‘toponimia mayor’ que se mantienen en la lengua autóctona son ‘Lleida’, ‘Girona’, ‘Ourense’ y ‘A Coruña’. No hay ninguna regla que justifique esta excepción, pero sí algunas razones que recogía el propio Grijelmo en un artículo publicado hace tres años bajo el título: El catalán de Don Quijote.
De hecho, EL PAÍS utiliza las grafía catalana en las dos únicas provincias que tienen nombres diferentes en castellano y en catalán (Gerona/Girona, Lérida/Lleida), ya que Barcelona y Tarragona no plantean dudas. Lo mismo puede decirse en el caso de las provincias y capitales de provincia gallegas. ¿Qué ocurre con las vascas? El Libro de Estilo mantiene la grafía castellana, lo que llevó a otro lector, Iñaki Bordes, a escribirme el 17 de febrero, el siguiente mensaje:
¿Podrían acordarse, por favor, de la Ley 19/2011, de 5 de julio, por la que pasan a denominarse oficialmente Araba/Álava, Gipuzkoa y Bizkaia las demarcaciones provinciales llamadas anteriormente Álava, Guipúzcoa y Vizcaya? Hoy mismo, en el mapa en el que se señalan el descenso del precio de la vivienda por provincias, han olvidado esa ley que les señalo.
Ya hemos dicho que las leyes no obligan a los periódicos a elegir la grafía que utilizan en sus textos. Aun así, quizás sería necesario revisar este punto, porque no tiene sentido escribir las capitales catalanas y gallegas en catalán y en gallego respectivamente, y no respetar el mismo criterio con las vascas, las valencianas o las mallorquinas.
Comentarios
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.