La húngara Vajda amarga el estreno de Anand

Ayer fue uno de los días más felices en la vida de Szidonia Vajda-Lazarne, de 37 años, una gran maestra húngara que casi nunca había sido noticia fuera de su país. Hizo tablas en la ronda inaugural del Tradewise de Gibraltar con el pentacampeón del mundo Viswanathan Anand, quien no había jugado un torneo abierto en los últimos 23 años. Otra sorpresa importante fue el empate del chino Yangyi Yu ante el desconocido suizo Alexandre Vuilleumier.

“Es el resultado más asombroso de mi carrera. Estaba convencida de que iba a perder. Mi aspiración era no hacerlo rápido, jugar a mi mejor nivel. Incluso pensaba que el final de cuatro alfiles estaba perdido, pero tampoco tenía nada mejor, así que entré en eso y logré salvar la partida. Pero hasta el último minuto no me sentí segura de evitar la derrota”, explicó Vajda, todavía aturdida, pocos minutos después de aceptar el empate ofrecido por el indio.

La húngara, de procedencia rumana, cuyo hermano Levente también es gran maestro, campeona femenina de Hungría en 2004 y 2015, después de ganar con Rumania en el Europeo femenino de Naciones de 1999, admitió que había tenido suerte: “Vishy suele cambiar bastante sus aperturas, pero hoy me ha permitido aplicar una preparación casera que me ha dado una posición más o menos sólida, aunque inferior”.

Una hora después, el indio llegó a la cena de gala que ofreció la ministra de Turismo de Gibraltar, Samantha Sacramento, en el puerto deportivo, y se fue directamente a saludar a un grupo de colegas compatriotas. No estuvo muy elocuente sobre la partida: “Digamos que, casi sin darme cuenta, la partida ha desembocado en una posición en la que ya no podía ganar porque ella no tenía suficientes debilidades para perder. No creo que haya ningún momento clave ni nada parecido. Es muy simple, no he podido ganar”.

Curiosamente, el actual campeón del mundo, Magnus Carlsen, también empató la primera ronda de un torneo abierto con una jugadora de segunda fila (aunque más fuerte que Vajda), la georgiana Nino Batsiashvili, hace un mes en Catar. El noruego ganó después el torneo con brillantez, y no se debe descartar que Anand haga lo mismo en Gibraltar porque la enorme dureza de esta competición casi garantiza que los demás favoritos también tropezarán algún día con rivales inferiores en teoría.

El artífice principal del torneo, Brian Callaghan, pronunció un emotivo discurso durante la citada cena, en el que pronosticó: “Los torneos abiertos del tipo de Gibraltar o Catar van a ser cada vez más importantes. Casi todos los mejores ajedrecistas del mundo, masculinos y femeninos, han pasado ya por Gibraltar, conviviendo aquí con centenares de aficionados. Estoy convencido de que el futuro del ajedrez debe ir en esa dirección”.