Serkan (26 años) busca trabajo tras regresar del servicio militar y subraya la necesidad de "echar del Gobierno al AKP y su corrupción". Por eso votará al socialdemócrata CHP, pese a que su líder, Kemal Kiliçdaroglu, no le entusiasma: "Lo voto porque son el principal partido de la oposición, pero Kiliçdaroglu es bastante tonto". Su amigo Mehmet (27 ños), que atiende un colmado, optará por los islamistas sin mucha convicción: "A mí también me enfadan los casos de corrupción del Gobierno, pero los demás partidos también robarían si gobernasen". Los dos jóvenes, residentes en el conservador barrio de Fatih (Estambul), se quejan además de que la llegada de miles de refugiados sirios —por la política de puertas abiertas del Gobierno— ha elevado muchísimo el precio de los alquileres.ANDRÉS MOURENZAAli Osman (56 años) votará al AKP porque cree que la actual ola de violencia que vive el país es una conspiración de poderes extranjeros, como afirma el Gobierno: "Si los europeos no apoyasen a grupos terroristas como el PKK [kurdo], no tendríamos estos problemas". Él acaba de jubilarse tras décadas trabajando en la construcción, un sector que ha sufrido un importante auge durante las tres legislaturas de Gobierno islamista. "Si el AKP recupera la mayoría absoluta, todo se solucionará y todo volverá a ir bien".ANDRÉS MOURENZAHacer (42 años) y Zuhal (46), dependientas en una tienda de ropa, no saben a quién votar. "No nos fiamos de las promesas de ningún partido, porque al final lo único que hacen es proteger sus intereses", dice Hacer. "Antes votábamos al AKP, porque mejoró la sanidad y el transporte público —añade Zuhal—, pero ya no lo votamos porque ha sido corrupto y ha atizado la guerra, lo que ha provocado mucha inestabilidad". Según Zuhal, la inestabilidad política y la apuesta del Gobierno por las grandes superficies y centros comerciales "han dañado mucho" al pequeño comercio: "Desde hace cuatro o cinco años las cosas comenzaron a ir a peor. Hace dos años tuve que cerrar mi propia tienda y volver a trabajar de dependienta para otros".ANDRÉS MOURENZARidvan (23 años) y Beytullah (19 años), camareros en un restaurante, votarán al partido izquierdista prokurdo HDP: "Confiamos en su líder, Selahattin Demirtas, porque es honesto. Esperamos que el AKP pierda el poder, se acabe la violencia y podamos volver a vivir como hermanos". El regreso de la guerra a las zonas kurdas y los atentados vividos por Turquía en los últimos meses, tras lo que ven la mano del Gobierno islamista, han reducido el número de turistas, de los que depende su restaruante. Además, confían en las promesas de mayores ayudas sociales del HDP: "La situación para los jóvenes es mala, el salario mínimo [296 euros netos] es muy bajo y muchos no encuentran trabajo. Mi hermano, que es profesor, lleva dos años esperando destino, porque no abren nuevas plazas en la enseñanza", apunta Beytullah.ANDRÉS MOURENZAEste joven kurdo de 25 años, que vive en Estambul, se queja del estado de la economía, que ha hecho caer a la mitad las ventas de su comercio, dirigido a los turistas rusos. "Pero no es culpa del Gobierno, sino de la anarquía provocada por fuerzas que no quieren que nuestro país se desarrolle". Este joven dice que le causa "mucha tristeza" ver cómo la zona kurda de la que procede se ve de nuevo sumergida en la violencia, tras dos años en que el proceso de paz había llevado "estabilidad a la zona". "La culpa es del [grupo armado kurdo] PKK, que al ver que el AKP [islamista] se debilitaba en las elecciones de junio, trató de sacarle provecho. Por eso votaré al AKP y espero que tenga mayoría absoluta".ANDRÉS MOURENZASena tiene 21 años. Es estudiante de Ingeniería Alimentaria en la Universidad de Estambul, en Turquía. El domingo votará al principal partido de la oposición, el socialdemócrata CHP, porque "pone énfasis en la justicia social". Esta joven estambulí cree que se repetirán los resultados de los comicios de junio, en los que el partido islamista gobernante, el AKP, perdió la mayoría absoluta, y que se deberá pactar una coalición: "Creo que eso será mejor para el país. A fin de cuentas, si un partido gobierna en solitario es más difícil que su gestión sea equilibrada o que se audite su comportamiento". Sena es partidaria de una "gran coalición" entre socialdemócratas e islamistas, porque eso "suavizará la actual tensión política".ANDRÉS MOURENZASaadetin (60 años) vive con una pensión de 310 euros: "Con este Gobierno los precios han subido. En Estambul es imposible encontrar pisos de alquiler por menos de 300 euros. ¿Cómo se puede vivir así? El pan, la gasolina, el agua, la electricidad… todo está por las nubes, porque la mitad de lo que pagas son impuestos para el Estado". La falta de un sistema eficiente de recolección de impuestos hace que la mayor parte de la presión fiscal recaiga en el IVA y otras tasas indirectas. "Todo va a peor: hay violencia y bombas, mueren civiles y militares. Hasta este año apoyaba al AKP, pero nunca más. Votaré al CHP porque hay que probar cosas nuevas, no pueden gobernar siempre los mismos".ANDRÉS MOURENZA
![Ali Osman (56 años) votará al AKP porque cree que la actual ola de violencia que vive el país es una conspiración de poderes extranjeros, como afirma el Gobierno: "Si los europeos no apoyasen a grupos terroristas como el PKK [kurdo], no tendríamos estos problemas". Él acaba de jubilarse tras décadas trabajando en la construcción, un sector que ha sufrido un importante auge durante las tres legislaturas de Gobierno islamista. "Si el AKP recupera la mayoría absoluta, todo se solucionará y todo volverá a ir bien".](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/W5M6PN7PHNOMFILICGIHL3FRP4.jpg?auth=37144109bd7348ac63b4b27fa747553caca1cacb70b646a97b40a2263731c0b5&width=414)
![Ridvan (23 años) y Beytullah (19 años), camareros en un restaurante, votarán al partido izquierdista prokurdo HDP: "Confiamos en su líder, Selahattin Demirtas, porque es honesto. Esperamos que el AKP pierda el poder, se acabe la violencia y podamos volver a vivir como hermanos". El regreso de la guerra a las zonas kurdas y los atentados vividos por Turquía en los últimos meses, tras lo que ven la mano del Gobierno islamista, han reducido el número de turistas, de los que depende su restaruante. Además, confían en las promesas de mayores ayudas sociales del HDP: "La situación para los jóvenes es mala, el salario mínimo [296 euros netos] es muy bajo y muchos no encuentran trabajo. Mi hermano, que es profesor, lleva dos años esperando destino, porque no abren nuevas plazas en la enseñanza", apunta Beytullah.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/6FHYZEQ62ZMN7CJFKTUWZB6TYY.jpg?auth=3f232049c80f485465c3b9e9cea26780e7d39736e111c658805a70afbc558c03&width=414)
![Este joven kurdo de 25 años, que vive en Estambul, se queja del estado de la economía, que ha hecho caer a la mitad las ventas de su comercio, dirigido a los turistas rusos. "Pero no es culpa del Gobierno, sino de la anarquía provocada por fuerzas que no quieren que nuestro país se desarrolle". Este joven dice que le causa "mucha tristeza" ver cómo la zona kurda de la que procede se ve de nuevo sumergida en la violencia, tras dos años en que el proceso de paz había llevado "estabilidad a la zona". "La culpa es del [grupo armado kurdo] PKK, que al ver que el AKP [islamista] se debilitaba en las elecciones de junio, trató de sacarle provecho. Por eso votaré al AKP y espero que tenga mayoría absoluta".](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/A5OTLXW3SBNGVBHSJ6WAEA24DY.jpg?auth=bddbca69af02faa2912e0111d0301bcdead05e8b5365aa5e01d1eac10e456228&width=414)
