Pablo devasta Filipinas
El paso por el sur de Filipinas del tifón Pablo, conocido internacionalmente como Bopha, ha dejado 149.000 casas destruidas y al menos 902 muertos, cifra que se espera que aumente, ya que hay alrededor de 570 desaparecidos que se teme se hayan ahogado en inundaciones o hayan quedado sepultados por aludes.
En cuanto a damnificados la cifra se eleva a 5,4 millones, de los cuales más de 100.000 personas se han visto obligadas a abandonar sus casas ante la llegada del tifón.
El temporal ha azotado en especial las provincias de Davao Oriental y Valle de Compostela, por lo que el Gobierno y las guerrillas maoístas han acordado un alto el fuego temporal para garantizar la atención a los damnificados.
Y en este desolador contexto, urge ahora que la comunidad internacional se haga eco de la solicitud de Naciones Unidas de que se lleven a cabo donaciones para suministro de alimento, bebida, medicamentos y un refugio seguro a los damnificados, así como para la reconstrucción de las localidades de un país devastado.— David Pérez
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