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Paulina Rubio y Colate, crónica de una ruptura anunciada

Nicolás Vallejo-Nágera confirma vía exclusiva en la revista '¡Hola!', su separación de la cantante mexicana tras muchos meses de especulaciones

C. H.
Paulina Rubio y Colate, en septiembre de 2011.
Paulina Rubio y Colate, en septiembre de 2011.GTRES

Era un secreto a voces. En México, la noticia se daba por cierta desde hace meses, a pesar de que ninguno de los dos había hablado en público del tema: Colate y Paulina Rubio se han separado. Pero la confirmación de boca de uno de los implicados solo llegó a través de una exclusiva, probablemente millonaria. La revista ¡Hola! publica una extensa entrevista en la que Nicolás Vallejo-Nágera expone su visión y sus razones de por qué se ha terminado el matrimonio, que, según sus palabras, no comparte hogar desde noviembre del año pasado.

“He hecho todo y más para reconducir la situación”, reconoce el empresario, que se casó con la cantante mexicana hace cinco años en una lujosa ceremonia en la Riviera Maya (que, por cierto, también fue cubierta en exclusiva por la misma publicación que hoy confirma la ruptura). “Y cuando digo todo, es todo. He sacrificado lo que tenía en mi vida por esta relación. Por eso, aunque me encuentre mal, estoy tranquilo de saber que no he podido hacer más”.

Los rumores del empeoramiento de la relación empezaron a surgir poco después de la boda de la pareja y se intensificaron meses antes del nacimiento de Nicolás, su único hijo, que llegó al mundo en noviembre de 2010. Sin embargo, no ha sido hasta enero de este año cuando la noticia se dio por confirmada en los medios mexicanos. Una información del programa de Antena 3 Espejo Público, que aseguraba que el matrimonio ya no compartía techo, se extendió como la espuma en el país latinoamericano. Y, por mucho que intentaron desmentirlo, no hubo vuelta atrás.

En las páginas de ¡Hola!, Colate reconoce que la separación ha sido de mutuo acuerdo, aunque pone énfasis en que ha sido él quien ha tenido más fuerza “a la hora de llevarla a cabo”. Quizás porque también se adjudica un mayor esfuerzo cuando ambos tuvieron la oportunidad de arreglar la situación. “No reprocho nada a Paulina”, dice el empresario, “aunque me habría gustado que hubiera hecho más por salvar nuestro matrimonio”. Y añade: “A Paulina le importan cosas distintas que a mí. En mi opinión, no ha dado la importancia que se merecía a nuestra relación dentro de su mundo. Creo que ha fallado la comunicación y entender las necesidades de la persona con que vives”.

Vallejo Nágera se muestra además, arrepentido de haber dejado de lado su carrera para apoyar la de su mujer: “Eso me ha ocasionado muchos problemas que me están saliendo muy caros y que, al final, también han sido negativos para nuestra relación”, sentencia. Y enfrenta a quienes lo consideran un mantenido. “Al dejar de lado mi trabajo y con la situación económica mundial, también estoy pasando por muy malos momentos. Pero no he recibido ninguna ayuda ni de mi mujer ni de nadie”.

Es al hablar de su hijo cuando recupera el ánimo. Asegura que por estar cada día junto a él, ha decidido quedarse a vivir en Estados Unidos y confirma que su nacimiento pospuso la ruptura varios meses. “La llegada de Nicolás nos dio fuerzas para luchar y momentos de máxima felicidad, pero la situación ya era complicada, y un hijo no arregla un matrimonio”.

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Sobre la firma

C. H.
Periodista chilena afincada en Madrid desde 2003, comenzó su carrera en el diario El Mercurio de Santiago y desde 2006 forma parte de EL PAÍS. Trabaja en la Unidad de Edición tras pasar por las secciones de Gente, Televisión y Redes Sociales. Es licenciada por la Pontificia Universidad Católica de Chile y por la Universidad Complutense de Madrid.

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