Montilla recurre a dinero privado para avalar sus promesas electorales

José Montilla, presidente de la Generalitat, está lanzado a publicitar las propuestas que se compromete a hacer realidad si logra la reelección. El martes prometió un fondo de 2.000 millones de euros para crear empleos relacionados con la sostenibilidad ambiental; ayer, otra inversión, de 20 millones de euros ampliables a 100, para ayudar a las pymes en invertir en investigación y desarrollo. Todo ello sumado a otros dos fondos presentados durante la precampaña, uno para ampliar la Ley de Barrios y otro para combatir la pobreza. ¿De dónde sacará el dinero que exigen estas acciones, en plena crisis económica? La respuesta es fácil pero toda una novedad en los discursos de la izquierda catalana: de la financiación mixta, con esfuerzos del erario público y el aval de empresas privadas.

Ayer, en la presentación del nuevo fondo para pymes , Montilla ya concretó que se nutriría tanto "de dinero público como privado", igual que los otros tres fondos prometidos.

Más Metro nocturno

En una declaración en la que, como viene siendo habitual en él esta precampaña, no aceptó preguntas, justificó la inversión argumentando que "en las universidades se hace mucha investigación, pero ésta no llega fácilmente a las pymes ". Según Montilla, a menudo esta falta de comunicación provoca que las pymes inviertan en trabajos ya desarrollados en las universidades. Por ello, el fondo iría destinado a empresas que ejercen de puente entre las pymes y los centros de investigación. Montilla presentó por la tarde una segunda propuesta: abrir el Metro los viernes por la noche.

La propuesta que hizo el martes, el fondo de 2.000 millones de euros para crear 20.000 empleos verdes , compite directamente con Iniciativa, paladín en reclamar un nuevo modelo económico sostenible. El candidato ecosocialista, Joan Herrera, se lo tomó con deportividad. En una rueda de prensa organizada por Efe, Herrera valoró ayer la propuesta de Montilla y evitó responder si se trataba de una estrategia del PSC para arañarle votos. Sin embargo, cuestionó que con el bajo nivel impositivo de España se puedan sufragar estas promesas.

ICV tiene en su programa un plan de ocupación dotado con 1.800 millones de euros que incluye los empleos verdes. Y el candidato trazó la hoja de ruta para sufragarlo: mayor presión fiscal, con impuestos sobre las grandes fortunas, la energía nuclear, la emisión de gases de efecto hivernadero; y una lucha más eficaz contra el fraude.

Pese a las divisiones entre los socios del tripartito durante la precampaña, y con PSC y ERC rechazando la reedición del tripartito, Herrera se mostró seguro de que, en caso de sumar, las tres formaciones unirían sus fuerzas para evitar una victoria de Mas.