El Gobierno exige "lealtad y respeto" a la Iglesia

La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha calificado el encuentro celebrado entre el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, y el presidente de la Conferencia Episcopal, Antonio María Rouco Varela, como "normal y obligado" dentro del diálogo Iglesia-Estado. La número dos del Gobierno ha destacado que la Iglesia cuenta con su "respeto y lealtad", y ha pedido lo mismo de la jerarquía eclesiástica hacia el Ejecutivo socialista.

De la Vega ha informado también a la prensa en un breve comentario antes de las preguntas que Zapatero y Rouco han intercambiado opiniones sobre la próxima visita del Papa Benedicto XVI para la que el presidente ha ofrecido todo el "apoyo necesario".

Ya a preguntas de los periodistas, la portavoz del Gobierno, que ha insistido en el carácter "positivo" de la cita, ha reconocido que en la reunión se ha hablado de la reforma de la Ley de Libertad Religiosa, aunque ha dejado para el futuro concretar las líneas que maneja el Ejecutivo socialista de cara a esta modificación. Durante la reunión, Zapatero y Rouco han hablado también de la polémica asignatura de Educación para la Ciudadanía, aunque, según la vicepresidenta, las "discrepancias" se abordarán siempre desde el "respeto".

Zapatero se ha reunido este mediodía en el Palacio de la Moncloa con Rouco Varela, su primer encuentro desde que el arzobispo de Madrid volviera a encabezar en marzo la jerarquía eclesiástica española. Se trata, según fuentes de la Conferencia Episcopal Española (CEE), de una reunión habitual cuando los obispos eligen a su nuevo presidente, como ya ocurrió en 2005 cuando Zapatero recibió a Ricardo Blázquez. La Conferencia Episcopal emitirá un comunicado durante la tarde.

Rouco, uno de los prelados más críticos con las iniciativas del Gobierno de Zapatero durante la pasada legislatura, fue elegido presidente de la CEE al obtener dos votos más que Blázquez. En su primera comparecencia pública ofreció a la "autoridad política" la colaboración leal de los obispos, bajo el principio del bien común. En su primera comparecencia en el Congreso esta legislatura, De la Vega anunció que el Ejecutivo reformará la ley orgánica de Libertad Religiosa de 1980 para adecuarla al actual pluralismo religioso y garantizar la libertad de conciencia.

Por su parte, el PSOE acordó en su último Congreso Federal la progresiva desaparición de símbolos religiosos en los espacios públicos y actos oficiales de Estado, revisar la ley del aborto y regular el derecho a una muerte digna. En unas recientes declaraciones, Rouco calificó de "normales" las relaciones entre la Iglesia católica y el Estado y avanzó también su interés en pedir la cooperación del Ejecutivo para organizar la Jornada Mundial de la Juventud que presidirá el Papa Benedicto XVI en Madrid en 2011.