Familiares, Michelle Williams y Cate Blanchett, en el funeral de Heath Ledger

La familia del actor Heath Ledger ha celebrado hoy en la ciudad australiana de Perth un funeral privado por el artista fallecido el mes pasado. Al funeral han asistido, entre otros, su ex Michelle Williams, la actriz Cate Blanchett y la modelo Gemma Ward, entre otros. Unas 600 personas, aparte de decenas de periodistas, se personaron en la iglesia del colegio privado femenino de Penrhos para dar el último adiós al protagonista de "Destino de caballero".

Williams, de 27 años, apareció con un traje beis y gafas oscuras sin Matilda, la hija de dos años que tuvo con Ledger, pero acompañada por la hermana del actor. Según declaraciones de testigos a la prensa, en el templo se escuchó una de las canciones favoritas del último Casanova de la pantalla grande, "The Times They Are A Changing", de Bob Dylan, y había un cartel que rezaba: "Esta sala rebosa del amor que todos sentimos por un gran amigo que será echado de menos por todos".

La ceremonia duró una hora y cuarto y en ella los padres y la hermana de Ledger, entre otros, ofrecieron un panegírico de su juventud y logros. Cate Blanchett recordó anécdotas de cuando rodaron juntos. Otras celebridades que acudieron al funeral fueron los actores Joel Edgerton, Bryan Brown, Noni Hazelhurst y el deportista Ben Cousins.

Está previsto que Heath Ledger sea incinerado hoy en el cementerio de Fremantle de Perth, su ciudad natal, y reposará en el mausoleo familiar junto a la tumba de sus abuelos.

Kim Ledger, padre del protagonista de Brokeback Mountain, había pedido a los periodistas antes de comenzar los actos que respetasen la privacidad con la querían celebrarlos. "Sé que muchos de vosotros habéis viajado desde todas las partes del mundo para informar de la ceremonia. Sólo les pido que respeten nuestra intimidad. Va ser un funeral muy privado. Sólo habrá diez personas, la familia más cercana y nadie más", dijo Kim Ledger, a lo que añadió que "apreciamos el apoyo emocional de todo el mundo".

El actor, que interpretó el último Joker en la nueva versión de "Batman" que se rodaba, murió el 22 de enero en su apartamento en el barrio neoyorquino de Manhattan a los 28 años de edad, posiblemente de una sobredosis accidental de medicamentos.