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Tyson pasa por la casilla de la cárcel

El ex boxeador cumple con su condena de un día de prisión y es puesto en libertad

Como si de una partida de Monopoly se tratara Tyson ha cumplido su turno de castigo en la casilla de la cárcel y ahora ya puede seguir. El ex campeón del mundo de los pesos pesados ha pasado sin incidentes por un centro penitenciario de Arizona acatando el día de prisión a que fue condenado por conducir en estado de embriaguez y estar en posesión de cocaína, y ayer fue puesto en libertad.

Tyson paso las 24 horas con total normalidad, haciendo las comidas de la prisión y leyendo el libro American Gangster mientras estaba vestido con ropa interior de color rosa y el uniforme de rayas negras y blancas que corresponde al centro penitenciario.

El ex campeón de los pesados estuvo en Tent City, una cárcel al aire libre situada cerca de una perrera y un depósito de chatarra y basura. Los agentes de la oficina del sheriff del Condado de Maricopa (Arizona) confirmaron que Tyson fue puesto en libertad ayer, después de haber cumplido con la sentencia.

Tyson, de 41 años, estuvo recluido en una zona diferente de donde se encontraban el resto de los 1.500 presos que hay dentro de la prisión. El ex campeón mundial de los pesos pesados se declaró culpable en septiembre pasado por el delito de tenencia de cocaína y por uno menor al conducir su automóvil bajo la influencia del alcohol.

Tyson se enfrentaba a una sentencia máxima de cuatro años y tres meses en prisión tras haber sido detenido por la policía en la localidad de Scottsdale, en el estado de Arizona, en diciembre del 2006. La policía le ordenó detenerse tras salir de un club nocturno. Un agente le vio aspirar una sustancia blanca del salpicadero de su BMW color negro y noto que hablaba con voz entrecortada.

Cocaína en los bolsillos

Las autoridades indicaron que encontraron bolsas de cocaína en los bolsillos de Tyson y en su vehículo. "Tomo la responsabilidad de mis acciones", dijo Tyson ante la juez Helene Abrams. Tyson fue sentenciado a un día de cárcel por conducir en estado de embriaguez y recibió otros tres años de libertad condicional por posesión de cocaína y el pago de una multa.

Además, el que fuese el campeón del mundo más joven en la historia del boxeo del peso pesado tendrá que someterse a varios controles de drogas y cumplir con 360 horas de trabajo comunitario. El fiscal Shane Krauser había solicitado un año de cárcel al mencionar que Tyson es reincidente, recordar sus problemas anteriores con la justicia y que ahora ha buscado ayuda para el tratamiento de su drogadicción.

"De acuerdo a mis cálculos, la juez le ha concedido la cuarta o quinta oportunidad a Tyson", declaró Krauser al valorar la sentencia ofrecida por Abrams. Por su parte, Adams manifestó que le había impresionado el hecho que Tyson hubiese solicitado por si mismo recibir terapia para corregir su problema de la adicción a las drogas.

"Está trabajando para superar la adicción y un comportamiento autodestructivo", comentó Abrams, quien también recibido cartas de dos de las ex esposas de Tyson solicitando indulgencia para el ex campeón del mundo, que se encuentra arruinado, en parte, por todos los millones que les tuvo que dar con las demandas de divorcio. Abrams le recordó a Tyson que la lucha por la sobriedad y el control personal es una labor de cada día.

Mike Tyson, a su salida de la Corte Criminal de Brooklyn, en Nueva York, en enero de 2004
Mike Tyson, a su salida de la Corte Criminal de Brooklyn, en Nueva York, en enero de 2004REUTERS

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