Britney mueve ficha, en busca de la redención
La cantante paga las multas pendientes, atenta a la resolución de la custodia de sus hijos
Britney Spears no logra salir del ojo del huracán. A punto de lanzar su nuevo trabajo, quiere recuperar la normalidad y la custodia de sus hijos, que actualmente viven con su padre por decisión judicial. Por ello, ha decidido colaborar con la justicia y ha acudido voluntariamente a una comisaría de Los Ángeles para hacer frente a las multas de los últimos meses.
La cantante permaneció allí, según fuentes policiales, alrededor de 45 minutos solucionando sus asuntos. "Ha colaborado en todo momento con la policía", destacó el agente Mike López a US Magazine, quien añadió que la estrella del pop había permanecido tranquila mientras se la fichaba oficialmente.
"Hemos registrado sus datos en un ordenador y hemos recogidos sus huellas, después resolvió lo que tenía pendiente y se fue", comentó. Concretamente, Britney acudió a abonar una multa correspondiente a una denuncia que se le interpuso el pasado agosto, cuando la estrella del pop estacionó, en un aparcamiento público, frente a un coche al que le produjo varias abolladuras.
La cantante abandonó el lugar tras comprobar que su vehículo no sufría ningún daño, sin embargo, el dueño del coche perjudicado llamó a la policía para que hiciera un informe de los daños.
Esta actitud de Britney puede hacerle ganar puntos ante la justicia, después de que el pasado 1 de octubre un juez le retirara la custodia de sus hijos. Actualmente Spears tiene el caso recurrido y actuaciones como esta podrían hacer cambiar la decisión del tribunal.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.