40 minutos sobre Barajas soltando carburante

Un avión de Air Comet que realizaba el trayecto Madrid-San José de Costa Rica regresó anoche al aeropuerto de Barajas por un aviso de problemas técnicos en un ala, que luego resultó ser falso. Como tenía que descargar el combustible antes de aterrizar, estuvo 40 minutos sobrevolando el aeródromo mientras soltaba el carburante. Los pasajeros, que tenían que haber salido a las 14.00 y que no dejarían Madrid hasta 12 horas después, protagonizaron una protesta para denunciar el trato recibido. Un grupo de 50 pasajeros, a los que la misma compañía había dejado en tierra el sábado por overbooking, llegaron a amotinarse a bordo y se negaban a bajar del aparato. Air Comet acumula una cadena de retrasos e incidencias en los últimos tres días.

El vuelo de Air Comet 981 salió hacia San José de Costa Rica a las 18.00 horas de ayer, cuatro después de lo previsto, por un problema operativo, según explicaron varios de sus pasajeros y confirmó la compañía. Cuando el avión llevaba unos 40 minutos en el aire, el comandante del vuelo comunicó al pasaje que tenían que regresar a Barajas porque se había detectado un problema en los flaps, que son una parte móvil del ala, que ayuda al despegue y aterrizaje de la aeronave.

La alerta, activada

Tras descargar combustible durante otros 40 minutos para poder realizar el aterrizaje, en lo que el aparato estuvo sobrevolando el aeródromo, el avión tomó tierra en Barajas sobre las 20.00 horas sin incidentes, aunque en el aeropuerto se activó la alerta local, que implica el despliegue de fuerzas de Seguridad, Bomberos y equipos sanitarios por si es necesaria su intervención. En este caso no hizo falta.

Una vez en tierra, la compañía procedió a desembarcar el vuelo para su revisión, pero unos 50 pasajeros se negaron a bajar hasta que se les asegurase por escrito que volarían en las próximas horas y que durante ese tiempo serían bien atendidos, explicó uno de los pasajeros, Ignacio Gómez. Este viajero debía haber volado a San José de Costa Rica el pasado sábado, pero sufrió un exceso de venta de billetes (overbooking), que, según su relato, fue "a dedo" y "no por orden de llegada como debería ser", ya que, "en lugar de dejar en tierra a los pasajeros que facturaron más tarde, no embarcaron aquellos que habían adquirido el billete por su cuenta, como, por ejemplo, por Internet".

Gómez detalló que la compañía le ofreció al grupo de una veintena de afectados ir a un hotel hasta el lunes cuando volarían en un avión sobre las 14.00 horas. Este viajero denunció "el gran trastorno" que supone este retraso en el viaje, ya que supone la pérdida de excursiones previamente concertadas. Antes de embarcar ayer en el vuelo a Costa Rica, este pasajero repartió en el aeropuerto de Barajas decenas de octavillas en las que advertía de que "Air Comet engaña y estafa diariamente a cientos de pasajeros".

Tras sufrir el incidente de anoche, este pasajero y otros se negaron a bajar del avión hasta que una persona de la compañía les asegurase por escrito que iban a volar en las próximas horas y que bien tratados hasta entonces y "no como hasta este momento", dijo Gómez. Finalmente, la compañía consiguió convencer a todos los pasajeros del vuelo para que abandonasen el avión y se trasladasen junto al resto del pasaje a un hotel en el que permanecieron hasta que el vuelo salió, sobre las 2.00 horas. La compañía precisó que el regreso del avión a Barajas se debió a "un falso aviso de avería en los flaps" que finalmente se demostró que no era tal.

Otro motín en la T2

Además de esta incidencia, los pasajeros de otro vuelo de Air Comet con destino a París protagonizaron también ayer una protesta en la zona de embarque de la Terminal 2, que obligó a intervenir a la Guardia Civil para aplacar sus ánimos. El vuelo 234 con destino a París debía salir a las 15.00 pero no lo hizo porque "fue acumulando una demora hasta que finalmente se vio que no iba a llegar a tiempo antes de que cerrasen el aeropuerto correspondiente". Este vuelo ha salido finalmente a las 6.00 de hoy.

El subdirector general de la compañía, Fernando Gil, ha pedido hoy disculpas a los pasajeros afectados por los diferentes retrasos que sufre la aerolínea desde el pasado sábado, ha asegurado que se les da "la mayor atención posible" y ha prometido que los vuelos volverán a la normalidad "al final del día de hoy o mañana". Otras fuentes de la compañía lamentan los problemas, que atribuyen "en parte a la mala suerte". Las mismas fuentes precisan que tienen dos nuevos aviones desde hace tiempo, pero no pueden ser utilizados porque falta una autorización de Aviación Civil.