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Comienza en Alicante la demolición parcial del mayor complejo hotelero de las costas europeas

La empresa encargada del derribo de las zonas sin licencia afirma que concluirá en unos tres meses

La promotora de un macrohotel levantado en la playa de la localidad alicantina de La Vila Joiosa, el Atrium Beach, ha comenzado hoy los trabajos para demoler la nada desdeñable superficie de 15.100 metros cuadrados que el complejo tiene de más con respecto al proyecto original. Como consecuencia de este exceso de volumen, partes del establecimiento hotelero, el más grande de Europa en primera línea de mar, no tenían su correspondiente licencia y eran ilegales. En el derribo, ordenado por las autoridades, se usan varios robots dirigidos por control remoto.

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Los trabajos de demolición responden a la sanción que puso al Atrium el Ayuntamiento de La Vila Joiosa y que ratificó la Consejería de Territorio y Vivienda. Se prevé eliminar 80 de las 1.400 habitaciones del hotel, las ubicadas en la penúltima planta del complejo. La empresa contratada para realizar la demolición, la sociedad Alicantina de Cortes, calcula en tres meses la duración de los trabajos gracias al uso de robots dirigidos por control remoto, la misma técnica que se usó en la demolición del Windsord en Madrid. Se emplearán "todos los robots que sean necesarios", según ha explicado hoy su gerente, Francisco Serra.

El derribo de los 15.100 metros cuadrados sobrantes para poder legalizar las obras iba a comenzar ayer, pero se ha retrasado a hoy por una avería de un camión grúa durante el trayecto. Esta maquinaria es imprescindible para proceder al izado de uno de los robots debido a su peso y dimensiones. Se ha previsto, en principio, el uso de dos robots grandes, aunque para adelantar los plazos es previsible que se añadan dos más pequeños, para cuya elevación a las plantas superiores no sea necesaria la presencia de una gran grúa. Su alquiler cuesta 4.000 euros al día por unidad. Del complejo anunciado en su día, desaparecerán espacios comunes, áreas de servicios y administración, zonas de ocio y habitaciones hasta completar la superficie que debe ser demolida por exigencia de las administraciones públicas.

Temor por la estructura antisísmica

Los primeros trabajos consisten en la demolición de los castilletes de la planta 20, aunque también se procederá a eliminar por "el sistema de mordaza o presión todo el forjado de esa planta y se bajará con bateas a la calle", ha indicado Serra. Los robots que se emplearán son eléctricos, guiados por control remoto, "lo cual da mucha seguridad", y el procedimiento es por presión, no por percusión, "con lo que no se daña el resto del forjado", según el gerente. El método permite, además, separar el hormigón del hierro para favorecer el reciclado, de modo que "se obtiene un escombro muy pequeño, fácil de cargar, que después se acopia y se traslada a vertederos homologados", ha añadido. La promotora del complejo sostiene que la demolición no se centre en exclusiva en las plantas superiores de la edificación, ya que la estructura antisísmica del inmueble se vería fuertemente dañada.

Por ello, la demolición afecta a las partes que permitan simultanear ésta con el afianzamiento del resto de la estructura, aunque ello suponga multiplicar el coste con respecto al que supondría aliminar forjados de mera cubrición. Las obras del complejo hotelero-turístico Atrium Beach, situado en primera línea de La Cala de La Vila Joiosa, una zona muy urbanizada y de gran valor económico, están paralizadas desde septiembre de 2003 por exceder el inmueble la altura fijada en el proyecto inicial. Ese mismo mes, antes de suspender la construcción, murieron tres trabajadores en las obras.

El alcalde de La Vila (del PP) dictó hasta siete decretos para paralizar las obras, pero no puso medio alguno para hacerlos efectivos. De hecho, los accidentes mortales se registraron después de emitirse los decretos. El 20 de mayo de 2005, el pleno del Consell desestimó el recurso presentado por el constructor y ratificó la sanción de 12.020.000 euros, así como el criterio de demolición de las partes de la edificación que no cuentan con la correspondiente licencia.

Un robot especializado lleva a cabo el derrumbe de las partes del establecimiento sin licencia.
Un robot especializado lleva a cabo el derrumbe de las partes del establecimiento sin licencia.EFE

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