Un senador del PP acusa a Conde-Pumpido de "ponerse del lado de los terroristas"

El portador de Justicia del PP en el Senado, Agustín Conde, ha pedido la dimisión del fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, y le ha acusado de "ponerse del lado de los terroristas" durante la Comisión de Justicia que ha tenido lugar esta tarde en la Cámara, tras la postura de la Fiscalía de apoyar el recurso interpuesto ante el Tribunal Supremo por el etarra Henri Parot contra la doble acumulación de condenas realizada por la Audiencia Nacional. Aunque la presidenta de la Comisión, María Antonia Martínez, ha pedido a Conde que retirase la expresión que situaba al fiscal del lado de los terroristas, el representante del PP se ha negado a rectificar porque considera que lo que ha querido decir es que "la Fiscalía se puso del lado del recurrente". Conde-Pumpido ha comparecido hoy en el Senado a petición del Grupo Popular para explicar el cese de Eduardo Fungairiño como fiscal jefe de la Audiencia Nacional.

El fiscal general se ha defendido al explicar que cuando se examina un recurso, lo único que importa es si tiene razón en Derecho o no, "sin mirar quién está detrás" de dicho recurso. "Ponerse de parte del Derecho no es estar de acuerdo con el terrorista o el violador", ha dicho Conde-Pumpido, y ha reafirmado que ésta será la forma en la que seguirá actuando la Fiscalía. En su segunda intervención, Agustín Conde ha denunciado a la Fiscalía de no estar del lado de la opinión pública, "como hizo el Tribunal Supremo". Esta actitud ha motivado un rifirrafe con la presidenta de la comisión, que ha pedido al representante del PP que no agravara más la imputación que había hecho al fiscal general en su intervención anterior y le ha llegado a amenazar con retirarle el uso de la palabra al comprobar que seguía por la misma línea.

Relevo de Fungairiño

En cuanto al motivo de su comparecencia, Conde-Pumpido ha explicado que planteó a Fungairiño que presentara su renuncia voluntaria con el fin de no tener que iniciar un expediente de remoción. "Fue cabalmente entendido y aceptado por él", ha dicho. Los motivos del relevo no fueron otros que los ya explicados en multitud de ocasiones: "falta de fluidez en la transmisión de las informaciones", "malos entendidos" o "actuaciones no suficientemente ajustadas al sentido y los objetivos de las instrucciones que se impartían desde la Fiscalía General".

Aunque, según ha señalado, podía haber optado por esperar al relevo ordinario de Fungairiño, Conde- Pumpido ha explicado que habría sido una "temeridad" por su parte, ya que "esos conatos de fuego" podrían terminar por "desencadenar un incendio capaz de causar un serio daño a la institución". Conde-Pumpido ha subrayado que su decisión no era ni "un capricho, ni una decisión inspirada por criterios personales, o de afinidad".

Para el portavoz del PP, el proceso de relevo de Fungairiño es "lo más parecido a una película de mafiosos en la que le vinieron a decir: si te portas bien tendrás una plaza en el Tribunal Supremo". Conde se ha preguntado por qué si el ex fiscal jefe de la Audiencia tenía su departamento "en llamas", el fiscal general no le exigió responsabilidades disciplinarias.