Estabilizado un incendio tras quemar 868 hectáreas y herir a cinco bomberos
Los Bomberos de la Generalitat continúan con las labores de extinción
El cuerpo de bomberos ha conseguido estabilizar el incendio declarado ayer en varios municipios de la comarca de Bages y que ha quemado ya 868 hectáreas, según datos provisionales de Agentes Rurales. De la superficie abrasada, 836,9 corresponden al término municipal de Balsareny; 27,1 al de Castellnou de Bages, donde se inició el fuego, y 4,41 al de Sallent. El fuego ha afectado en su mayor parte a terreno arbolado, matojo y también pastos y cultivos.
Los Bomberos de la Generalitat continúan trabajando en la zona del incendio con un total de 95 dotaciones terrestres, de las que 30 son de mando y 65 son autobombas rurales. Hacia las 06,30 horas de hoy se han incorporado a las tareas de extinción los medios aéreos con dos helicópteros bombarderos y un tercero de mando. Según informa hoy el Servicio Catalán de Tráfico, ya se ha restablecido la circulación en las carreteras que habían quedado afectadas por el incendio.
En este incendio resultaron ayer heridos cinco bomberos cuando participaban en las tareas de extinción. El fuego también obligó a desalojar a cerca de 200 niños que estaban en una casa de colonias mientras que fueron evacuados los vecinos de unas 20 viviendas del núcleo Vilafruns de Sallent y los trabajadores de la mina Iberpotash.
El fuego se inició hacia las 14.46 horas del lunes en una zona cercana a la urbanización de La Figuerola de Castellnou. Los vecinos de esta urbanización, desalojados, fueron trasladados al pabellón deportivo de Santpedor, y los 195 niños y monitores que estaban de colonias fueron desplazados a la escuela Riu d'Or de Santpedor. De los niños, 120 permanecen en la escuela de Santpedor y el resto han regresado a Vacarisses (Barcelona), población de la que procedían.
Uno de los bomberos heridos fue trasladado al hospital Valle Hebrón de Barcelona tras sufrir una intoxicación por inhalación de humo, y otro fue evacuado al Hospital de Manresa tras sufrir quemaduras de primer grado en la cara y de segundo en las manos. Otro bombero sufrió quemaduras leves en la cara y manos y pudo reincorporarse a las tareas de extinción tras ser atendido por los servicios médicos de los Bomberos de la Generalitat, mientras que los dos restantes sufrieron esguinces de tobillo.
Daños materiales
Las llamas también han causado daños materiales en la parte exterior de la industria minera Iberpotash, situada en Balsareny, y a un edificio anexo a la misma, en un pajar de la Torre d'en Roca situado junto al kilómetro 65 de la C-16, y en elementos exteriores de tres granjas y también han resultado afectados dos vehículos autobombas pesados.
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